Seis encapuchados asaltan un chal¨¦, apalean al due?o y amordazan a su esposa y una hija

Media docena de atracadores, "por lo menos", asaltaron a las dos de la madrugada de ayer el chal¨¦ de la calle de la Abubilla, 43, en la elitista colonia del parque del Conde de Orgaz, en Madrid. El matrimonio ?lvarez Cobo y su hija soltera, de 29 a?os, dorm¨ªan en la segunda planta. En el s¨®tano de la casa se encontraban dos personas m¨¢s, amigos de la familia, que no se enteraron de nada. Todos salieron ilesos. Los asaltantes "s¨®lo quer¨ªan dinero" y se fueron con 6.000 euros en met¨¢lico y "un par de sortijas".

Los delincuentes saltaron la valla del jard¨ªn adosado y entraron por una puerta abierta al sal¨®n. Subieron a la habitaci¨®n del matrimonio y lo despertaron enfoc¨¢ndole con sus linternas en la oscuridad.

El marido trat¨® de defenderse y de alcanzar el telemando que alerta a los guardas de la colonia, en el parque del Conde de Orgaz, una urbanizaci¨®n de casas ajardinadas donde viven varios futbolistas famosos. Los asaltantes, para impedirlo, tuvieron que darle una paliza que le dej¨® inconsciente. Ayer pas¨® por el hospital. Ten¨ªa un fuerte golpe en la sien izquierda, un hematoma en el ojo y la mu?eca izquierda hinchada y con ara?azos. "Me pusieron morado de golpes", recordaba ayer.

Despu¨¦s amordazaron a la mujer y a la hija. Con las manos atadas y un hacha amenaz¨¢ndola, baj¨® la madre hasta el primer piso a darles el dinero que ped¨ªan.

La condujeron directamente a la pared, bajo las escaleras, donde la familia ten¨ªa el a?o pasado una caja fuerte empotrada. "Menos mal que ten¨ªamos dinero en casa para comprar unos cuadros, porque yo no suelo tener. Cuando lo necesito, voy al cajero, como todo el mundo", explica Julio ?lvarez, asesor de empresas. "Yo hubiera ido al cajero con ellos si hubieran querido, les ofrec¨ª las joyas, pero no las quer¨ªan, s¨®lo quer¨ªan dinero", dice la mujer.

?Por qu¨¦ condujeron directamente a la due?a del chal¨¦ a la antigua caja fuerte? El matrimonio cree que los asaltantes son los mismos que lo intentaron en julio del a?o pasado. Entonces destrozaron la pared, pero no pudieron llevarse la caja fuerte.

No saben mucho m¨¢s. S¨®lo que son espa?oles. Una vez se hicieron con el bot¨ªn, los delincuentes exigieron a las v¨ªctimas que no avisaran a nadie hasta pasados 10 minutos. Rompieron una farola del jard¨ªn al escalar para salir a la calle. El ruido del portazo pudo o¨ªrlo el marido, al que la mujer trataba de reanimar, "sin saber si estaba vivo o muerto". Entonces llamaron a los guardas de la urbanizaci¨®n, que a su vez avisaron a la polic¨ªa.

?No hab¨ªan o¨ªdo nada los vecinos? "S¨ª, nos oyeron gritar, pero pensaron que nos est¨¢bamos peleando porque yo le dec¨ªa a mi marido: 'Julio, calla; Julio, calla'. Eso nos han dicho, los pobres estaban muy disgustados porque estuvieron a punto de avisar a los guardas... y no lo hicieron. No nos conocemos mucho, s¨®lo llevamos cuatro a?os aqu¨ª, antes est¨¢bamos en Bilbao", explica la mujer.