Los expertos sostienen que la larga can¨ªcula increment¨® la mortalidad entre los ancianos

Una de cautela y otra de certeza. Los expertos consultados asumen que con los datos de registros civiles y tanatorios recabados por este peri¨®dico parece claro que ha aumentado la mortalidad, sobre todo de ancianos, durante la ola de calor. Pero ninguno se aventura a realizar una proyecci¨®n de cu¨¢ntas personas han fallecido por las altas temperaturas, si bien consideran que en ning¨²n caso la cifra se acercar¨¢ a las 5.000 defunciones en Francia. Seg¨²n las comunidades aut¨®nomas s¨®lo 54 personas, la mayor¨ªa de avanzada edad, murieron a consecuencia de la inusual can¨ªcula.

"Las altas temperaturas de este verano tienen que haber tenido una repercusi¨®n en el aumento de la mortalidad entre las personas mayores", apunta el presidente de la Sociedad Espa?ola de Geriatr¨ªa y Gerontolog¨ªa, Isidoro Ruip¨¦rez. Sin embargo, se muestra cauto, dada la falta de datos globales.

Para el presidente de los geriatras, las v¨ªctimas de la ola de calor habr¨¢ que buscarlas sobre todo entre los m¨¢s mayores. Las enfermedades relacionadas con el calor son "muy geri¨¢tricas", comenta. "Sobre todo los ancianos m¨¢s fr¨¢giles, que tienen enfermedades asociadas, son v¨ªctimas propiciatorias". De todas formas, este especialista no cree que las cifras lleguen a los datos que manejan las autoridades francesas. "Est¨¢ claro que los espa?oles est¨¢n m¨¢s acostumbrados y saben protegerse mejor de las altas temperaturas", apunta.

"Desencadenante"

De manera similar opina el coordinador m¨¦dico de Estad¨ªsticas sanitarias del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), Jes¨²s Carrillo. "No tiene nada que ver con Francia; est¨¢n menos preparados para el calor". Carrillo ve "claro" que va a aumentar la mortalidad respecto a otros veranos, pero no dispondr¨¢ de datos hasta dentro de muchos meses.

El vicepresidente de la Sociedad Espa?ola de Medicina Familiar y Comunitaria, Asensio L¨®pez Ocha¨ªta, tambi¨¦n se muestra prudente: "Nuestra impresi¨®n es que s¨ª, que el calor es un desencadenante de la mortalidad por otras causas", afirma. "De todas formas hay que esperar los datos de un estudio epidemiol¨®gico a medio plazo para saber si existe esa relaci¨®n y si se puede hacer algo".

"Si se confirmara el incremento global de muertes este verano, ¨¦ste podr¨ªa deberse en parte a la ola de calor", apunta Margarita Garc¨ªa Ferruelo, jefa del ?rea de Estad¨ªsticas Sanitarias del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE). Este organismo, que recibe la informaci¨®n sobre los de fallecimientos con varios meses de retraso, carece a¨²n de los datos de este verano.

"En t¨¦rminos generales, la influencia del calor sobre la mortalidad est¨¢ clara, pero a¨²n no podemos decir nada de este a?o", a?ade Garc¨ªa Ferruelo. Detalla que en 1995 (cuando se registr¨® la mayor ola de calor del siglo XX seg¨²n el Instituto Nacional de Meteorolog¨ªa), las muertes debidas a la "exposici¨®n al calor natural excesivo" (criterio de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud) alcanzaron las 93 (51 hombres y 43 mujeres).

Sin embargo, en los dem¨¢s a?os de esa d¨¦cada, con temperaturas m¨¢s livianas, los fallecidos por ese motivo oscilaron entre los 5 de 1993 y los 30 de 1992. Esta estad¨ªstica incluye ¨²nicamente las muertes que los m¨¦dicos atribuyen en el certificado de defunci¨®n al calor y excluye a los enfermos fallecidos a causa de una dolencia previa que las altas temperaturas habr¨ªan podido acentuar.

La experta del INE destaca que, a tenor de las cifras de 1995, las personas mayores son las m¨¢s afectadas: 63 de los 93 fallecidos a consecuencia de las altas temperaturas ten¨ªan m¨¢s de 69 a?os.

El presidente de la Federaci¨®n de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad P¨²blica, Marciano S¨¢nchez Bayle, no duda sin embargo del efecto del calor. "Es evidente que ha habido un aumento importante de muertes", afirma. "Y es muy preocupante que el asunto lo hayan destapado los medios de comunicaci¨®n, y no la Direcci¨®n General de Sanidad P¨²blica o las comunidades aut¨®nomas. Las muertes han sido muy importantes entre las personas mayores", a?ade.

La vulnerabilidad es mayor entre las personas que viven solas, seg¨²n han destacado diversos estudios. En Espa?a hay 6,9 millones de personas con 65 o m¨¢s a?os. De ellas, 1,3 millones viven solas, seg¨²n el censo de 2001. La proporci¨®n de mayores que residen en su hogar sin compa?¨ªa aumenta con la edad. As¨ª, entre los nonagenarios uno de cada cuatro (60.000) vive solo. En la misma situaci¨®n est¨¢n 140.000 personas de 85 a 89 a?os y 250.000 de entre 80 y 84. Con todo, estos porcentajes son notablemente inferiores a los registrados en otros pa¨ªses europeos. En Francia, por ejemplo, el 40% de las mujeres de 65 o m¨¢s a?os viven solas.

Pero a¨²n en compa?¨ªa los anciano mueren solos. Ayer mismo en Madrid fueron hallados tres cad¨¢veres de ancianos fallecidos en sus domicilios. Dos de ellos correspond¨ªan a un matrimonio.