Rascarse
Mientras ETA sigue con su particular forma de entender el veraneo, Arenas despacha la crisis del PP en Almer¨ªa a costa de Antonio Sanz, y Tamayo sigue hablando de mao¨ªstas -por cierto que Piqu¨¦ fu¨¦ mao¨ªsta antes que fraile-, algunos empezamos a hacer las maletas para tomar nuestro inmerecido descanso.
Claro que con este tel¨®n de fondo que se puede ampliar mucho m¨¢s -violencia dom¨¦stica, accidentes de trabajo en cascada, o el b¨²scate el dinero de Juli¨¢n que no se lo encuentra- puede que, en lugar de descansar, aumente el desasosiego individual y el social, y nos fastidie el verano. Ya, si est¨¢s en la playa, y los americanos te tiran unas fotograf¨ªas de los hijos de Sadam muertos y una copia de sus pr¨®tesis dentales, para que los dentistas no duden que est¨¢n muertos y bien muertos, el descanso peligra a¨²n m¨¢s. Eso s¨ª te puedes aliviar, y morirte de la risa, mirando como Fraga y Cascos se colocan medallas como si el Prestisge hubiera tra¨ªdo coral en lugar de mierda.
Ahora bien, si de verdad lo que quieres es descansar, sin morirte de la risa, y si lo que quieres es olvidarte que algunos inmobiliarios, con el apoyo de algunos del PP, han influido en Tamayo m¨¢s que el mao¨ªsmo, cabe alg¨²n otro remedio.
El remedio se me ocurri¨® con motivo de la lectura de un estudio sobre "el picor y el placer de rascarse", que public¨® este mismo diario. Dec¨ªan, los cient¨ªficos, que rascarse crea un ligero dolor que sirve para distraer neurol¨®gicamente el cerebro. Y a?ad¨ªan que el cerebro, al centrarse en este dolor, olvida el picor.
Pues, bien, cuando estemos descansando, y nos amenacen con lanzarnos las dentaduras de los hijos del Sadam o cuente Arenas el cuento de que es andaluz por m¨¢s se?as, cogemos un martillo de mayor o menor volumen -debe estar en funci¨®n de la preocupaci¨®n que provoque el hecho-, y nos atizamos en la parte que m¨¢s nos duela. Es seguro que con este sistema el cerebro se olvida moment¨¢neamente de Tamayo, de Arenas, y hasta de la madre que nos pari¨®. Claro que el problema est¨¢ en que el remedio s¨®lo es moment¨¢neo. De ah¨ª que mientras se inventa o se encuentra otro remedio, coger¨¦ la maleta en la que colocar¨¦ el ba?ador, poco m¨¢s y una cosita para rascarme por si las cosas se ponen feas. Feliz verano.
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