La ilusi¨®n del m¨¢s veterano

Alfredo Garc¨ªa es ya abuelo con 56 a?os y cinco hijas. Naci¨® en Pamplona, es trabajador de la Mancomunidad de la Comarca y alcalde socialista de Anso¨¢in, una poblaci¨®n del cintur¨®n industrial de la capital navarra que supera los 6.000 vecinos. Garc¨ªa es candidato del PSN-PSOE a la reelecci¨®n y algo m¨¢s: es el alcalde m¨¢s veterano de Navarra. Desde 1976 gobierna los destinos de su pueblo.

Se confiesa amante de la juerga, pero recuerda perfectamente que la conciencia pol¨ªtica le surgi¨® cuando se cas¨® en 1970 y fue a vivir a Anso¨¢in, un pueblo que era entonces un polo de desarrollo, carente de todo servicio pero con "mucha iniciativa social, mucha solidaridad entre trabajadores". Comenz¨® a participar en movimientos clandestinos y en 1973 fue elegido por vez primera concejal tras presentarse por el llamado tercio familiar, el ¨²nico resquicio de acceso democr¨¢tico a las instituciones de aquella ¨¦poca.

Fue elegido por vez primera alcalde-presidente del entonces concejo de Ansoain el 12 de abril de 1976, pero tuvieron que pasar otros tres a?os hasta poder presentarse a las primeras elecciones democr¨¢ticas de la transici¨®n. Lo hizo ya por las siglas del PSN-PSOE, aunque entonces era el Ayuntamiento de la Cendea de Ansoain lo que se eleg¨ªa, una estructura organizativa que agrupaba a doce localidades del entorno. Adem¨¢s, aquella primera legislatura fue elegido parlamentario foral.

"Y as¨ª hasta el d¨ªa de hoy", afirma tranquilo, restando importancia a las seis elecciones consecutivas que ha ganado, algunas con mayor¨ªas absolutas, en un pueblo que en 1991 se convirti¨® en ayuntamiento independiente. Sentado en el despacho de alcald¨ªa de la flamante Casa Consistoral, aprecia una creciente tendencia a la insolidaridad entre los ciudadanos. Sus ojos han visto la creaci¨®n y aparici¨®n de muchos partidos que pasaron a la historia. Dice que ¨¦l lo tiene f¨¢cil. "Cuando te presentas tantas veces, los vecinos te conocen de sobra. No tienes que inventar nada ni decir nada nuevo. Lo que has hecho es lo que vale".

Su secreto quiz¨¢ sea la prudencia, que le ha permitido cumplir, asegura, todos sus programas. Aunque parezca mentira, Alfredo tiene "la misma ilusi¨®n" que en los primeros comicios. "La falta de frescura la vas supliendo como los toreros, con veteran¨ªa", bromea este alcalde que ejerce despu¨¦s de levantarse a la seis de la ma?ana y cumplir su jornada laboral. ?Se presentar¨¢ dentro de cuatro a?os? Garc¨ªa sonr¨ªe y no responde. "Llegar hasta aqu¨ª ya ha sido un triunfo personal y pol¨ªtico, pero los a?os pasan y pesan", responde.