Zancadillas en el camino de las OPA
Las defensas en las ofertas hostiles vuelven a dejar al margen de las ganancias a los peque?os inversores
Es dif¨ªcil que en el mercado espa?ol triunfen las Ofertas P¨²blicas de Adquisici¨®n (OPA) hostiles. Las estrategias de defensa que emprenden los consejos de administraci¨®n y los filtros gubernamentales para recibir el visto bueno est¨¢n descafeinando este tipo de operaciones. El peque?o inversor vuelve, pues, a quedarse al margen de estas ofertas que, generalmente, mejoran y animan la cotizaci¨®n de los valores en las bolsas. Una dificultad que desanima a posibles compradores en unos mercados no tan libres como aparentan. Adem¨¢s, el organismo supervisor (CNMV) tiene complicado desenmascarar las estrategias defensivas que abortan estas ofertas.
Una de las estrategias defensivas m¨¢s habitual es el "aparcamiento" de acciones que luego el consejo recomprar¨¢ a un precio superior
Las OPA son una de las operaciones m¨¢s contundentes que se pueden realizar en la bolsa. Se trata de adquirir parte o la totalidad de una compa?¨ªa cotizada en el mercado, dando oportunidad a todos los accionistas a participar de esa oferta. Una propuesta que, obviamente, debe mejorar las condiciones de valoraci¨®n con las que ya cuenta la empresa en el mercado. Las OPA son un claro aliciente para invertir en bolsa y las compa?¨ªas que por su configuraci¨®n accionarial son susceptibles de recibir una oferta cotizan con una prima sobre aquellas donde este tipo de operaci¨®n es imposible.
El peque?o inversor, por lo general, se beneficia de la OPA por cuanto recibe de golpe una interesante prima en relaci¨®n con el precio de cotizaci¨®n. Ahora bien, las estrategias defensivas que emprenden los consejos de administraci¨®n cuando se produce una oferta o los distintos dict¨¢menes de organismos p¨²blicos que deben emitir para que la OPA siga su curso, frustran muchas de estas operaciones.
Un reciente ejemplo es la OPA que las firmas italiana Quarta y Astrim lanzaron sobre la inmobiliaria Metrovacesa a 27 euros por acci¨®n. Tras el fracaso de esta operaci¨®n a lo que s¨®lo acudi¨® el 23% del capital y que, por tanto, no lleg¨® a realizarse, las acciones de la inmobiliaria cotizan a 21 euros. La oferta no triunf¨® y los inversores minoritarios que quisieron vender a 27 euros no han podido. Sin embargo, los accionistas que contaban con importantes paquetes accionariales han vendido estos a su antojo a un precio muy superior al que actualmente ofrecen las acciones de la inmobiliaria.
Movimientos
Los movimientos accionariales en pleno proceso de OPA (Abu Dhabi Investment Authority vendi¨® su participaci¨®n del 7% a tres sociedades, entre ellas la caja de ahorros andaluza El Monte, a 27 euros por t¨ªtulo, y Cartera Deva, vendi¨® su participaci¨®n del 5,1% a la inmobiliaria catalana Sacresa que pag¨® 26 euros por t¨ªtulo) despertaron las dudas del organismo supervisor en relaci¨®n a si hab¨ªa connivencia entre los nuevos accionistas y el consejo de administraci¨®n de Metrovacesa.
La regulaci¨®n de OPA impide al consejo de administraci¨®n realizar cualquier operaci¨®n que dificulte el desarrollo de la oferta. La Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores (CNMV) agudiza sus mecanismos de vigilancia, aunque no siempre es f¨¢cil probar que se est¨¢n realizando estrategias defensivas para dar al traste con la operaci¨®n. "Desde la CNMV se estudian todos los movimientos accionariales que se producen cuando se ha lanzado una OPA. Las investigaciones normales se intensifican en estos procesos y se recaba informaci¨®n sobre si se est¨¢n produciendo acciones concertadas con los administradores o que est¨¦n interfiriendo en la operaci¨®n. Esta informaci¨®n se publica con celeridad como hecho relevante y, por supuesto, el comunicante se arriesga a muy duras sanciones si enga?a a la Comisi¨®n. Adem¨¢s de los grandes trasvases accionariales vigilamos con un cuidado exquisito los movimientos diarios en las acciones", apuntan desde la CNMV.
