De la meseta
La columna Mesetarios, de Moncho Alpuente (2 de abril) en EL PA?S Madrid, la suscribo de principio a fin. Alpuente ha estado sembrao, adjetivo que me parece adecuado dado el tema. A m¨ª, la verdad, nunca me ha parecido un insulto lo de mesetario, o, para ser m¨¢s suave, algo peyorativo. Aunque siempre se nota la intenci¨®n.
Yo soy de Madrid-Madrid, pero siento hacia la meseta la misma admiraci¨®n que sinti¨® la Generaci¨®n del 98, pongo por caso, de amantes de una Castilla de belleza deslumbrante en su amplia sencillez. No me hubiera importado nacer entre agostados trigales mecidos por viento suave y secos pe?ascos, espacios siempre abiertos en los que cabe toda la nobleza del mundo.
Fen¨®meno lo de Alpuente.
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