La ola de calor destapa el enfrentamiento entre las el¨¦ctricas y la industria

La ola de calor, que ha provocado r¨¦cords de consumo el¨¦ctrico, ahonda las divergencias entre las compa?¨ªas distribuidoras y sus principales clientes, las empresas industriales. Para disminuir el alto consumo y evitar apagones, las el¨¦ctricas propugnan una subida de las tarifas. Por su parte, la industria argumenta que el problema del sistema el¨¦ctrico no se resuelve con subidas de precios, sino mejorando las redes, como se ha visto en Andaluc¨ªa, donde un pacto entre cuatro grandes consumidores y Red El¨¦ctrica Espa?ola (REE) ha evitado apagones como los de Baleares.

A lo largo del mes de julio, las empresas Acerinox, Sider¨²rgica Sevillana, Balboa y Aragonesas, todas ellas con importantes plantas de producci¨®n en Andaluc¨ªa, alcanzaron con REE -encargada del transportre el¨¦ctrico y operador t¨¦cnico del sistema- un pacto de aprovechamiento de la llamada potencia reactiva. El acuerdo entre las industrias y la empresa de alta tensi¨®n ha servido para disminuir considerablemente la sobrecarga de las l¨ªneas y, en consecuencia, ha evitado que se produjeran grandes apagones.

Adem¨¢s de mejorar por este concepto, la calidad de la red en Andaluc¨ªa, a lo largo de este t¨®rrido verano, se est¨¢ beneficiando tambi¨¦n de los contingentes de energ¨ªa el¨¦ctrica importados desde Marruecos y del cierre temporal de las exportaciones.

Las compa?¨ªas el¨¦ctricas se plantean que la tarifa penalice el alto consumo tanto de particulares como de industriales, seg¨²n se?alan fuentes autorizadas del sector. Aunque la patronal, Unesa, no se ha manifestado al respecto, lo cierto es que las compa?¨ªas est¨¢n desplegando una

campa?a encaminada a conseguir una subida sustancial de tarifas a partir de enero de 2004, en l¨ªnea con la llamada tarifa de compensaci¨®n, de 1.500 millones de euros, recientemente otorgada por el Ministerio de Econom¨ªa para compensar el d¨¦ficit tarifario de los ¨²ltimos a?os.

Los portavoces de las dos principales campa?¨ªas el¨¦ctricas matizaron ayer la postura del sector: "Habr¨¢ que ver la evoluci¨®n de los ¨²ltimos meses del ejercicio antes de entrar en el pr¨®ximo a?o", dijo Endesa, mientras que Iberdrola afirm¨® desconocer la petici¨®n de subida de precios por parte del sector y remiti¨® a las declaraciones recientes de Javier Villalba, director de distribuci¨®n del grupo, referidas a que "los incrementos de demanda demuestran el buen funcionamiento del sistema".

En opini¨®n de las industrias b¨¢sicas, "la sobrecarga de las redes y los cortes de luz tienen causas t¨¦cnicas y no dependen del consumo y del precio", seg¨²n la Asociaci¨®n de Grandes Consumidores (AEGE), que engloba a los grandes grupos implantados en Espa?a, como Repsol, Aceralia, Solvay, Acerinox, Renfe, Bayer, Ercros y Aragonesas, entre otras.

Las empresas pagan sus recibos el¨¦ctricos a las distribuidoras, Endesa, Iberdrola, Hidrocant¨¢brico y Uni¨®n Fenosa, que son las que les dan el servicio de proximidad. Pero, aunque no existe en la actualidad una guerra abierta entre AEGE y las compa?¨ªas el¨¦ctricas, las industrias tienen intenci¨®n de seguir realizando acuerdos exclusivamente con REE, y no con las distribuidoras, porque de este modo se aseguran la calidad del servicio en todo el territorio espa?ol. La red de alta tensi¨®n cubre todo el pa¨ªs y los grandes consumidores tienen f¨¢bricas en todas las autonom¨ªas.

Las empresas englobadas en AEGE se mantienen en el mercado el¨¦ctrico regulado, que se rige por la tarifa, a pesar de que por ley podr¨ªan acceder al mercado liberalizado, que se rige por los precios del pool fijados a diario a trav¨¦s del Operador del Mercado El¨¦ctrico (Omel). El segmento liberalizado cuenta en la actualidad con unos 70.000 puntos de suministro autorizados en toda Espa?a, pero s¨®lo unos 35.000 ejercen este derecho y en conjunto representan el 30% de la energ¨ªa total consumida por el sistema el¨¦ctrico peninsular.

Para explicar por qu¨¦ se mantienen al margen del mercado liberalizado, los grandes consumidores industriales argumentan que compiten en mercados internacionales, que han desmontado sus antiguas barreras arancelarias y se encuentran en r¨¦gimen de plena competencia. Sin embargo, y pese a moverse en este escenario, una parte importante de los costes de estas empresas -los energ¨¦ticos- est¨¢ condicionada por el funcionamiento oligopol¨ªstico del sector electrico espa?ol, cuya actividad sit¨²a el precio del pool del segmento liberalizado muy por encima de la tarifa.