Una nueva t¨¦cnica con l¨¢ser reduce los halos nocturnos tras las operaciones de miop¨ªa
La cirug¨ªa con l¨¢ser para los problemas de visi¨®n es un gran negocio. Cada a?o, m¨¢s de 100.000 espa?oles -la estimaci¨®n m¨¢s optimista del sector afirma que son 200.000- se someten a una operaci¨®n para desterrar las gafas. Como es negocio, porque la operaci¨®n de cada ojo cuesta unos 1.200 euros, se invierte mucho dinero. Como se invierte mucho dinero, la t¨¦cnica avanza. Desde hace un a?o existen nuevos l¨¢ser que evitan la aparici¨®n de halos nocturnos, la principal secuela de la operaci¨®n con el l¨¢ser convencional. Estos aparatos empiezan a popularizarse.
Rafael Barraquer, de la cl¨ªnica Barraquer de Barcelona, afirma que "hay un 10% de los pacientes para los que estaba desaconsejada la cirug¨ªa l¨¢ser convencional y que ahora pueden beneficiarse de los nuevos tratamientos". En esos pacientes, por la forma de su ojo y sus dioptr¨ªas, la operaci¨®n hubiera corregido la miop¨ªa, pero a costa de provocar la aparici¨®n de halos en lugar de luces, sobre todo por la noche.
El l¨¢ser convencional convierte la c¨®rnea en una esfera. El nuevo imita la forma natural
La cirug¨ªa l¨¢ser convencional (lasik) produce la aparici¨®n de halos porque no modifica la forma de la c¨®rnea de manera ¨®ptima. En general, los halos aparecen como consecuencia de la aberrraci¨®n esf¨¦rica, la c¨®rnea queda demasiado esf¨¦rica y los rayos que difracta no convergen en un solo punto de la retina. La imagen que se forma no es n¨ªtida.
La retina es el tejido sensible a la luz y est¨¢ situada al fondo del ojo. Como la pel¨ªcula en una c¨¢mara de fotos, la retina capta las im¨¢genes que se proyectan sobre ella gracias a un sistema de focos, el cristalino y la c¨®rnea. Cuando la longitud del ojo o la curvatura de la c¨®rnea no permite enfocar la imagen en el plano de la retina, se produce la miop¨ªa, la hipermetrop¨ªa o el astigmatismo.
Aunque el lasik induce la aberraci¨®n esf¨¦rica en todos los pacientes, s¨®lo aquellos que de noche dilatan la pupila m¨¢s de seis mil¨ªmetros (generalmente, personas j¨®venes) y que tienen muchas dioptr¨ªas manifiestan problemas serios con la aberraci¨®n. "Un 10% de los operados se queja de estos problemas", seg¨²n Mar¨ªa Teresa Iradier, de la Unidad de Cirug¨ªa Refractiva del hospital San Carlos de Madrid.
Los nuevos l¨¢seres no tallan una esfera, sino una asfera. "Asfera es la forma de la c¨®rnea, el radio de curvatura es menor en los laterales de la c¨®rnea que en el centro", explica Jorge Ali¨®, director del Instituto Oftalmol¨®gico de Alicante y catedr¨¢tico de Oftalmolog¨ªa de la Universidad de Elche.
Ali¨® afirma que la nueva t¨¦cnica viene propiciada m¨¢s por la tecnolog¨ªa que por la medicina: "Tallar una asfera hace que el l¨¢ser necesite c¨¢lculos matem¨¢ticos m¨¢s precisos". Desde hace dos a?os, muchas gafas y lentes de contacto se tallan con forma asf¨¦rica. Ram¨®n Gutierrez, director m¨¦dico de la cl¨ªnica Novovisi¨®n, pionera en esta t¨¦cnica, afirma que el acto quir¨²rgico es similar en la tecnolog¨ªa convencional y en la nueva. El fundamento de este acto es tan sencillo como escalofriante. Un aparato llamado microqueratomo corta una fina l¨¢mina de tejido de encima de la c¨®rnea y lo aparta moment¨¢neamente (los m¨¦dicos lo llaman colgajo o flap).
