La ONU tiene que esperar para actuar en Irak

No hubo acuerdos concretos. Los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas dieron ayer la impresi¨®n de que este organismo vuelve a hacerse cargo del problema de Irak y coincidieron en que se debe "devolver la soberan¨ªa" a los iraqu¨ªes tan pronto como sea posible. Pero el calendario y las condiciones fueron discutidos "descarnadamente", seg¨²n una fuente diplom¨¢tica, lo cual implica la necesidad de seguir negociando. Tambi¨¦n apoyaron la Hoja de Ruta, el plan de paz para Oriente Pr¨®ximo, pero tampoco se pronunciaron sobre la amenaza israel¨ª de expulsar a Yasir Arafat.

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, reuni¨® en Ginebra a los jefes de las diplomacias estadounidense, rusa, francesa, brit¨¢nica y china, en un intento de asegurarse de que no habr¨¢ nuevos vetos por parte de los pa¨ªses con derecho a ello. Tras cuatro horas de reuniones, pudo anunciar que el consenso es "realizable". Ninguno de sus acompa?antes le desminti¨® e incluso el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, se declar¨® "animado", pero reconoci¨® que sigue habiendo "dificultades" sobre el plan de refuerzos militares propuesto por su pa¨ªs.

Persisten las diferencias entre los campos que se dibujaron antes de la guerra

Kofi Annan cree "realizable" el consenso sobre una nueva resoluci¨®n

El mayor adversario sigue siendo Francia, que pide un precio pol¨ªtico para avalar una fuerza multinacional bajo mando norteamericano: que "los invasores" se retiren de la gesti¨®n pol¨ªtica y econ¨®mica de Irak, limit¨¢ndose a arreglar el "caos" de seguridad actual. Colin Powell dio el paso de mostrarse p¨²blicamente partidario de transferir la soberan¨ªa de Irak a los iraqu¨ªes, pero "de manera responsable", un modo claro de rechazar el Gobierno de Irak en manos exclusivamente iraqu¨ªes sugerido la v¨ªspera por su colega franc¨¦s, Dominique de Villepin.

La soberan¨ªa iraqu¨ª es el punto de partida para los galos; mientras que constituye el punto de llegada para los estadounidenses, mucho m¨¢s preocupados por comprometer a m¨¢s pa¨ªses en la seguridad de un pa¨ªs tan inseguro como lo es Irak. Por eso, Kofi Annan rebaj¨® las expectativas creadas por la reuni¨®n de Ginebra afirmando que hab¨ªa sido "informal". Para la galer¨ªa, logr¨® que comparecieran a su lado Colin Powell y Dominique de Villepin, as¨ª como el ruso ?gor Ivanov, el chino Li Zhaoxing y el brit¨¢nico Jack Straw, dando as¨ª la impresi¨®n de que el problema iraqu¨ª vuelve a las manos del cuarteado directorio de la ONU, pero no pudo anunciar un compromiso claro y concreto.

En esas condiciones, todos se limitaron en p¨²blico a resaltar la botella medio llena: Powell destac¨® los "puntos de convergencia"; De Villepin concedi¨® que el traspaso de poder a los iraqu¨ªes debe ser "gradual", pero "es preciso satisfacer el principio de soberan¨ªa", insisti¨®. Y Jack Straw eligi¨® mostrarse tan vago como conciliador: "Cualesquiera que hayan sido los desacuerdos sobre la intervenci¨®n militar, la comunidad internacional reconoce su responsabilidad hacia los iraqu¨ªes y las Naciones Unidas. Lo que discutimos es c¨®mo pasamos de la situaci¨®n actual a lo que todos deseamos: un Gobierno iraqu¨ª libre y capaz de ejercer plenamente la soberan¨ªa del pueblo iraqu¨ª".

Varias reuniones bilaterales precedieron a la sesi¨®n general. Entre los presentes en Ginebra se encontraban ayer Adnan Pachachi y Hoshyar Zebari, representantes del Consejo de Gobierno iraqu¨ª instalado en Bagdad por la coalici¨®n dirigida por Estados Unidos. Colin Powell y Dominique de Villepin tambi¨¦n se encontraron brevemente: los rumores de que tuvieron el tiempo justo de levantarse la voz fueron desmentidos por sus portavoces.

Al final, las divergencias persisten entre los campos que se dibujaron antes de la guerra en Irak, a favor y en contra de la intervenci¨®n militar. Es una conclusi¨®n evidente, como la falta de lazos y de calendario. Colin Powell lleg¨® a Ginebra descalificando las ¨²ltimas propuestas francesas y se fue sin avances sustanciales respecto al plan de refuerzos militares propuesto por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush. Un mensaje al mundo que, forzoso es constatarlo, no ha suscitado en ninguna parte entusiasmo alguno, cuando ya ha transcurrido una semana desde que lo hizo p¨²blico. Despu¨¦s de Ginebra, Colin Powell visitar¨¢ Kuwait y Bagdad, en lo que ser¨¢ su primer viaje a la capital iraqu¨ª tras la guerra.

La impresi¨®n de vaguedad y confusi¨®n en el mensaje transmitido por los asistentes a la reuni¨®n se vio reforzada por las deplorables condiciones t¨¦cnicas en que ¨¦sta se desarroll¨®. La conferencia de prensa de Kofi Annan y de los cinco ministros fue retrasada tres cuartos de hora a causa de aver¨ªas sucesivas en el sistema ac¨²stico. La ONU, en su versi¨®n de Ginebra, proporcion¨® ayer una confirmaci¨®n suplementaria de aquella gran verdad: "El diablo est¨¢ en los detalles".

Hac¨ªa demasiado tiempo que no hab¨ªa una reuni¨®n de este porte -la ¨²ltima fue en junio de 1998, cuando los cinco miembros permanentes lanzaron desde Ginebra su llamamiento a India y Pakist¨¢n para renunciar a nuevas pruebas nucleares- y ayer qued¨® en evidencia lo vetustas que se han quedado las instalaciones de esta versi¨®n europea de las Naciones Unidas.