Un v¨ªnculo desinteresado y de puro placer
Francisco Garc¨ªa Lorca era hasta ahora conocido por ser autor de uno de los libros m¨¢s interesantes y reveladores en torno a la figura de su hermano. Federico y su mundo, publicado por Mario Hern¨¢ndez en 1980, cuatro a?os despu¨¦s de su muerte, ofrece una gran cantidad de claves biogr¨¢ficas relacionadas con hechos po¨¦ticos que permiten al lector conocer cu¨¢l fue el proceso, la motivaci¨®n y hasta las referencias de Federico Garc¨ªa Lorca en un determinado poema. As¨ª, por ejemplo, Francisco narraba que el famoso verso "Y que yo me la llev¨¦ al r¨ªo / creyendo que era mozuela" proced¨ªa de una expresi¨®n que tanto ¨¦l como su hermano oyeron decir a un labrador de Sierra Nevada. Ese libro acaba de ser reeditado en la colecci¨®n de La Huerta de San Vicente.
Francisco Garc¨ªa Lorca tiene todav¨ªa una novela in¨¦dita, inconclusa, que ser¨¢ publicada en el futuro y que, durante su proceso de creaci¨®n, despert¨® una enorme pasi¨®n en Federico Garc¨ªa Lorca. "Mi hermano est¨¢ escribiendo una novela formidable que tienes que leer", sol¨ªa escribir a sus amigos, absolutamente entusiasmado.
Su nivel de autoexigencia, sin embargo, no le permiti¨® entregar nada a la imprenta y fue s¨®lo una casualidad el que se descubrieran sus poemas. "Estaban guardados en el escritorio de su despacho", relata Rafael Ju¨¢rez, poeta y responsable de la reedici¨®n de Poes¨ªa por parte de la Diputaci¨®n de Granada. "Mientras su familia hac¨ªa limpieza para recopilar sus documentos, fue cuando aparecieron los poemas. ?l nunca hab¨ªa hecho referencia a ellos".
Para Ju¨¢rez, la intenci¨®n de Francisco Garc¨ªa Lorca era la de tener una relaci¨®n personal con la poes¨ªa sin que ¨¦sta tuviera necesariamente que ser publicada o le¨ªda por otros. "Era una relaci¨®n desinteresada, gratuita, podr¨ªamos decir, no profesional, tan s¨®lo de puro placer. Escribi¨® los poemas y los guard¨® porque no persegu¨ªa buscar fama con ellos". "En los buenos poetas", a?ade Ju¨¢rez, "la actitud m¨¢s frecuente es no publicar, mejor que publicar. Pulir una y otra vez un verso. Tal vez ¨¦l no quer¨ªa mostrar un poema hasta que estuviese absolutamente seguro de que era un poema redondo, bien hecho".
En el libro Poes¨ªa, una gran parte del mismo est¨¢ poblada de recuerdos intensos de la infancia. Ah¨ª s¨ª coinciden Francisco y Federico con determinadas im¨¢genes, como los chopos de Fuente Vaqueros, los r¨ªos, la Vega de Granada, los olivares y una continua llamada a la madre.
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