Nadar en aguas dif¨ªciles
Esther Rituerto va a abandonar estos d¨ªas la que ha sido su casa profesional durante los ¨²ltimos 15 a?os, la SEPI, antes Teneo y antes el INI. No se va muy lejos, porque desde su nuevo cargo de consejera delegada de Izar sigue pegada al sector p¨²blico, del que se conoce todas sus tripas, y a sus problemas. La empresa de construcci¨®n naval, resultante de la fusi¨®n de Astilleros Espa?oles y la militar Baz¨¢n, ha torcido su rumbo y ha cosechado 132 millones de euros de p¨¦rdidas el a?o pasado, frente a los 33 previstos. As¨ª que llega con una clara misi¨®n: poner orden y conseguir que los astilleros, pesadilla de SEPI durante mucho tiempo, sean viables.
?Con qu¨¦ ¨¢nimo afronta su nueva responsabilidad? Seg¨²n sus colaboradores -ella no ha querido hacer ning¨²n tipo de declaraci¨®n-, con el mismo con el que acomete cualquier proyecto. Con un ah¨ªnco que, pese a no ser una persona pr¨®xima ni excesivamente afable, consigue transmitir a un equipo bien cohesionado y eficaz. La seriedad y capacidad de trabajo que los que la conocen le atribuyen la han colocado durante muchos a?os en la elaboraci¨®n de los m¨¢s importantes proyectos del sector p¨²blico. Ha supervisado las ofertas de todas las privatizaciones, ha discutido hasta la saciedad con los bancos de inversi¨®n sobre la valoraci¨®n de las compa?¨ªas a vender, y se ha mojado en operaciones tan dificultosas como la integraci¨®n de Construcciones Aeron¨¢uticas (CASA) en el conglomerado europeo EADS, una de las cosas de las que se siente m¨¢s orgullosa. Desde sus responsabilidades en Planificaci¨®n y Control, tambi¨¦n se ha tragado alg¨²n que otro marr¨®n. No hace mucho tuvo que explicar a los sindicatos, con los que mantiene unas correctas relaciones, la nueva situaci¨®n de Babcock Wilcox, otro grano de la SEPI.
Pese a su alto perfil profesional -durante muchos a?os ha sido la ¨²nica mujer en la ejecutiva del grupo p¨²blico-, esta riojana, licenciada en F¨ªsicas, casada y con dos hijos, hace los esfuerzos posibles por mantenerse en la sombra. Le espantan las fotos y las apariciones en p¨²blico.
En el otro lado de la balanza, en el platillo de las aficiones, le gusta el campo y le apasiona la m¨²sica, con una especial debilidad por el flamenco. Tambi¨¦n le gusta el deporte, que practica cuando puede, y en el que desarrolla muchas de las cualidades que luego vierte en el despacho. Es met¨®dica, ordenada y sabe dirigir y trabajar en equipo. Le encanta nadar. Y, en el terreno profesional, ahora lo har¨¢ en aguas dif¨ªciles.
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