El ingenio de Mariscal, en una plaza de M¨®stoles

El nuevo inquilino de piedra y plantas que ocupa la glorieta de Europa, en M¨®stoles, ha suscitado un acalorado debate entre conductores, paseantes, pol¨ªticos y hasta ecologistas. Todo el mundo dice que es un teatro, pero a distancia s¨®lo se ven dos grandes torres met¨¢licas a las que les empieza a crecer vegetaci¨®n, una gran duna delantera y, al fondo, un edificio de metal y cristales.

Muchos automovilistas que frecuentan la rotonda se olvidan de ceder el paso por mirar el conjunto, y la parada del autob¨²s que est¨¢ a los pies del teatro se ha convertido en improvisado foro de discusi¨®n: "Me gusta m¨¢s el edificio que las torres gemelas que le han puesto delante", dec¨ªa ayer una mujer mientras se anudaba la bufanda. "Mujer, es que no se van a ver las torres porque van recubiertas de plantas, que lo he o¨ªdo en la radio", le contestaba su compa?era de viaje.

Lo cierto es que la ¨²nica obra que el dise?ador valenciano Javier Mariscal tiene en la regi¨®n no deja indiferente a nadie. El jard¨ªn "casi marciano", como el propio artista lo calific¨®, comenz¨® a construirse en agosto de 2002, a la par que iba progresando el proyecto del teatro, obra del arquitecto Miguel Verd¨².

"La gente se preguntar¨¢ si es jardiner¨ªa, escultura o paisajismo. Al verlo todo junto vamos a pensar: ?hostia, qu¨¦ raro!", avanz¨® el propio Mariscal al presentar su proyecto. Y, a decir del edil de Cultura de M¨®stoles, Iv¨¢n Garc¨ªa, del PSOE, lo ha conseguido: "Es un original jard¨ªn arquitect¨®nico que contar¨¢ con dos felinos vegetales a la entrada y otras esculturas en las que el artista mezcla magn¨ªficamente lo natural con lo artificial", define Garc¨ªa. "La idea era que desde lejos se pudiese observar una gran arquitectura vegetal, y que, de cerca no se vieran m¨¢s que plantas, eliminando la tentaci¨®n de cometer actos vand¨¢licos. Creo que lo hemos conseguido".

Adem¨¢s de las torres de hasta 18 metros de altura recubiertas de plantas y de las dunas de tierra armada con vegetaci¨®n, el dise?ador valenciano le ha puesto p¨¢jaros met¨¢licos al jard¨ªn y un nombre al teatro, Teatro del Bosque. Este nombre ir¨¢ colocado a la entrada del recinto cultural, en el suelo, y en letras de metal.

Todo el conjunto le ha costado al Ayuntamiento 2,6 millones de euros, a los que hay que sumar otros 5,1 millones de presupuesto para la construcci¨®n del teatro. Esta cifra sobrepasa un 305 por ciento el coste que se aprob¨® en el a?o 1999, seg¨²n la denuncia del PP, en la oposici¨®n, que considera "fara¨®nicas" las obras.

El arquitecto Miguel Verd¨² ha levantado un edificio de 4.780 metros cuadrados con cubiertas y fachadas inclinadas, "que acent¨²an el dinamismo de los espacios que se abren en abanico hacia el parque y las calles que rodean el teatro", seg¨²n proclama el proyecto. En el interior, la caja esc¨¦nica est¨¢ concebida a la italiana y el aforo es de 646 butacas. La amplitud del inmueble ha desatado las quejas del grupo ecologista Los Verdes, cuyo portavoz, Vicente Sesmero, opina que el Consistorio mostole?o tiene que aplicarse una multa de 601 euros por comerse 23 metros de acera en la rotonda y dos m¨¢s en la calle Juan de Oca?a.

Tanto el nuevo teatro como su entorno verde se van a inaugurar el pr¨®ximo 8 de marzo en una fiesta, con Mariscal y Verd¨² como invitados de honor.