Una vez apartado el colgajo, el l¨¢ser talla la c¨®rnea, elimina tejido, para corregir el problema de visi¨®n. Si el paciente tiene miop¨ªa, se elimina tejido del centro y se aplana la c¨®rnea. Si el problema es de hipermetrop¨ªa, se elimina tejido del lateral, con lo que la c¨®rnea se curva. Luego, el cirujano lava el ojo y vuelve a colocar el colgajo en su sitio. La operaci¨®n dura menos de siete minutos y se hace con anestesia local.
La t¨¦cnica todav¨ªa no se aplica a todos los pacientes. Villa explica el motivo: "Es un 30% m¨¢s cara que la cirug¨ªa normal y en realidad la aberraci¨®n esf¨¦rica no afecta a todos los pacientes, sino a unos pocos". Y el futuro: "Con el tiempo se abaratar¨¢ y a medio plazo sustituir¨¢ al l¨¢ser convencional, porque es objetivamente mejor". Adem¨¢s, puede servir para aquellos que despu¨¦s de haberse operado tengan problemas de visi¨®n nocturna.
El debate de las aberraciones
No existe el ojo perfecto. Todos tienen aberraciones, imperfecciones que limitan la capacidad de visi¨®n. Desde hace cinco a?os existen unos aparatos llamados aberr¨®metros, que permiten medir las aberraciones. Y una vez que se tienen localizadas, lo siguiente es preguntarse: ?por qu¨¦ no corregir las aberraciones con l¨¢ser y mejorar la visi¨®n?
En Espa?a ya hay cl¨ªnicas que eliminan las aberraciones de alto orden, las m¨¢s graves, como el Instituto Oftalmol¨®gico de Alicante. Su director, Jorge Ali¨®, se?ala que "las aberraciones de alto orden afectan a un 20% de la poblaci¨®n y se les puede eliminar esas aberraciones para dejar un ojo normal y mejorar la visi¨®n".
Otros expertos discrepan. Susana Marcos, investigadora del Instituto de ?ptica del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas, afirma: "El objetivo m¨¢s importante es que los nuevos algoritmos de ablaci¨®n no induzcan m¨¢s aberraciones de alto orden que las que tiene el paciente. Conseguir que el ojo sea un sistema ¨®ptico perfecto, libre de aberraciones, es el sue?o de muchos. Pero hay que tener en cuenta que esta correcci¨®n s¨®lo valdr¨ªa para un color, una distancia de visi¨®n y que, dado que las aberraciones cambian con la edad, no ser¨ªa permanente. Adem¨¢s, a¨²n se investiga sobre si cierto grado de aberraciones puede ser ¨²til en un mundo policrom¨¢tico o ayudan a enfocar de cerca y de lejos"
Y a?ade: "La c¨®rnea no es un trozo de pl¨¢stico que podamos tallar a nuestro antojo; a¨²n no comprendemos totalmente c¨®mo se se transfiere la energ¨ªa a la c¨®rnea, y c¨®mo esta responde tras una operaci¨®n, ni c¨®mo puede afectar a largo plazo". Ali¨® se?ala que si un ojo se desv¨ªa mucho de lo normal en las aberraciones hay que corregirlo: "Marcos habla desde la lejan¨ªa cient¨ªfica, mientras que yo me baso en la pr¨¢ctica cl¨ªnica".
Marcos reconoce que su postura es prudente: "Gracias a que los cient¨ªficos llevamos a?os alertando de los problemas de la aberraci¨®n esf¨¦rica, han aparecido aparatos que no la inducen. ?se es el primer paso, no inducir aberraciones. Para el segundo, corregir las existentes, a¨²n falta trabajo por hacer". C¨¦sar Villa, de Novovisi¨®n, y Rafael Barraquer, de la Cl¨ªnica Barraquer, y coinciden en que es pronto para eliminar la mayor¨ªa de las aberraciones.
Otras cl¨ªnicas tambi¨¦n realizan la correcci¨®n de las aberraciones y han lanzado campa?as de publicidad basadas en que poseen un aberr¨®metro, aunque eso es s¨®lo un aparato de medici¨®n.
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