Argentina abre la v¨ªa para subir las tarifas de los servicios p¨²blicos el a?o pr¨®ximo
El Gobierno negociar¨¢ con las empresas un aumento de las cuotas tras dos a?os de congelaci¨®n
El Gobierno argentino ha enviado esta semana al Congreso de la naci¨®n el proyecto de Presupuestos para 2004, que prev¨¦ una inflaci¨®n en torno al 10,5%, unos ocho puntos sobre el 2,5% actual. La subida pronosticada es una se?al clara de que el Ejecutivo contempla un incremento de las tarifas de los servicios p¨²blicos, aunque de momento se niega a hablar de ello. El precio del agua, gas, luz o tel¨¦fono es un tema tab¨², y m¨¢s en periodo electoral como el que vive Argentina. Fuentes del Gobierno, de las empresas y consultoras independientes dan por hecho un aumento de las tarifas, congeladas hace dos a?os.
El quid de la cuesti¨®n es c¨®mo difundir una decisi¨®n pr¨¢cticamente ineludible sin alarmar a la poblaci¨®n, v¨ªctima de una profunda crisis econ¨®mica y social. El Gobierno se dispone a negociar los 63 contratos de las empresas que gestionan los servicios p¨²blicos privatizados. Ser¨¢ el paso previo antes de hablar de las tarifas. La estrategia gubernamental, seg¨²n un consultor independiente del sector energ¨¦tico, tendr¨¢ dos ejes: exigir inversiones a las empresas y mantener una gran dureza a la hora de aceptar un ajuste de tarifas. "El Gobierno sabe que las empresas pueden amenazar, pero no se pueden ir f¨¢cilmente del pa¨ªs sin perder cuantiosas sumas", se?ala.
Aparentemente, las posturas est¨¢n muy alejadas. En un extremo, la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, que asesora al Ministerio de Planificaci¨®n, plantea una subida de tarifas cero. En el otro, las empresas defienden un aumento del 110%. A medio camino, analistas independientes calculan una subida "razonable" del 100% en pesos, en un horizonte de tres a?os, ajustado por los ¨ªndices de inflaci¨®n. Esta propuesta, que, seg¨²n las fuentes consultadas, ha llegado hasta la mesa del ministro Lavagna, recomienda una tarifa diferencial que afectar¨ªa a los industriales y a los usuarios de clase alta y media-alta, lo que amortiguar¨ªa el impacto en la mayor¨ªa de consumidores. Hay que precisar que muchas industrias ya trasladaron al consumidor el aumento de sus costes. Jos¨¦ Mar¨ªa Hidalgo, m¨¢ximo ejecutivo de Endesa en Argentina, recuerda que "unas 5.000 grandes empresas consumen el 40% de la energ¨ªa el¨¦ctrica".
El Gobierno tendr¨¢ dentro de poco la herramienta para aumentar las tarifas. El proyecto de ley para prorrogar hasta diciembre de 2004 la Ley de Emergencia Econ¨®mica -habilita al Gobierno para renegociar los contratos de las empresas privatizadas y aumentar las tarifas de los servicios p¨²blicos- est¨¢ pendiente de aprobaci¨®n en el Congreso. El principal argumento del Ejecutivo es que las privatizaciones fueron un excelente negocio para las empresas la d¨¦cada pasada. Ahora se les pide un esfuerzo de tres o cuatro a?os. Desde su llegada a la Casa Rosada, el 25 de mayo, el presidente Kirchner ha instaurado un estilo diferente al de sus predecesores. Apenas ha recibido a los representantes de las empresas de servicios p¨²blicos y no ha despejado la incertidumbre sobre la principal demanda de las compa?¨ªas: el aumento de tarifas. Hace pocas semanas, el presidente cit¨® a un grupo de empresas el¨¦ctricas. Los presentes en la reuni¨®n, entre los que no hab¨ªa ning¨²n extranjero, proclamaron su argentinidad y la de sus empresas, que en su mayor¨ªa eran de capital exterior. "Ustedes son extranjeros porque representan intereses extranjeros y porque me est¨¢n presionando a trav¨¦s del FMI para conseguir un aumento de tarifas", interrumpi¨® el presidente.
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