"Entre escribir m¨²sica y actuar, me quedo con lo segundo"

En 1966, Peter Gabriel (Londres, 1950) se uni¨® a cuatro compa?eros de escuela para formar el grupo Genesis y pronto comenz¨® a desarrollar una personalidad ¨²nica, ejerciendo al mismo tiempo de cantante y maestro de ceremonias, maquillado y ataviado en muchas ocasiones como personaje fant¨¢stico. En 1975 abandon¨® el grupo para iniciar una carrera en solitario, y desde entonces, aunque en su discograf¨ªa completa figuran quince t¨ªtulos, s¨®lo se puede hablar de cinco discos propios (los otros son bandas sonoras o directos) que incluyen ¨¦xitos como Biko, Shock the monkey, Red rain o Sledgehammer. El ¨²ltimo de ellos, Up, aparecido el a?o pasado, fue largamente esperado, casi una d¨¦cada, por sus admiradores. Peter Gabriel no s¨®lo hace m¨²sica, sino que impulsa a otros creadores a trav¨¦s de su sello Real World, el festival Womad o a trav¨¦s de Internet con On Demand Distribution (OD2).

El espect¨¢culo que lleva actualmente de gira por Europa, y posteriormente por Estados Unidos, requiere ciertas condiciones que no se encuentran en cualquier recinto. En Espa?a actuar¨¢ solamente en el Palau Sant Jordi, de Barcelona, el d¨ªa 1 de junio. "Mi idea era actuar tambi¨¦n en Madrid, pero llevamos una torre muy grande que no encaja en cualquier recinto. Eso nos ha limitado en varios pa¨ªses", explica Gabriel. "En la ocasi¨®n anterior ten¨ªamos dos escenarios. Uno de ellos era m¨¢s masculino y urbano y el otro m¨¢s femenino y ligado a la naturaleza, que situamos en medio de la gente. Disfrutamos mucho eso de estar rodeados por el p¨²blico, o sea que ahora lo hemos planteado as¨ª, un escenario circular que tiene a su vez dos planos, el del cielo y el de la tierra. Hemos ido de una divisi¨®n horizontal a una vertical", afirma Gabriel.

"Algunas de las canciones tratan sobre el inicio del fin de la vida, y me refiero a eso m¨¢s que a estar en la mitad de la existencia. Por eso lleva el t¨ªtulo de Growing Up (crecer en ingl¨¦s, pero con referencias tambi¨¦n a Up, su ¨²ltimo disco). Son ideas que fueron surgiendo y cobraron poco a poco forma. Siempre me ha gustado alternar conciertos solo musicales con otros que incluyan adem¨¢s alg¨²n tipo de espect¨¢culo visual. Es algo que me ha encantado desde mis inicios, sobre todo en los ¨²ltimos tiempos cuando he podido trabajar con el director esc¨¦nico franc¨¦s Robert Lepage, que es simplemente brillante. Es un aut¨¦ntico placer poder intercambiar ideas con ¨¦l. Creo que entiende muy bien la m¨²sica y conoce bien mi trabajo, hemos tenido una buena relaci¨®n durante muchos a?os".

A lo largo del concierto, Peter Gabriel

se introduce en una gran esfera iluminada y en otros momentos usa una barca de remos, una bicicleta o incluso prepara un t¨¦ en escena. "Lo de la esfera es algo muy divertido de hacer, la encontr¨¦ en una p¨¢gina de Internet sobre deportes de riesgo y la utilizo en la canci¨®n Growing

up. No es necesario ser un atleta para usarla, aunque me llev¨® un tiempo aprender a maniobrarla", afirma.

A veces parece que este artista, inquieto y original, buscara siempre integrar en la m¨²sica otros medios de expresi¨®n esc¨¦nica, un lejano eco de la vieja ambici¨®n de lograr la obra de arte total. "Yo dir¨ªa que es algo mucho m¨¢s simple que esa gran ambici¨®n wagneriana. Me encanta el cine, por ejemplo, y cuando haces buena m¨²sica para cine obtienes algo muy poderoso compuesto de la fuerza de la imagen y de la m¨²sica ligada a ella. Yo simplemente disfruto lo que hago, pero si puedo incluir actuaciones y elementos visuales, la m¨²sica se enriquece y se transforma".

Sin embargo, el ¨²ltimo trabajo esc¨¦nico de Gabriel, Ovo, la pieza encargada para el Millenium Dome, no lo dej¨® satisfecho. "En este espect¨¢culo he tenido yo el control de lo que hac¨ªa y en Ovo no fue as¨ª. Hab¨ªa mucha gente metida, gente del Gobierno que deb¨ªa gestionar muchas cosas, se convirti¨® en algo rid¨ªculo. Ten¨ªa cosas que estaban bien, pero ha sido la peor de mis experiencias de colaboraci¨®n", dice.

Hac¨ªa tiempo que Peter Gabriel no sal¨ªa de gira. Lleg¨® un momento que quiso cortar con la rutina de disco-gira-disco-gira, pero hay cosas que se echan de menos. "Hace casi diez a?os que no iba de gira. Dejar de tocar tu m¨²sica implica una relaci¨®n distinta con el p¨²blico. Si tuviera que elegir entre actuar y escribir elegir¨ªa, sin pensarlo, actuar. Disfruto mucho salir a la carretera y, aunque nos llev¨® un tiempo asentar la banda, ahora la siento muy s¨®lida y sigue siendo divertido". Lo acompa?an en esta gira Richard Evans y David Rhodes (guitarras), Melanie Gabriel (voces), Anthony Levin (bajo), Gerard Lynch (bater¨ªa) y Rachel Nicolazzo (teclados).

Peter Gabriel, que siempre se ha expuesto y ha buscado en los m¨¢s diversos universos musicales, sigue componiendo canciones pop que quiz¨¢ no dan se?ales de ese tipo de influencias. No es un vendedor de discos, ni lo hace por motivos mercantiles: "Creo que es lo que s¨¦ hacer y, a medida que te haces mayor, es mejor quedarte en lo que sabes hacer", dice.

Parte de los beneficios de esta gira ir¨¢n a parar a otro de los proyectos de Peter Gabriel, el programa Witness (testigo) que desde 1992 dota a activistas defensores de los derechos humanos en diferentes partes del mundo de tecnolog¨ªa para que se facilite la denuncia de las irregularidades que vean. "Hemos proporcionado cerca de cien c¨¢maras y ordenadores a activistas de los derechos humanos en varios pa¨ªses. Son gente que se arriesga mucho para obtener esas grabaciones. Se ha utilizado, por ejemplo, durante las exhumaciones de cad¨¢veres despu¨¦s de algunas masacres; en M¨¦xico se hizo un trabajo sobre la situaci¨®n de los hospitales psiqui¨¢tricos. Es una organizaci¨®n muy peque?a, pero que pretende dar un servicio a las otras organizaciones de derechos humanos".

Como telonera en el concierto de Barcelona actuar¨¢ Sevara Nazarkhan, una artista de Uzbekist¨¢n que presenta su disco Yol Bolsin.