El delito de cohecho supone la inhabilitaci¨®n para ocupar cargos p¨²blicos

"En un sistema democr¨¢tico representativo no hay espacio posible para la corrupci¨®n que supone la compra de votos (...) por lo que la acci¨®n enjuiciada ser¨¢ en todo caso injusta aun cuando no constituya una infracci¨®n tipificada que conlleve sanci¨®n", es decir aun cuando la compra de un voto no se haga para cometer un delito, sino una acci¨®n injusta.

As¨ª lo estableci¨® en diciembre de 2000 una sentencia del Tribunal Supremo, de la que fue ponente el magistrado Jos¨¦ Antonio Mart¨ªn Pall¨ªn. Se juzgaba al entonces senador Dimas Mart¨ªn, del Partido de Independientes de Lanzarote (PIL), por haber comprado el voto de un concejal del PP, tambi¨¦n condenado.

C¨¢rcel y multa, seg¨²n la modalidad de que se trate, e inhabilitaci¨®n por el tiempo de la condena. Esa es la sanci¨®n que el C¨®digo Penal tiene prevista para el cohecho si un tribunal llega a la conclusi¨®n de que una autoridad o funcionario p¨²blico solicitara o recibiera "por s¨ª o por persona interpuesta, d¨¢diva o presente" para cometer un delito o un acto injusto.

El dirigente del PIL Dimas Mart¨ªn, condenado en 1993 por cohecho, cuando era concejal del Ayuntamiento de Teguise (Lanzarote) y presidente del cabildo insular, volvi¨® a ser condenado en diciembre de 2000 en sentencia firme del Tribunal Supremo por haber pactado con el concejal del PP Juan Carlos Hern¨¢ndez Cabrera -tambi¨¦n condenado- el pago de 12 millones de pesetas y un cargo en el Ayuntamiento a cambio de que ¨¦ste se abstuviera en una votaci¨®n, de forma que el alcalde elegido fuese del PIL.

Dimas Mart¨ªn, que cumpli¨® la condena, ha vuelto a ser elegido, el pasado 25 de mayo, como consejero del Cabildo Insular de Lanzarote y puede alcanzar la presidencia de ese organismo con el apoyo de CC y del PP.