Mezquita de Granada
El pasado mes de julio se inaugur¨® en el barrio del Albayc¨ªn la mezquita mayor de Granada. Hace unos apareci¨®, en la vecina iglesia de San Nicol¨¢s, la siguiente pintada: "M¨¢s de 19 siglos de cristianismo en Granada. No mezquita en un barrio cristiano". Como la pintada no tiene desperdicio, pues refleja claramente el fundamentalismo cat¨®lico, me parece interesante hacer algunos comentarios sobre la misma.
Si hablamos de la historia de los 19 siglos de cristianismo en Granada hay que contarla completa, pues los primeros evangelizadores, como san Cecilio, san Tesif¨®n, san Indalecio, disc¨ªpulos de Santiago, eran ¨¢rabes, convertidos gracias a un milagro al cristianismo, y sus nombres originales eran Ibn Athar, Ibn Al-Radi, Ibn Almogueira. Algunos fueron martirizados en tiempos de Ner¨®n en Valpara¨ªso, que debido a estos hechos pasar¨ªa a llamarse Sacromonte.
A la pregunta ?qu¨¦ es el Albayc¨ªn?, la inmensa mayor¨ªa de las personas contestar¨ªan que es un barrio de Granada; para los autores de la pintada es un barrio cristiano. As¨ª que para ellos deben existir barrios cat¨®licos, musulmanes o protestantes. Afortunadamente, esta forma de ver el mundo hace tiempo que en Europa dej¨® de tener sentido.
Lo que no dejan de ser signos de normalizaci¨®n democr¨¢tica, como en este caso la libertad de conciencia y de religi¨®n, es visto por una minor¨ªa como la p¨¦rdida de las "esencias" patrias, y se hace necesaria una nueva llamada a la "cruzada". Casualmente, ese mismo d¨ªa y en la misma p¨¢gina de EL PA?S Andaluc¨ªa, se informaba de la conferencia del profesor Mart¨ªnez Mont¨¢lvez en la sede de la UNIA en Baeza, en la que dec¨ªa que "no se puede entender ni explicar Espa?a" sin tener en cuenta la cultura andalus¨ª. Para despu¨¦s afirmar que el problema es que se nos quiere hacer pensar que Al-Andalus es algo ajeno a nosotros, cuando no lo es.
?Por qu¨¦ molesta que el imaginario de Granada sea principalmente de base andalus¨ª? ?Por qu¨¦ molesta que la mezquita de Granada se haya convertido en la segunda m¨¢s visitada en Andaluc¨ªa, despu¨¦s de la de C¨®rdoba? Y es que para algunos fundamentalistas, los mismos que ya denunciara Borrow en su obra La Biblia en Espa?a, la pol¨ªtica de Cisneros deber¨ªa ser la pauta a seguir.
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