Limitadas repercusiones en la empresa espa?ola

La guerra de Irak ha influido de forma desigual, y siempre como un elemento adicional al entorno econ¨®mico, en la empresa espa?ola. As¨ª lo revelan, al menos, las respuestas al siguiente cuestionario:

1. ?En qu¨¦ ha influido o va a influir la guerra en su cuenta de resultados o en sus ingresos?

2. ?Habr¨¢ recuperaci¨®n econ¨®mica en 2004?

3. ?C¨®mo ha influido la guerra en sus inversiones?

Iberia

1. En el transporte a¨¦reo, la guerra ha sido un factor adicional a otros que ya estaban afectando a las compa?¨ªas, y por tanto ha agravado la crisis que ya se sufr¨ªa. Esto nos ha obligado a acentuar las medidas de ahorro de costes que estabamos aplicando y a revisar los procesos, con el fin de eliminar todo aquello superfluo y que no a?ade valor ni mejora el servicio.

Este sector atraviesa momentos muy dif¨ªciles desde hace dos a?os, cuando se empez¨® a notar la crisis econ¨®mica, en especial en EE UU y Alemania, y la reducci¨®n de gastos por parte de las empresas; sigui¨® el 11-S y su repercusi¨®n brutal tanto en la demanda como en los gastos a los que tienen que hacer frente las compa?¨ªas a¨¦reas; la sobrecapacidad es un problema en los principales mercados; como consecuencia de ello, y tambi¨¦n de la entrada de los operadores de bajo coste, las tarifas est¨¢n bajando, y tambi¨¦n los ingresos unitarios. En ese contexto, la guerra ha sido un obst¨¢culo adicional a la posible recuperaci¨®n de las compa?¨ªas, y ha supuesto una nueva ca¨ªda del tr¨¢fico, m¨¢s sobrecapacidad y m¨¢s rebajas de precios y, por tanto, de ingresos.

2. Es prematuro opinar. Nuestro sector est¨¢ ¨ªntimamente ligado a la situaci¨®n econ¨®mica en general, y por la evoluci¨®n de las reservas se puede aventurar c¨®mo va la econom¨ªa, y viceversa. Sin embargo, en los ¨²ltimos meses, los h¨¢bitos de los clientes han variado y ya no se reserva con antelaci¨®n , por lo que no disponemos de pistas que nos ayuden a conocer las tendencias de futuro.

3. No hemos anulado ninguna inversi¨®n necesaria para el futuro de la empresa, como la renovaci¨®n de flota de largo radio, porque estamos convencidos de que el mercado volver¨¢ a crecer. Ahora bien, s¨ª hemos aplazado el crecimiento y retrasado la entrega de algunos aviones por la coyuntura actual. Y tambi¨¦n estamos poniendo en marcha planes rigurosos de ahorro de gastos y reducci¨®n de costes.

Repsol-YPF

1. El clima preb¨¦lico y las incertidumbres surgidas con anterioridad a la guerra motivaron una especial volatilidad y aumento en los precios internacionales del crudo que, una vez iniciado el conflicto, registraron un notable descenso y se orientaron hacia la normalidad.

2. S¨ª, todo hace pensar que en 2004, tras tres a?os de crecimientos econ¨®micos por debajo del potencial, se producir¨¢ una mejora como consecuencia de la recuperaci¨®n de la inversi¨®n y el consumo a escala global

3. No tenemos presencia directa ni indirecta en Irak; adem¨¢s, nuestras inversiones no se han visto afectadas por las incertidumbres estrat¨¦gicas derivadas de la guerra.

Sol Meli¨¢

1. En realidad, lo que m¨¢s ha influido en nuestra cuenta de resultados y en el sector tur¨ªstico no ha sido la guerra en s¨ª, sino el periodo previo a su inicio. La incertidumbre generada tras el 11-S, agudizada por los atentados posteriores de Djerba, Kenia y Bali, junto a la recesi¨®n econ¨®mica por la que han pasado algunos de los principales pa¨ªses emisores como EE UU y Alemania, han sido los factores que realmente han desencadenado la actual bajada del turismo.

2. En estos momentos en los que el conflicto a¨²n no se ha zanjado del todo, y en los que la comunidad internacional debate el futuro de Oriente Pr¨®ximo, la incertidumbre permanece, por lo que es dif¨ªcil aventurar predicciones de futuro. No obstante, confiamos en que las previsiones se cumplan y 2004 sea testigo de la recuperaci¨®n de EE UU y Alemania, algo que redundar¨ªa directa e indirectamente en la reavivaci¨®n de los flujos tur¨ªsticos, tanto de ocio como de negocio, en el mundo.

Por otra parte, todo parece indicar que, al igual que ha sucedido en otros conflictos similares, este verano Espa?a se erigir¨¢, una vez m¨¢s, como destino refugio. De ser as¨ª, podr¨ªamos compensar las bajas ocupaciones de los cuatro primeros meses de 2003 con los buenos resultados de la temporada de verano.