Aparcamiento
Jes¨²s Alfaro, catedr¨¢tico de Derecho Mercantil, perteneciente al despacho Albi?ana y Su¨¢rez de Lezo, destaca el aparcamiento de acciones como una de las estrategias defensivas m¨¢s habituales en pleno proceso de OPA. Un mecanismo que consiste en que unos inversores adquieren un paquete de acciones de acuerdo con los administradores de la compa?¨ªa y que luego se recomprar¨¢ a un precio superior. L¨®gicamente, estos inversores no acudir¨¢n a la oferta hostil que se est¨¢ produciendo, impidiendo que triunfe.
"Es muy dif¨ªcil probar que existe una acci¨®n concertada entre los administradores y un accionista que aparque un paquete de acciones. No suele firmarse ning¨²n documento que refleje la recompra de esas acciones a un precio superior. ?nicamente, se pueden advertir indicios de que existe esa connivencia. Por ejemplo, si el comprador paga un precio superior al de cotizaci¨®n de las acciones, ya que pudiendo adquirlas en el mercado a un precio inferior paga una prima. Tambi¨¦n se pueden investigar contratos por prestaci¨®n de servicios que est¨¦n ocultando ese pago por hacer el favor de aparcar las acciones", explica.
El experto mercantilista apunta, asimismo, que en la nueva regulaci¨®n de OPA no se ha abordado esta concertaci¨®n cuando se produce una oferta y s¨®lo se puede dejar a los indicios que se aprecien. "La capacidad de los organismos supervisores para analizar este tipo de actuaciones es muy limitada. En la OPA sobre Hidrocant¨¢brico se produjo una apertura de expediente para averiguar si exist¨ªa acci¨®n concertada, pero finalmente se cerr¨® sin sanci¨®n". La voluntad del supervisor es tambi¨¦n determinante.
La clave se encuentra, pues, en si se est¨¢ comprando por cuenta propia o por cuenta del opado. Los expertos consultados afirman que en la actual situaci¨®n el mercado espa?ol desincentiva el lanzamiento de OPA, y las numerosas realizadas en los ¨²ltimos tres a?os responden mayoritariamente a operaciones de exclusi¨®n de bolsa.
Las ofertas hostiles tropiezan en el mercado espa?ol con numerosos impedimentos que, finalmente, perjudican a los inversores minoritarios que no pueden beneficiarse de estas luchas por el control de la compa?¨ªa. Y tampoco est¨¢ claro que la CNMV arbitre las investigaciones necesarias para descubrir las operaciones de colusi¨®n de intereses entre empresas para frenar las operaciones.
Pocos fracasos por la escasa hostilidad
En los ¨²ltimos tres a?os se han presentado 60 OPA en el mercado espa?ol. El grueso de estas ofertas corresponde a operaciones de exclusi¨®n (23) por la que un accionista mayoritario decide excluir el valor de la cotizaci¨®n oficial. Una operaci¨®n que suele venir precedida de una OPA previa donde se alcanza ya un porcentaje del capital cercano al 100%. Para esta marcha definitiva se realiza la oferta de exclusi¨®n que ofrece sus especiales caracter¨ªsticas para defender los intereses de los accionistas minoritarios, habida cuenta de que estos no tendr¨¢n m¨¢s oportunidades.
Los fracasos de las ofertas son muy pocos, como tambi¨¦n lo es el n¨²mero de operaciones que recibe el calificativo de hostil (13) porque se hace contra la voluntad del consejo de administraci¨®n. La OPA de Fadesa sobre Zab¨¢lburu, la de Cortefiel sobre Adolfo Dom¨ªnguez, la de Fenosa sobre Hidrocant¨¢brico y la de RWE y Ferroatl¨¢ntica sobre esta misma el¨¦ctrica se suman al reciente fracaso de Quarta y Astrim en relaci¨®n con la compra de Metrovacesa y a la actualmente paralizada de Gas Natural sobre Iberdrola.
Las OPA son operaciones especialmente sensibles para sectores como el energ¨¦tico o cuando las realizan compa?¨ªas extranjeras en un nacionalismo empresarial que todav¨ªa no parece superado. El tema es de tanta importancia que la Uni¨®n Europea lleva a?os intentando hacer una regulaci¨®n de OPA que tropieza con continuos vetos de los pa¨ªses que no quieren ceder esta soberan¨ªa a manos comunitarias.
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