Almir Chediak, editor y productor musical brasile?o
Almir Chediak, productor de discos y editor de los cancioneros de m¨²sica brasile?a, fue asesinado la noche del domingo cerca de Petr¨®polis, en la sierra de R¨ªo de Janeiro.
Chediak, de 52 a?os, recibi¨® cuatro disparos en la cara que le causaron la muerte. Al llegar a su residencia secundaria, en Araras, habr¨ªa sorprendido en el interior a dos encapuchados que, tras atarle, le obligaron a subir en su propio coche, un Jeep Cherokee, y lo condujeron por diversas carreteras hasta el lugar donde hicieron que se bajara y lo ejecutaron. M¨¢s tarde prendieron fuego al veh¨ªculo. Su novia, la cantante Sanny da Costa Alves, de 34 a?os, salv¨® la vida al ser abandonada al borde de un camino.
Chediak se convirti¨® en el editor de los libros de partituras de grandes compositores de Brasil. El primero de estos songbook lo public¨® en 1988. Antes, hab¨ªa sido profesor de guitarra. Con Chediak aprendieron los primeros acordes, o mejoraron su t¨¦cnica, Gal Costa, Nara Le?o, Tim Maia, Elba Ramalho o los hijos de Caetano Veloso -Moreno- y Moraes Moreira -Davi-. Otros estudiaron armon¨ªa y teor¨ªa con ¨¦l, o a trav¨¦s de dos libros suyos de referencia: Dicion¨¢rio de acordes cifrados -armon¨ªa aplicada a la m¨²sica popular- y Harmonia e improvisa??o.
Pero fueron los songbook los que le hicieron popular. En estrecha colaboraci¨®n con cada uno de los compositores, Almir Chediak anot¨® sus canciones con la m¨¢xima fidelidad: transcripciones de melod¨ªas, armon¨ªas y letras, adem¨¢s de entrevistas y biograf¨ªas. As¨ª, canciones publicadas anteriormente con errores de toda ¨ªndole ve¨ªan c¨®mo por fin se les hac¨ªa justicia. La colecci¨®n de los songbook constituye su gran contribuci¨®n a la m¨²sica brasile?a.
Como dijo el cantante Ed Motta, "dej¨® buena parte de nuestra memoria musical registrada en partituras". La idea de reunir en un libro la obra de un compositor surgi¨® cuando Chediak, nacido en R¨ªo el 21 de junio de 1950, en una familia de origen liban¨¦s, daba clases de guitarra al hijo de Caetano, que entonces ten¨ªa 10 a?os.Cuenta que ¨¦l ya sacaba las canciones de o¨ªdo para sus alumnos. "Una forma de mantenerlos interesados, porque ense?ar s¨®lo teor¨ªa musical es un rollo", sol¨ªa decir. A Caetano le pareci¨® bien y acept¨® elegir el repertorio y revisar las correcciones.
Luego llegar¨ªan los songbook de Antonio Carlos Jobim, Gilberto Gil, Djavan, Vin¨ªcius de Moraes, Marcos Valle, Ary Barroso, Dorival Caymmi, Edu Lobo, Carlos Lyra, Cazuza, Rita Lee o los cinco de la bossa nova. Hasta un total de 18. Con una novedad: a partir de 1991, con el de Noel Rosa, empezaron a salir al mercado acompa?ados de grabaciones originales de las canciones a cargo de otros cantantes e instrumentistas. El m¨¢s ambicioso de todos: el de Chico Buarque, en cuatro libros con 222 canciones y ocho compactos con 116 cortes. Acababa de terminar el de Jo?o Bosco y ya ten¨ªa previstos los de Ivan Lins y Dori Caymmi.
Lumiar, la editora que cre¨® para la publicaci¨®n de los valiosos songbook, tambi¨¦n edit¨® biograf¨ªas de Pixinguinha o Ary Barroso, escritas por S¨¦rgio Cabral, y produjo discos de Jo?o Donato, Leny Andrade o Rosa Passos. Jobim particip¨® en tantos songbook que sus grabaciones est¨¢n juntas en Minha alma canta, el ¨²nico disco en el que el maestro canta ¨²nicamente canciones ajenas.
Almir Chediak fue enterrado el martes en el cementerio de Caj¨², zona norte de R¨ªo, y los asistentes le despidieron con Acontece que sou baiano, de Dorival Caymmi, una de sus canciones preferidas.
El ministro de Cultura, Gilberto Gil, remiti¨® una nota a los medios en la que dice que Chediak "hizo el puente entre lo po¨¦tico y lo t¨¦cnico con maestr¨ªa y dedicaci¨®n" y que, gracias a su trabajo, "las canciones estar¨¢n siempre disponibles para el uso de las futuras generaciones".-
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.