Bruselas exige a Espa?a que recupere 104 millones de ayudas a Puigner¨®

Bruselas exigi¨® ayer a las autoridades espa?olas que recuperen las ayudas p¨²blicas, con intereses, concedidas en la d¨¦cada de los noventa a Puigner¨®, que fue la mayor textil catalana y que, diezmada, contin¨²a sus actividades tras haber suspendido pagos a finales de 2000. La deuda con la Agencia Tributaria y la Seguridad Social asciende a 104 millones de euros, y el Instituto Catal¨¢n de Finanzas (ICF) le concedi¨® pr¨¦stamos y avales por valor de 21,6 millones. La Comisi¨®n Europea considera la "omisi¨®n" de la devoluci¨®n de esta deuda como ayudas de Estado. La empresa se?ala que "ya ha cumplido con su parte".

Bruselas advierte de que un acreedor privado nunca hubiera permitido "tal acumulaci¨®n" de deudas y habr¨ªa intentado "su recuperaci¨®n forzosa". El tono del Ejecutivo comunitario fue de gran dureza, ya que acus¨® a las autoridades espa?olas de haber permitido, al no recuperar las ayudas, que la empresa continuara produciendo e incluso lanzara campa?as de venta a bajo precio, "posponiendo su inevitable reestructuraci¨®n" y permitiendo que "se falseara" la competencia "en detrimento de las empresas que deben mantenerse a flote en el mercado con sus propios recursos y esfuerzo".

Fuentes de la Comisi¨®n a?adieron que "Espa?a est¨¢ obligada a exigir al beneficiario que devuelva las ayudas" aunque una empresa pase, como era el caso de Puigner¨®, por una situaci¨®n financiera y social delicada.

Deberes

El Departamento de Econom¨ªa y la direcci¨®n de la textil se escudaron en que la decisi¨®n de Bruselas no se les hab¨ªa comunicado oficialmente para eludir una declaraci¨®n. Sin embargo, el director general de Puigner¨®, Pere Punt¨ª, coment¨® a este diario estar "muy tranquilo porque", asegur¨®, "nosotros hemos hecho nuestra parte, hemos hecho los deberes".

Los "deberes" son, por una parte, un plan de viabilidad para intentar salvar la empresa, pero reorientada a la actividad de acabados y con s¨®lo una cuarta parte de la plantilla preexistente, de 1.800 empleados. Puigner¨® ha cerrado y espera vender su planta de Roda de Ter y tambi¨¦n la de Prats de Llu?an¨¨s. En Sant Bartomeu del Grau, se enfrenta este a?o a un nuevo adelgazamiento de la plantilla que afectar¨¢ a m¨¢s de 50 personas. Pero estos planes tienen sentido en el marco de los convenios que Puigner¨® cerr¨® el a?o pasado con sus acreedores, tanto ordinarios como preferentes. Entre estos ¨²ltimos figuran la Seguridad Social y Hacienda. Seg¨²n estos convenios, la deuda a los preferentes se devolver¨¢ en dos fases: el 40% de los 104 millones en tres a?os con el dinero de la venta de la planta de Roda y el resto en 12 a?os.

"Ya hay un acuerdo con los acreedores, que Bruselas o ignora o no comenta. Para nosotros, el caso est¨¢ resuelto", a?ade Punt¨ª, quien conf¨ªa en el levantamiento de la suspensi¨®n de pagos dentro de unas semanas. Pero tanto estos acuerdos como el plan de viabilidad del director general empezaron a dise?arse hace dos a?os, mientras que las deudas contra¨ªdas que la Comisi¨®n considera "ayudas de Estado" son previas a la suspensi¨®n de pagos, con un pasivo de 138 millones de euros, a finales de 2000. Las autoridades de la Competencia subrayan que "una parte importante de la deuda sigui¨® impagada durante m¨¢s de cinco a?os".

Ni el valor de las propiedades hipotecadas ni el de las embargadas era "suficiente para garantizar" las deudas pendientes de pago, se?ala la Comisi¨®n, que critica que las autoridades espa?olas "no procedieron a la recuperaci¨®n por la v¨ªa ejecutiva", ni aun cuando la textil "incumpli¨® los acuerdos de reprogramaci¨®n de la deuda que hab¨ªa suscrito".

Sobre los avales y pr¨¦stamos otorgados por el ICF en 1993, 1996 y 1998 (que incluyen un pr¨¦stamo de 12 millones de octubre de 2000 cuya devoluci¨®n Puigner¨® reconoce que debe negociarse), Bruselas constata que "la garant¨ªas no eran suficientes" para que la empresa pudiera volver a ser viable y, por tanto, cree que "estas medidas son una ayuda de Estado".