El antiguo barrio de la c¨¢rcel se llena de pisos nuevos
Carabanchel, un distrito con tantos habitantes como A Coru?a y un 15% de su poblaci¨®n de origen extranjero, vota al PP
Carabanchel ya no es una zona de veraneo real ni tampoco el barrio del presidio. Las fincas de recreo de hace un siglo han sido sustituidas por bloques de pisos, y la c¨¢rcel, aunque a¨²n en pie, ya no encierra a ning¨²n preso. Este distrito de 233.958 habitantes, algo m¨¢s grande que A Coru?a y un poco menos poblado que Granada, est¨¢ cambiando a pasos agigantados.
Los eriales y antiguas zonas industriales han dado paso a nuevas urbanizaciones de viviendas cada vez m¨¢s caras que aportar¨¢n otros 60.000 habitantes m¨¢s a la zona. Y los poblados de chamizos como los que exist¨ªan hace una d¨¦cada junto a la sacramental de San Isidro, han sido desmantelados. Pero los problemas sociales se mantienen, de puertas adentro, en vecindarios como Pan Bendito o Alto de San Isidro, donde fueron realojados numerosos chabolistas.
Carabanchel y Latina son los ¨²nicos distritos del sur que votan mayoritariamente al PP. Este partido obtuvo el 27% de los sufragios en las ¨²ltimas elecciones municipales, frente al 23% del PSOE y el 6% de IU. En los comicios auton¨®micos los populares lograron el 28% de las papeletas; el PSOE, el 22%, e IU, el 3%.
Como todo pueblo que se precie, Carabanchel tiene un barrio de arriba (alto) y otro de abajo. La principal diferencia entre uno y otro es que el alto carece de metro. Y no ser¨¢ porque los vecinos no se han movilizado para conseguirlo. Adem¨¢s, ¨¦sta es la zona del distrito que m¨¢s crecer¨¢ en los pr¨®ximos a?os, porque en la linde con Legan¨¦s se est¨¢n construyendo 11.300 viviendas.
Pero la ampliaci¨®n del metro no es la ¨²nica raz¨®n que ha sacado a la calle a los vecinos del distrito. Tambi¨¦n se han manifestado en reiteradas ocasiones para pedir un uso civil del hospital militar G¨®mez Ulla y para reclamar que los terrenos de la c¨¢rcel se dediquen a equipamientos para el barrio y no a la construcci¨®n de pisos privados. Pero por ahora ninguna de las dos reivindicaciones ha tenido ¨¦xito. El G¨®mez Ulla da ahora el servicio que prestaba el hospital del Aire de Ciudad Lineal antes de iniciarse su remodelaci¨®n, y en los terrenos de la c¨¢rcel s¨®lo funciona un reformatorio para chavales autores de delitos y est¨¢ prevista la comisar¨ªa de Latina, un centro de internamiento de inmigrantes sin papeles y la Brigada Provincial de Extranjer¨ªa y Documentaci¨®n. Lo de las protestas no es nuevo. Gracias a ellas los vecinos consiguieron hace ya muchos a?os que el parque de las Cruces fuera eso, un parque, y no una zona verde cuajada de casas.
Durante toda la d¨¦cada de los noventa, uno de los lemas m¨¢s coreados en el distrito fue el de Los camellos, al desierto. Sobre todo en barrios como Pan Bendito, un vecindario de viviendas sociales que sigue teniendo hoy d¨ªa graves problemas de marginaci¨®n social, absentismo escolar, inseguridad y tr¨¢fico de drogas. En ¨¦sta y en otras zonas de realojamiento de chabolistas, algunos colegios se han convertido en guetos donde el 90% de los alumnos son ni?os gitanos de ambientes deprimidos.
Para ser un vecindario de origen obrero, el peso de la ense?anza p¨²blica en Carabanchel es bastante bajo: s¨®lo estudian en ella un 40% de los escolares, y el resto acude a centros privados concertados. M¨¢s del 15% de los alumnos de los centros p¨²blicos proceden de minor¨ªas ¨¦tnicas (inmigrantes, gitanos).
?ste es el distrito madrile?o con m¨¢s cementerios (tiene siete, uno de ellos brit¨¢nico). Tambi¨¦n es el que alberga m¨¢s reformatorios: en ¨¦l est¨¢n ubicados cuatro de los siete que existen, la mayor¨ªa de ellos en la finca de Puerta Bonita, que acoge tambi¨¦n numerosos centros educativos y residencias de ancianos. Dos de cada diez vecinos tienen m¨¢s de 65 a?os y s¨®lo el 14% son ni?os.
Pese a las nuevas viviendas de lujo, Carabanchel sigue teniendo algunas caracter¨ªsticas de barrio obrero donde el paro y los problemas para llegar a fin de mes forman parte del d¨ªa a d¨ªa. As¨ª, su renta per c¨¢pita anual, de 9.170 euros, es inferior a la media de la ciudad (11.961 euros), y la tasa de paro, del 8,7%, superior. El metro de vivienda nueva cuesta 1.980 euros, menos de la mitad que en el distrito de Salamanca. Carabanchel es, tras Centro y Tetu¨¢n, el tercer distrito con m¨¢s peso de la poblaci¨®n extranjera. Un 15% de sus habitantes procede de otros pa¨ªses, sobre todo de Ecuador, Colombia, Marruecos, Per¨², Rumania y China. Los barrios de Vista Alegre y San Isidro son los m¨¢s mestizos. La existencia de viviendas de alquiler a precios m¨¢s bajos que en el centro es lo que lleva a los inmigrantes a este barrio.
Rodeado por la M-30 y por la M-40, ¨¦ste es uno de los distritos m¨¢s contaminados de la ciudad. Y si el Ministerio de Fomento cumple su prop¨®sito de ampliar la M-40, algunas zonas verdes previstas en el ensanche del distrito sufrir¨¢n un importante mordisco. El distrito cuenta con tres parques, el de las Cruces, el de la Emperatriz Mar¨ªa de Austria y el de San Isidro. Dispone tambi¨¦n de una plaza de toros, la antigua Chata.
Carabanchel cuenta con la iglesia m¨¢s vieja de la ciudad, la de Santa Mar¨ªa de la Antigua, y tambi¨¦n con uno de los puentes m¨¢s bellos, el de Toledo, que une este distrito con el coraz¨®n de la capital. Pero, aparte de esas dos joyitas quedan muy pocos vestigios del pasado de estas antiguas tierras de labranza. Algunos dicen que la palabra Carabanchel viene de las numerosas caravanas de comerciantes que, tras su paso por la ciudad, se afincaban en la zona. Otros aseguran, sin embargo, que el nombre se lo dio una legumbre, el garbanzo, plantada profusamente en la zona antes de que se llenara de casas, cementerios y carreteras.
CARABANCHEL
Poblaci¨®n total: 233.958
Inmigrantes: 34.755 (15%)
Menores: 33.014 (14%)
Mayores: 48.301 (20%)
Parados: 8.483 (8%)
Precio medio m2: 1.980
Renta 'per c¨¢pita' anual: 9.170
Voto en municipales 1999: PP, 27%; PSOE, 23%; IU, 6%; abstenci¨®n, 39%.
Voto en auton¨®micas 1999: PP, 28%; PSOE, 22%; IU, 4%; abstenci¨®n, 3%.
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