El Fen¨®meno corona su a?o m¨¢gico

Dos arrancadas de Zidane pusieron la base de la sencilla victoria del Madrid. El resto qued¨® a cargo de Ronaldo, que anot¨® el tercer gol con un tiro cruzado, uno de los muchos que le han dado fama. En los duelos con el portero se aprecia su sabidur¨ªa de delantero. Escoge los rincones, no se altera, emite el mensaje del goleador. El tanto cerr¨® el partido como tal. El resto fue fiesta madridista. Del Bosque, cuya atenci¨®n a los detalles del protocolo no se discute, se tom¨® la libertad de sustituir a Ronaldo. La gente se levant¨® entusiasmada y le ovacion¨® con agradecimiento. As¨ª de cambiante es el f¨²tbol. Ronaldo abandon¨® el campo con la sonrisa que le caracteriza, la de un futbolista relajado en los buenos y en los malos tiempos. Y ¨¦stos han sido sensacionales para Ronaldo. Regres¨® para ganar el Mundial. Fich¨® por el Madrid y ha desmontado cualquier sospecha sobre su rodilla, su rendimiento y su contribuci¨®n al equipo. En el Madrid ha ganado su primera Liga, con todo el derecho a proclamarse primer protagonista del ¨¦xito. Se lo reconoci¨® el p¨²blico de forma estruendosa y ya no hubo otra cosa que festejar el triunfo del campe¨®n.