"En el mar no caben todos"
Pregunta. El Gobierno del PP en Galicia consigui¨® salvar los muelles del incendio del Prestige. No es f¨¢cil entender por qu¨¦ usted se empe?a en provocar otro incendio abriendo un frente de guerra contra los pescadores de bajura.
Respuesta. Mire, creo que un miembro de un Gobierno como la Xunta de Galicia tiene que hacer una pol¨ªtica responsable de gesti¨®n de los recursos del mar. El sector de bajura es el m¨¢s d¨¦bil de la econom¨ªa pesquera, y en 2006 las ayudas de la Uni¨®n Europea van a sufrir un severo recorte, con lo que la bajura se va a ver obligada a depender m¨¢s de s¨ª misma. Adem¨¢s, el mundo cada vez est¨¢ m¨¢s abierto al comercio y no va a haber m¨¢s protecci¨®n para los recursos de pescado fresco. As¨ª que tenemos que procurar que la bajura se modernice y...
El 'Prestige' fue un terrible par¨¦ntesis, pero no va a condicionar la pol¨ªtica pesquera
No puedo garantizar cu¨¢ntos de los 25.000 trabajadores tendr¨¢n que irse
Un gobernante tiene que decidir, pero si al partido no le interesa mi pol¨ªtica, me marcho
P. Modernizar... ?qu¨¦ ambigua y peligrosa palabra!
R. No en el sentido de reconversi¨®n, sino en el sentido de que la bajura ha de tener unidades modernas, seguras y capaces de generar los recursos suficientes para afrontar lo que sea. Y tengo que admitir que es precisamente la explotaci¨®n de los recursos lo que est¨¢ generando m¨¢s problemas. Pero est¨¢ claro que la sobrepesca, que es una realidad en la bajura de Galicia, s¨®lo tiene una receta: la reducci¨®n de la intensidad pesquera. No s¨¦ si eso est¨¢ generando malos entendidos o si alguien los est¨¢ provocando.
P. ?Qui¨¦n puede tener inter¨¦s en provocar los malos entendidos?
R. Yo no entro en eso.
P. ?Pero no vale eso de tirar la piedra y esconder la mano!
R. Si usted quiere que sea preciso, le dir¨¦ que puede que haya alg¨²n inter¨¦s pol¨ªtico por parte de los grupos de la oposici¨®n, teniendo en cuenta la actitud que est¨¢n manteniendo de obstaculizar nuestro proyecto.
P. Pero es que, adem¨¢s de la oposici¨®n, usted ha conseguido, con su proyecto para la bajura, irritar a los suyos, a los patrones de las cofrad¨ªas m¨¢s pr¨®ximas al PP. ?C¨®mo se explica usted esto?
R. ?No s¨¦! ?Los que lo tendr¨ªan que explicar ser¨ªan ellos! Nosotros gobernamos para todos los gallegos y hacemos la pol¨ªtica que tenemos que hacer. Y si hay alguno que se dice del Partido Popular al que no le gusta, pues este conselleiro s¨®lo puede decir que cada uno es libre de militar donde le parezca. No son ellos los que van a marcar esa pol¨ªtica, sino el Gobierno.
P. Lo malo es que los que no lo entienden son todos los patrones de bajura, a los que usted ha calificado de mis¨®ginos, bellacos, depredadores... No s¨¦ si ¨¦se es un buen m¨¦todo de di¨¢logo.
R. Lo que he hecho es constatar una realidad, porque es bien cierto que en algunas cofrad¨ªas ha habido casos claros de misoginia, de resistencia a que la mujer participe en puestos de importancia en el trabajo del mar. S¨®lo en algunos casos he calificado ciertas actitudes, y lo hice porque ellos han afirmado que yo tengo un plan para reducir el esfuerzo pesquero un 40%. Y no es cierto.
P. D¨ªgame si no es verdad que la Xunta se ha negado a recibir a los patrones de las cofrad¨ªas de las R¨ªas Baixas.
R.Yo nunca me he negado a recibir a la gente. Cuando solicitaron la entrevista al presidente Fraga, yo me ofrec¨ª a recibirlos en su nombre. Porque todo el Gobierno de la Xunta es solidario y porque cuando las cofrad¨ªas quieren ser escuchadas quien las recibe es el conselleiro de Pesca. Por lo dem¨¢s, soy una persona abierta al di¨¢logo, y los problemas respecto al plan de bajura los tengo con algunas cofrad¨ªas, pero con otras no.
