El futuro del celuloide

Hugo, un chaval de 15 a?os, no s¨®lo se ha quedado sin novia, sino que ¨¦sta se ha ido con su peor enemigo del instituto. Adem¨¢s, sus padres no lo comprenden y su hermano peque?o estudia m¨¢s que ¨¦l y es el mejor jugando al f¨²tbol. Y por si esto no fuera suficiente, por m¨¢s que estudia matem¨¢ticas, no logra aprobar los ex¨¢menes. Y as¨ª es la vida de Hugo, "un asco".

Aunque en estas l¨ªneas se pueden ver reflejados los problemas y anhelos de muchos j¨®venes, Hugo no existe, s¨®lo es el protagonista del corto Mi vida es un asco, realizado por Celia Valdivia y su pandilla, que ha obtenido el premio Los j¨®venes vistos por los j¨®venes del concurso Pantalla Corta organizado por el Instituto Andaluz de la Juventud (IAJ) de Ja¨¦n.

Todo empez¨® cuando Celia y sus amigos, estudiantes de 4? de ESO, vieron el anuncio del concurso en su instituto, el IES San Juan de la Cruz de ?beda (Ja¨¦n). Entonces, explica Celia, se nos ocurri¨® la idea de participar, "aprovechando que mis padres se acababan de comprar una c¨¢mara de v¨ªdeo". A partir de aqu¨ª vinieron las reuniones entre los intercambios de las clases de lengua, matem¨¢ticas o filosof¨ªa, y tambi¨¦n durante los recreos, en los que aprovecharon para escribir el gui¨®n y planificar las escenas que ten¨ªan que grabar. No hubo duda en la elecci¨®n del tema, eligieron uno en el que son "expertos en la materia": la vida cotidiana de un chico de 15 a?os, con sus problemas y deseos, que va presentando a su familia y a sus amigos.

Y as¨ª, sacando tiempo de aqu¨ª y all¨¢, porque estaban "con los ex¨¢menes encima", los doce amigos se repartieron entre las funciones de gui¨®n, producci¨®n, direcci¨®n, montaje e interpretaci¨®n, que sin ser conscientes de ellas en un primer momento, empezaron a ejercer.

"En un principio pensamos que todo iba a ser m¨¢s f¨¢cil, pero luego... las diez secuencias que pens¨¢bamos grabar en una tarde se convirtieron en dos", reconoce Celia. "Esto fue lo que m¨¢s nos impresion¨® a todos". Porque nunca, ni Mar¨ªa Isabel, Alfonso, Elena, Miguel o Juan Diego, como el resto de la pandilla, hab¨ªan sostenido entres sus manos una c¨¢mara de v¨ªdeo. S¨®lo Celia, bromeando, recuerda haber grabado alguna vez a su perra Tula, pero para ella "eso no cuenta". Y pasando "mucha verg¨¹enza", sobre todo en las secuencias que grabaron en la calle "con todo el mundo mirando", con tan s¨®lo una v¨ªdeo c¨¢mara y un cassette para meter la banda sonora, acabaron el corto "justo a tiempo" para presentarlo al concurso.

Ahora ya est¨¢n pensando en realizar un segundo trabajo que estar¨¢ relacionado con los "sue?os" de cada uno de ellos. "Nos gustar¨ªa grabar c¨®mo seremos dentro de 20 a?os", anticipa Celia, mientras reconoce que le gustar¨ªa trabajar dentro de lo que es el mundo audiovisual.

Todos se muestran de acuerdo en reconocer que lo del concurso "ha sido lo de menos". Nunca imaginaron que ahora su pel¨ªcula se est¨¦ exhibiendo en Ja¨¦n y despu¨¦s en otros pueblos de la provincia junto al resto de cortos premiados y presentados en el concurso. Pero sin duda, afirman que lo m¨¢s importante de toda esta experiencia es el recuerdo de los buenos momentos que han pasado juntos. Una pandilla que se conoce "de siempre" y que lamenta que cuando llegue el bachillerato y despu¨¦s la universidad, se vean obligados a separarse.

Mientras tanto, han decidido seguir explorando juntos el nuevo mundo que acaban de conocer y que anteriormente a Mi vida es un asco, se limitaba a ir al cine los fines de semana con un cart¨®n de palomitas.