EE UU abre en el Norte una cabeza de puente

Ateridos bajo la granizada, los mil paracaidistas de la 173? Brigada Aerotransportada de EE UU llegados de madrugada al Kurdist¨¢n iraqu¨ª cavaban trincheras a media ma?ana de ayer en torno a la pista de aterrizaje de Harir, 70 kil¨®metros al noreste de Erbil, para asegurar la cabeza de puente de una ofensiva militar contra Bagdad desde el norte.

Aunque tal vez no fuera imprescindible dar un golpe de mano sobre un aer¨®dromo en buen estado y controlado por milicias aliadas, la operaci¨®n ha sido sin duda uno de los lanzamientos de paracaidistas m¨¢s importantes desde la II Guerra Mundial.

El control de los yacimientos de petr¨®leo ser¨¢ la gran batalla del frente norte

Ha sido uno de los lanzamientos de paracaidistas m¨¢s importantes desde la II Guerra Mundial

Tras la llegada de cerca de tres centenares de miembros de las Fuerzas Especiales (comandos), que aterrizaron el domingo en el aer¨®dromo de Suleimaniya a bordo de aviones de transporte, la operaci¨®n de Harir es el mayor despliegue de fuerzas terrestres de EE UU en el norte de Irak desde el estallido del conflicto. Pero todav¨ªa es un contingente insignificante, a la vista de los 125.000 soldados, con cobertura de carros de combate y artiller¨ªa, con los que cuenta el r¨¦gimen de Sadam Husein en la regi¨®n. Washington dispone, sin embargo, del apoyo de m¨¢s de 60.000 milicianos kurdos armados con apenas fusiles de asalto, pero que conocen perfectamente el campo de batalla Y, por supuesto, Washington mantiene una abrumadora superioridad a¨¦rea.

Mientras los soldados chapoteaban entre el barro y los peshmergas (milicianos) kurdos les proteg¨ªan del acoso de decenas de periodistas, una base militar estadounidense cobraba forma ayer en el fondo de un valle del Kurdist¨¢n. Cuerpo a tierra en varios nidos de ametralladoras, los norteamericanos vigilaban los accesos desde la cercana carretera, donde una patrulla conjunta de paracaidistas y peshmergas controlaba el paso hacia la cercana poblaci¨®n de Bashur. En la cabecera de pista hab¨ªa estacionados dos grandes helic¨®pteros de transporte y m¨¢s de una decena de veh¨ªculos.

La principal misi¨®n de los paracaidistas de la 173? Brigada Aerotransportada de EE UU, con base en Vicenza (Italia), es ahora asegurar el control sobre el aer¨®dromo para garantizar el transporte de material militar hasta el frente norte: tanques ligeros, carros de combate Bradley y blindados de transporte de tropas, encuadrados en la 63? Brigada Acorazada, con base en Bilsek (Alemania).

Por su parte, un portavoz del Ministerio de Defensa de Irak asegur¨® ayer en Bagdad que la llegada de los paracaidistas no hab¨ªa sorprendido a sus defensas antia¨¦reas, que, seg¨²n dijo, lanzaron 44 misiles Tarek y 7 misiles Raad (trueno) sobre la zona de lanzamiento. "El desembarco no nos cogi¨® de sorpresa", afirm¨® el general Hazem al Raui en una rueda de prensa.

En los alrededores de las pista de aterrizaje de Harir no se observaban ayer impactos producidos por la ca¨ªda de misiles. Los habitantes de las aldeas kurdas m¨¢s cercanas tampoco informaron de que se hubiesen registrado ataques con cohetes.

El lanzamiento de paracaidistas de EE UU coincide en el tiempo con las primeras se?ales de actividad en el frente kurdo, congelado desde 1991. Las milicias kurdas informaban ayer de que hab¨ªan ocupado posiciones abandonadas poco antes por el Ej¨¦rcito iraqu¨ª tras haber sido sometidas a intensos bombardeos por la aviaci¨®n estadounidense.

Periodistas presentes en Chamchamal confirmaban anoche que las fuerzas de la Uni¨®n Patri¨®tica del Kurdist¨¢n (UPK), hegem¨®nicas en el sur del territorio aut¨®nomo, controlaban trincheras y b¨²nkeres machacados en los ¨²ltimos d¨ªas por las bombas de EE UU en lo alto de las colinas que dominan el paso fronterizo de la carretera de Suleimaniya a Kirkuk. Otro tanto ocurr¨ªa, en Dola Bakra, en la l¨ªnea de contacto de la carretera que une Erbil con Kirkuk, aunque esta vez las fuerzas que avanzaron fueron las del Partido Democr¨¢tico del Kurdist¨¢n (PDK), que domina la zona norte.

La lucha por el control de los yacimientos de petr¨®leo que rodean a Kirkuk y Mosul (en cuya direcci¨®n tambi¨¦n se escucharon explosiones ayer desde Erbil) ser¨¢ previsiblemente la gran batalla del frente norte, antes de que EE UU pueda lanzar una ofensiva contra Tikrit, ciudad natal y feudo de Sadam Husein, y Bagdad. Tal vez el anunciado avance de las milicias kurdas s¨®lo se deba a un repliegue t¨¢ctico iraqu¨ª hacia posiciones m¨¢s seguras, pero, de hecho, ha roto por primera vez el frente norte de Irak.