3. Para Sol Meli¨¢, 2003 es un a?o de consolidaci¨®n en el que no hab¨ªa previstas grandes inversiones, por lo que la guerra no nos ha supuesto ninguna modificaci¨®n.

BBVA

1. La banca retail en Espa?a es la actividad que tiene mayor aportaci¨®n a los resultados del Grupo BBVA. Dado que los vol¨²menes de negocio dom¨¦stico no se han visto afectados por el conflicto b¨¦lico y que los efectos financieros de ¨¦ste han sido de car¨¢cter transitorio, la guerra no ha tenido un impacto significativo en nuestros resultados durante los primeros meses del a?o.

2. Tras tres a?os consecutivos de reducido crecimiento, las principales econom¨ªas desarrolladas experimentar¨¢n tasas m¨¢s elevadas en 2004, aunque sin alcanzar su crecimiento potencial. El tono expansivo de las pol¨ªticas, monetaria y fiscal, la reducci¨®n del precio del crudo y la superaci¨®n de las incertidumbres presentes en la primera mitad de 2003

apoyan esta progresiva recuperaci¨®n.

No obstante, este escenario de recuperaci¨®n no est¨¢ exento de riesgos, sobre todo en EE UU. Desde un enfoque de medio plazo, su expansi¨®n fiscal podr¨ªa conducir a una profundizaci¨®n de los desequilibrios de esta econom¨ªa, la escasez de ahorro y el consiguiente d¨¦ficit por cuenta corriente, y a un deterioro del crecimiento potencial a largo plazo . En el caso de la econom¨ªa europea, la apreciaci¨®n del euro, el escaso avance en las reformas econ¨®micas y la delicada situaci¨®n de Alemania son los principales l¨ªmites al crecimiento a medio plazo. En el caso de las econom¨ªas asi¨¢ticas, las consecuencias de la epidemia del SARS (S¨ªndrome Agudo Respiratorio Grave) son, de momento, dif¨ªciles de cuantificar. S¨ª que es previsible que tenga un impacto negativo sobre la actividad en el conjunto de pa¨ªses afectados (China, Hong Kong, Singapur...) no s¨®lo en 2003, sino tambi¨¦n en 2004.

3. Los impactos m¨¢s apreciables de la guerra en el ¨¢mbito financiero han sido de car¨¢cter transitorio. La orientaci¨®n de las inversiones estrat¨¦gicas del Grupo BBVA se basa en consideraciones fundamentales de medio y largo plazo. En este horizonte, los efectos econ¨®micos y financieros asociados al conflicto geopol¨ªtico no han modificado nuestra estrategia de inversiones.

Corporaci¨®n Mapfre

1. La guerra de Irak no tiene influencia directa en la cuenta de resultados o en los ingresos de nuestro grupo.

2. Es posible que haya recuperaci¨®n en 2004.

3. La guerra es uno de los muchos factores a tener en cuenta en la evoluci¨®n de los mercados. Nosotros mantenemos una perspectiva inversora de m¨¢xima prudencia.

Santa B¨¢rbara

1. La guerra no ha tenido ning¨²n efecto directo en la cuenta de resultados de General Dynamics Santa B¨¢rbara Sistemas. Nuestros contratos y programas son a largo plazo y requieren, normalmente, amplios periodos de negociaci¨®n y desarrollo que van m¨¢s all¨¢ de circunstancias concretas. Respecto al futuro, eso depender¨¢ de las decisiones que tome el Gobierno espa?ol y, en concreto, del Ministerio de Defensa respecto a las necesidades que puedan tener las Fuerzas Armadas espa?oles, algo todav¨ªa por concretarse.

2. Claramente, 2003 ser¨¢ todav¨ªa un a?o dif¨ªcil y todo apunta a que la recuperaci¨®n que se pueda producir en 2004 ser¨¢ lenta y progresiva. De todas maneras, somos optimistas sobre la evoluci¨®n de la econom¨ªa mundial y, por tanto, de Espa?a y Europa en general. Despu¨¦s de los ajustes necesarios, es previsible que las econom¨ªas europeas recuperen la senda de un crecimiento moderado sostenido, en especial si hay signos de recuperaci¨®n en Latinoam¨¦rica y Asia.

3. La guerra no ha tenido influencia inmediata en nuestro plan de inversiones, aunque s¨ª hemos suspendido la presencia en alguna feria de armamento por razones de seguridad. General Dynamics Santa B¨¢rbara est¨¢ comprometida a mantener su plan de inversiones de forma sostenida y coherente para mejorar su competitividad en aquellas l¨ªneas de negocio que consideramos estrat¨¦gicas, y mejorar su cartera de productos. Por ejemplo, hemos aprobado ya una inversi¨®n de 6,6 millones de euros para una nueva planta qu¨ªmica en Murcia que permitir¨¢ lograr una producci¨®n de un mill¨®n de kilos anuales de nitrocelulosa, la materia prima de la p¨®lvora y b¨¢sica para una gran variedad de municiones.