Por la paz y el empleo

La celebraci¨®n, esta semana, del D¨ªa Internacional del Trabajo bajo el lema "Por la Paz y el Empleo" servir¨¢ para poner en evidencia, una vez m¨¢s, el grado de entendimiento mutuo existente entre las grandes centrales sindicales, como son UGT y CC OO, en Andaluc¨ªa. Ambos sindicatos llegan a este 1? de Mayo dejando atr¨¢s importantes movilizaciones de protesta y despu¨¦s de haber librado sonadas batallas en Andaluc¨ªa en favor de los intereses de los jornaleros del campo, y para reclamar, tambi¨¦n, el traspaso de las Pol¨ªticas Activas de Empleo.

En ambos casos la unidad de acci¨®n sindical ha sido clave para que se haya salido airoso del trance. Sin embargo, fue en lo relativo al PER y al proyecto alternativo del Gobierno central en donde el riesgo de ruptura fue mayor. Alg¨²n d¨ªa los secretarios generales de UGT y CC OO de Andaluc¨ªa, Manuel Pastrana y Julio Ruiz, respectivamente, deber¨ªan explicar c¨®mo se tuvieron que emplear a fondo para que en sus propias organizaciones asumieran sus tesis en torno a un asunto, como era el mantenimiento de las garant¨ªas sociales de los trabajadores del campo, que no llegaban a entender debidamente en Madrid.

La Junta reclamar¨¢ el traspaso de 24 competencias a¨²n pendientes

Tal vez aqu¨ª fuera el propio Ruiz quien lo tuviera m¨¢s dif¨ªcil ante su secretario general, Jos¨¦ Mar¨ªa Fidalgo, dada la inclinaci¨®n de ¨¦ste a firmar acuerdos con el Gobierno central al margen de la UGT. Si hubiera actuado en esta ocasi¨®n de igual manera su organizaci¨®n en Andaluc¨ªa, habr¨ªa quedado a los pies de los caballos. El error hubiese sido hist¨®rico y s¨®lo la firmeza de los hombres de Ruiz situ¨® las cosas en sus justos t¨¦rminos, manteni¨¦ndose una posici¨®n coherente con la trayectoria social de esta fuerza en nuestra comunidad y obligando, junto con los ugetistas, al Ejecutivo a llevar a cabo una clara rectificaci¨®n ante el fuerte rechazo que ocasion¨® su primera anunciada reforma laboral. Eso de puertas para adentro, pero de cara al exterior, esta lucha ha puesto al descubierto el poder de influencia pol¨ªtica que tienen los sindicatos. Ya sus dirigentes no se limitan a moverse en el ¨¢mbito estrictamente sindical, sino que dan un paso adelante y proponen abiertamente que no se vote en las pr¨®ximas elecciones municipales al PP por considerar que resulta lesivo para los intereses de los trabajadores en particular y para Andaluc¨ªa en general. O sea, no se quedan en no pedir expresamente el voto hacia una fuerza determinada, sino que, al menos, indican a qui¨¦n no se debe apoyar con la papeleta el 25 de mayo.

As¨ª las cosas, se comprende el malestar del PP con estos sindicatos. Pero no siempre fue as¨ª. A?os atr¨¢s, determinados dirigentes populares no ten¨ªan remilgos, incluso, en participar en las manifestaciones del Primero de Mayo. Desde luego que eran tiempos mejores, ya superados, y en los que se mostraba un PP que contaba con una fluida interlocuci¨®n con las distintas organizaciones sociales, sindicales y pol¨ªticas. Ahora, en cambio, su soledad en esta legislatura es permanente, tal y como puede que suceda, este martes, con la esperada comparecencia en el Parlamento andaluz de la consejera de Econom¨ªa y Hacienda, Magdalena ?lvarez. En sesi¨®n secreta, deber¨¢ dar cuenta de las retribuciones de los responsables de Cajasur. En esta entidad, despu¨¦s del ¨²ltimo pronunciamiento del TSJA, advierten de que no tiene sentido que se aporte detalle alguno sobre este aspecto al considerar que la resoluci¨®n judicial consagra definitivamente la situaci¨®n de Cajasur bajo el amparo de la Administraci¨®n central. Est¨¢ claro que al PP no le gusta nada este gesto de ?lvarez, de modo que est¨¢ por ver qu¨¦ va a ocurrir.

Y para que la fiesta no decaiga, la Junta volver¨¢ a la carga y se dirigir¨¢ al Ministerio de Administraciones P¨²blicas para reclamar el traspaso de 24 competencias a¨²n pendientes. Pero hemos de estar atentos, igualmente, por lo que importa a Andaluc¨ªa, a la visita del delegado del Gobierno para la Inmigraci¨®n y la Extranjer¨ªa, Ignacio Gonz¨¢lez, a Rabat. Viaja con el objetivo de reactivar con el ministro del Interior de Marruecos, Mustafa Sahel, el Acuerdo de Readmisi¨®n sobre personas en situaci¨®n irregular que ambos pa¨ªses firmaron en 1992. En reiteradas ocasiones el Gobierno espa?ol ha anunciado que este asunto hab¨ªa sido desbloqueado, pero lo cierto es que el vecino pa¨ªs no ha cambiado su posici¨®n, de ah¨ª que Espa?a se haya limitado a cambiar de sitio a los inmigrantes, tal y como viene denunciando el Defensor del Pueblo, Jos¨¦ Chamizo, desvelando esos indignantes traslados desde Huelva hasta Algeciras.