Trias, la ¨¦nesima apuesta de CiU
La federaci¨®n nacionalista aprueba la campa?a de Barcelona, aunque reclama a su candidato m¨¢s dureza con Clos
Xavier Trias consigui¨® el primer d¨ªa de campa?a lo que su antecesor, Joaquim Molins, no logr¨® ni el ¨²ltimo d¨ªa: que el resto de candidatos tuviera en cuenta sus propuestas. En 1999, las ¨²nicas referencias a Molins fueron para recriminarle su precipitado anuncio de que gobernar¨ªa con el PP en el Ayuntamiento de Barcelona. A media campa?a un rotundo Jordi Pujol desminti¨® el pacto. La rega?ina fue premonitoria del descalabro: 120.000 votos menos y la p¨¦rdida de tres concejales.
Trias afronta el reto de superar este p¨¦simo resultado el pr¨®ximo 25 de mayo. De ello depende, en parte, que CiU se enfrente a las auton¨®micas de oto?o con mayor o menor ¨¢nimo. La simpat¨ªa que entre el electorado despierta Trias -no en vano es un senyor de Barcelona- supone una baza a su favor. Pero si esta simpat¨ªa se traducir¨¢ en votos es una inc¨®gnita.
La c¨²pula de CiU ha dado entera libertad a Trias para dise?ar su campa?a. Sudores le cost¨® al candidato. Ahora algunas personas empiezan a arrepentirse de tal concesi¨®n. Sobre todo porque Trias ha evitado, en lo posible y salvo en pol¨ªtica de vivienda, entrar a saco contra el socialista Joan Clos. Frente a estas cr¨ªticas, siempre soterradas, el equipo de campa?a asegura que Trias no cambiar¨¢ su "estilo de hacer pol¨ªtica". Pero en los ¨²ltimos d¨ªas el viraje ha sido evidente. El candidato ha endurecido su discurso contra Clos, de quien denuncia su escaso liderazgo, prepotencia y su encierro en la alcald¨ªa sin escuchar a la calle.
Estas discrepancias no impiden que, al contrario de lo que le ocurri¨® a Joaquim Molins, todo el aparato nacionalista se haya volcado en apoyo de Trias. Una apuesta voluntaria, en unos, pero ineludible en otros, ante el fundado temor que origina una debacle de CiU en este ciclo electoral.
El discurso te?ido de progresismo despierta, en cambio, amplia aprobaci¨®n entre el aparato de CiU. Una encuesta realizada a finales del pasado a?o indicaba que los barceloneses, sobre todo el votante nacionalista m¨¢s fiel y el juvenil, reclamaban una apuesta m¨¢s firme por las pol¨ªticas progresistas y catalanistas. Del sondeo -no difundido- surgi¨® el lema de la precampa?a: Xavier Trias, un alcalde catalanista y de progreso.
Alguna de las propuestas de Trias, m¨¢s cercana a la de organizaciones alternativas de izquierda -el foro de Porto Alegre, por ejemplo- ha enervado al actual equipo de gobierno municipal, integrado por socialistas, Iniciativa y Esquerra Republicana, que se han esforzado por restar cr¨¦dito a un candidato que ha ocupado dos carteras en el Gobierno catal¨¢n.
Pero las propuestas de Trias, durante la campa?a, han ido acompa?adas de hechos. En la precampa?a asegur¨® que su apuesta era gobernar con Esquerra Republicana. El primer d¨ªa se present¨® en el paup¨¦rrimo barrio de Can Tunis, terreno esquivado por los candidatos durante a?os. (A la ma?ana siguiente el Ayuntamiento envi¨® una brigada de limpieza). El jueves se reuni¨® con la asociaci¨®n de gitanos de Hostafrancs. Entre estos dos actos, el candidato nacionalista ha defendido la participaci¨®n ciudadana en la redacci¨®n de los presupuestos municipales, la celebraci¨®n de referendos en los distritos, la declaraci¨®n de Collserola como parque natural y una amplia gama de iniciativas de car¨¢cter social. Y en ning¨²n momento ha vendido una imagen negativa de Barcelona. Al contrario, ha reconocido sin tapujos los ¨¦xitos socialistas.
Sabedor de que una alta abstenci¨®n complica sus expectativas electorales, Trias se enfrascar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas en una campa?a para fomentar el voto. No obstante, a Trias le importa poco perder el 25-M -siempre que la derrota no se le atragante- porque m¨¢s que el pr¨®ximo alcalde, el candidato de CiU se considera a s¨ª mismo una inversi¨®n de futuro. Ha prometido que permanecer¨¢ 12 a?os -tres legislaturas- en el Ayuntamiento. Un aspecto que le confiere solidez ante el electorado frente a la fugacidad de anteriores candidatos como Miquel Roca o Joaquim Molins.
Iron¨ªas de la campa?a electoral
Xavier Trias paseaba ayer por el barrio de Gr¨¤cia de Barcelona. Siempre sonriente, pos¨® para los fot¨®grafos con tan mala fortuna que a su espalda qued¨® la sede del PP, con el resultado que se observa en la fotograf¨ªa. Pero tampoco el PP se libra de las dobleces que ofrece el lenguaje. Al eslogan de su campa?a "Por las personas. Por ti" le han a?adido en muchos lugares una A previa, de modo que lo que queda es: "A por las personas. A por ti". Tambi¨¦n el candidato socialista sufri¨® el s¨¢bado pasado un episodio parecido, a costa esta vez de su propio eslogan: "Barcelona, la millor ciutat del m¨®n", que en la foto qued¨® fragmentado y el candidato apareci¨® se?alando un enorme "millor ciu".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.