Enrique Urbizu mezcla intriga y romanticismo en 'La vida mancha', su pel¨ªcula m¨¢s intimista
El director afirma en el Festival de M¨¢laga que se siente "afortunado" por poder arriesgarse
El director bilba¨ªno Enrique Urbizu no est¨¢ dispuesto a encasillarse en los g¨¦neros que le han llevado a la primera fila del cine espa?ol. Despu¨¦s de explorar la comedia y de triunfar con el thriller La caja 507 (2001), el realizador sorprendi¨® ayer en el Festival de M¨¢laga presentando al concurso de largometrajes La vida mancha, un melodrama enigm¨¢tico ambientado en la periferia de una ciudad donde sobresale la construcci¨®n de los personajes, especialmente el del protagonista, Jos¨¦ Coronado. "No me gusta repetirme y tengo la suerte de poder arriesgarme", explic¨® el director.
La vida mancha, que se estrena el 9 de mayo, cuenta la historia de dos hermanos, Pedro Salazar (Jos¨¦ Coronado) y Fito (Juan Sanz), y su reencuentro despu¨¦s de a?os sin saber el uno del otro. Pedro, que ha tenido suerte en negocios de los que no habla nunca, llega a la casa de Fito, su hermano menor, casado y padre de un hijo, que gasta m¨¢s de lo que gana como camionero en partidas de cartas. La mujer de Fito, Juana (Zay Nuba), una joven hermosa y trabajadora, va parcheando como puede los agujeros que su marido deja en la econom¨ªa dom¨¦stica, pero empieza a estar desesperada y desencantada.
Historia de personajes
La serena evoluci¨®n de esta historia est¨¢ en las ant¨ªpodas de obras de Urbizu como La caja 507 o Todo por la pasta, donde la acci¨®n es trepidante. En esta ocasi¨®n, el director se recrea en el retrato de los personajes, especialmente en el de los dos hermanos, el h¨¦roe oscuro que representa Coronado y el antih¨¦roe adorable que compone Juan Sanz.
"La pel¨ªcula surge de un gui¨®n de Michel Gaztambide, que me atrap¨® porque era una apuesta muy delicada para un director", explic¨® Urbizu en la conferencia de prensa celebrada tras el pase del largometraje. "En cuanto lo le¨ª, me llev¨¦ el ascua a mi sardina, porque para m¨ª ¨¦sta es una historia sobre la b¨²squeda de un lugar en el mundo, el reencuentro con las ra¨ªces y el abandono del hogar", a?adi¨®.
El peso de la historia recae sobre el personaje de Coronado, que ya se meti¨® en la piel de un duro con trasfondo en La caja 507, el anterior trabajo de Urbizu. "El personaje de Jos¨¦ tiene m¨¢s preguntas que respuestas. Es un personaje como de western, que est¨¢ pensado deliberadamente as¨ª, al igual que la localizaci¨®n en una barriada al l¨ªmite de la ciudad, con las monta?as de fondo, evoca el cl¨¢sico poblado de las pel¨ªculas del oeste, aunque la historia no tenga nada que ver con un western", afirm¨®.
"En una pel¨ªcula donde hay una falta de referencias intencionada, donde se dejan misterios sin desvelar, el hecho de contar con un actor como Jos¨¦ Coronado, conocido por el p¨²blico, era ¨²til para que el espectador pudiera completar por s¨ª mismo los datos que no se le dan. A los j¨®venes, en cambio, quer¨ªa que no se les conociese, que fueran totalmente nuevos. A Juan lo conoc¨ªa desde antes de ser actor y de su trabajo en Salvajes. Su calidad humana lo hac¨ªa id¨®neo para un personaje lleno de defectos pero entra?able", agreg¨® Urbizu.
Calidad contra la crisis
La crisis del cine espa?ol, sus porqu¨¦s y sus remedios, est¨¢ capitalizando buena parte del debate en un festival consagrado a ¨¦l -y donde, dicho sea de paso, pocas pel¨ªculas han satisfecho hasta ahora las expectativas que pesaban sobre ellas-. El pasado lunes, hubo una reuni¨®n de realizadores para tratar de aunar criterios y buscar soluciones, donde se baraj¨® la creaci¨®n de una asociaci¨®n de directores de cine.
Urbizu, que no estuvo presente en la reuni¨®n, salud¨® ayer "cualquier iniciativa que contribuya a que haya m¨¢s di¨¢logo entre los profesionales que nos dedicamos a ¨¦sto, que somos pocos y en general trabajamos bastante aislados unos de otros". Pero tambi¨¦n quiso quitarle hierro a la idea de la crisis: "No creo que el cine sea lo ¨²nico que est¨¢ en crisis en Espa?a, y en todo caso creo que hay tambi¨¦n un componente fuerte de falta de autoestima, que tampoco es exclusivo del cine".
En todo caso, Urbizu no es de los realizadores m¨¢s afectados por la crisis. "Espero que las cosas se nivelen, porque yo he pasado a?os de bonanza sin dirigir y sin embargo desde que se habla de crisis no he parado de trabajar. Lo que no quiero es que cuando vuelvan los buenos tiempos se me acabe la racha", brome¨®. De momento tiene otro proyecto entre manos, aunque se niega a hablar de ¨¦l "porque da mal fario".
Para Urbizu, la soluci¨®n es "luchar con u?as y dientes por hacer buenas pel¨ªculas". Del retorno de la espa?olada culpa en gran medida a la actual pol¨ªtica cultural. "Ah¨ª se nota lo que le preocupa a la derecha de este pa¨ªs el cine", protesta. "En todo caso, no me parece mal que se haga ese tipo de cine si es lo que quiere un gran porcentaje del p¨²blico, pero hay espacio para todo. Hay pel¨ªculas que no han roto las taquillas pero han dado otros ¨¦xitos, y hay tambi¨¦n honros¨ªsimos fracasos", concluye.
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