P. Me gustar¨ªa que me dijera con cu¨¢les s¨ª y con cu¨¢les no. Pero, sobre todo, por qu¨¦.
R. Prefiero no personalizar, porque no es inteligente.
P. ?Pero, hombre! ?No me haga usted el gallego!
R. No le hago el gallego. Simplemente es que un cargo tiene que ser prudente en sus expresiones.
P. No s¨¦ si tendr¨¢n o no entidad los argumentos de los patronos de las R¨ªas Baixas. Pero el miedo a que sus planes escondan una reconversi¨®n del sector se ha extendido como la p¨®lvora.
R. ?Es que eso es falso! ?M¨¢s claro no puedo ser! Es evidente que tenemos un exceso de esfuerzo pesquero, que todos los estudios nos dicen que la pesca est¨¢ rindiendo menos ahora de lo que rend¨ªa hace a?os. Y cuando existe una situaci¨®n de este tipo hay que reducir el esfuerzo pesquero. Pero en mi comparecencia en el Parlamento ya dije que no escond¨ªa ninguna reconversi¨®n y que no hab¨ªa ning¨²n plan de desguazar la flota de bajura de manera salvaje. Nosotros somos m¨¢s partidarios de las medidas indirectas: reducci¨®n o apertura de las mallas, reducci¨®n del tiempo de pesca... Hay much¨ªsimas f¨®rmulas antes de llegar al desguace; aunque, si hay gente que voluntariamente quiere abandonar la pesca, eso beneficiar¨ªa a los que queden. Lo que es falso es que exista una pol¨ªtica para reducir el 40% de la flota. ?As¨ª no me extra?a que la gente ande asustada!
P. Pero el que va diciendoque los mari?eiros que queden vivir¨¢n mejor es usted.
R. ?Claro! ?No creo que de eso nadie tenga dudas!
P. La duda est¨¢ en c¨®mo van a vivir los que tengan que irse.
R. El desguace es algo voluntario. Mire, est¨¢n desguazando los m¨¢s pr¨®ximos a la jubilaci¨®n y a los que les sale m¨¢s rentable irse que quedarse. Y los que se queden tendr¨¢n m¨¢s recursos para repartir. Y luego est¨¢ el Plan Galicia.
P. Lo del Plan Galicia, como se dice en esta tierra, "?tarde piache!".
R. Pues el Plan Galicia va a concentrar sus acciones para la pesca de aqu¨ª a 2006, porque es la ventana de oportunidad que nos queda. A lo mejor se pierde trabajo en el mar, pero es que son necesarios menos brazos. Sin embargo, se trae m¨¢s a tierra. Lo que no puede pasar en la pesca de bajura es seguir vendiendo fuera de los circuitos comerciales sin etiquetar, sin asegurar la trazabilidad. Por otra parte, faltan brazos en el mar.
P. Hace un momento me aseguraba que sobraban brazos. Ahora me dice que faltan...
R. Vamos a ver, en general sobran brazos. Deber¨ªa haber menos, o faenar menos tiempo o de manera distinta. Otra cosa es el empleo. En estos momentos no hay marineros gallegos que quieran ir al mar. A la vista est¨¢ que vienen muchos inmigrantes.
P. La cuesti¨®n est¨¢ en saber si est¨¢ usted en condiciones de ofrecer a los marineros de bajura de Galicia unas garant¨ªas que desmonten las serias reservas de las cofrad¨ªas sobre su futuro.
R.Yo lo ¨²nico que le puedo asegurar es que lo que hay que hacer con la pesca de bajura se har¨¢ a trav¨¦s de los planes de Puerto. Y que hay agentes trabajando con las cofrad¨ªas que nos tienen que decir sus necesidades y sus planes de futuro. Yo admito que hay mayores resistencias en algunas cofrad¨ªas de las R¨ªas Baixas, pero tambi¨¦n se est¨¢ trabajando con ellos.
P. Trabajar no significa convencer. Usted utiliza el eufemismo. Ser¨ªa mucho m¨¢s serio, y m¨¢s ¨²til, que aclarara qu¨¦ quiere decireso de reducir el esfuerzo pesquero.
R. Es muy f¨¢cil. La reducci¨®n del esfuerzo pesquero no es m¨¢s que la reducci¨®n de la presi¨®n sobre los recursos. Y hay muchas maneras de hacerlo. Entre ellas est¨¢ la reducci¨®n del tiempo de pesca, porque as¨ª no har¨ªa falta reducir el n¨²mero de buques. Y se puede reducir el tiempo de faena en el mar, que ser¨¢ muy positivo, como fue la implantaci¨®n del descanso semanal que se estableci¨® durante mi anterior mandato y la ampliaci¨®n de las mallas. Al final est¨¢ el desguace, pero no tengo la m¨¢s m¨ªnima intenci¨®n de imponer ning¨²n tipo de desguace obligatorio. No pretendo regular la pesca a trav¨¦s de la ruina econ¨®mica de la gente.
P. Esas medidas no har¨¢n rentable la pesca de muchos. Deben de ser ¨¦sas que usted anuncia las que "indirectamente" van a inducir a un mari?eiro a desguazar su barco.
R. Es que esto ya est¨¢ pasando ahora. Queremos ir viendo c¨®mo se desarrollan las cosas en 10 a?os, y el proceso habr¨¢ culminado cuando no haya nadie que quiera desguazar su embarcaci¨®n. Pero la gente tiene que saber que, tal y como est¨¢n las cosas ahora, en el mar no caben todos.
P. ?Cu¨¢ntos caben entonces?
R. Caber, caber... Caben todos, pero no un n¨²mero ilimitado de embarcaciones y de actividad. Cabr¨ªan los pescadores que hay ahora si estuvieran dispuestos a reducir la presi¨®n. Eso est¨¢ claro.
P. Claro estar¨ªa si usted dijera cu¨¢ntos, de los 25.000 puestos de bajura, garantiza con su plan.
R. Yo no quiero prejuzgar el n¨²mero ideal. Eso saldr¨¢ de las medidas que se vayan adoptando.
P. Lo que no quiere es llegar a ning¨²n compromiso, ?no?
R. Le repito que no es ¨¦se mi objetivo. Si pudiese mantener a los 25.000, yo, encantado. Pero no creo que sea posible.
P. D¨ªgame, al menos, cu¨¢ntos pescadores de bajura se tendr¨¢n que ir con su plan.
R. No. A los afectados yo les aseguro que no existe un plan para echar a la gente del mar. Lo que s¨¦ es que los recursos no est¨¢n bien.
P. En algunas cofrad¨ªas de pescadores le ven a usted como el valedor de los intereses de las grandes multinacionales del mar, que quieren convertir a los mari?eiros en sus empleados.
R. ?Eso es tan irreal que se descalifica por s¨ª mismo! Naturalmente que tengo que atender a las multinacionalesy la pesca exterior, que genera much¨ªsimos puestos de trabajo en Galicia. Mi objetivo es hacer rentable la pesca de bajura, porque hoy, lamentablemente, no lo es. Cada vez hay m¨¢s pescadores que est¨¢n encontrando en esas multinacionales del mar una profesi¨®n y un puesto de trabajo seguro.
P. Usted va a tener que enfrentarse con las cofrad¨ªas de pescadores de bajura de las R¨ªas Baixas, que no son tan d¨®ciles como en la Costa da Morte. Me pregunto sihabr¨¢ calculado usted el riesgo.
R. Yo soy partidario del di¨¢logo, pero un gobernante tiene que decidir. Si eso implica un precio duro de pagar, yo estoy dispuesto a pagarlo. De momento cuento con el apoyo del partido y del presidente Fraga. Pero en el momento en el que el partido entienda que mi pol¨ªtica no le interesa, yo voy junto al presidente y me marcho en 30 segundos.
P. Los pescadores de las R¨ªas Baixas les sacaron a ustedes las casta?as del fuego enfrent¨¢ndose al chapapote incluso con las manos. No parece que la mano dura sea la respuesta a su esfuerzo.
R. Yo no le quito m¨¦rito a nadie. El Prestige fue un terrible par¨¦ntesis en la legislatura, pero no puede condicionar nuestra pol¨ªtica. Y no la va a condicionar.
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