?Tomates o pateras?

?C¨®mo se puede ayudar a los pa¨ªses subdesarrollados a elevar su nivel de vida? Para muchos, dej¨¢ndoles exportar sus productos, la mayor¨ªa agr¨ªcolas, a los pa¨ªses ricos. Eso paliar¨ªa en parte la emigraci¨®n descontrolada hac¨ªa el norte desarrollado. Pero los agricultores de estos pa¨ªses m¨¢s ricos se ver¨ªan afectados.

Estos d¨ªas, en Almer¨ªa el tema est¨¢ de m¨¢xima actualidad, tras el anuncio el pasado lunes por parte de la Uni¨®n Europea (UE) de un acuerdo con Marruecos para que ¨¦ste pa¨ªs exporte 220.000 toneladas de tomate en cuatro a?os, a cambio de trigo europeo.

En la actualidad, el 8% de la producci¨®n de tomate que circula por Europa es de Almer¨ªa. Este porcentaje sube hasta el 33% cuando se se contempla solo el mercado nacional. La provincia andaluza produjo el pasado a?o 767.000 toneladas. De noviembre a abril, Almer¨ªa produce el 80% de sus tomates a trav¨¦s de un sistema familiar de producci¨®n no subvencionada.

Ninguno de estos factores ha impedido el acuerdo para la renovaci¨®n del protocolo agr¨ªcola entre la UE y Marruecos por el que el pa¨ªs norteafricano exportar¨¢ en la pr¨®xima campa?a 175.000 toneladas de tomate (15.000 m¨¢s que ahora) y que se incrementar¨¢ en 30.000 toneladas el segundo ejercicio, 45.000 el tercero y 220.000 durante la campa?a 2006-2007.

El comisario europeo de Agricultura, Franz Fischler, explic¨® que, a cambio, Marruecos aceptar¨¢ que los exportadores comunitarios vendan m¨¢s de un mill¨®n de toneladas anuales de cereal a un arancel reducido, del 38%. El sector agr¨ªcola almeriense ha rechazado de plano el acuerdo: "Se nos enga?a claramente cuando se nos dice que con estos acuerdos se intenta aumentar el nivel social de aquel pa¨ªs. Son grandes multinacionales francesas las que invierten en Marruecos con familiares del Rey Mohamed VI y que explotan a la sociedad. Seguir¨¢n viniendo pateras", expone el presidente de Asaja en Almer¨ªa, Francisco Vargas.

El presidente de APAL, la organizaci¨®n de productores de la provincia, Antonio Bilbao, se pregunta: "?Pueden los responsables pol¨ªticos romper el tejido empresarial de la UE, de sus ciudadanos que cultivan sin subvenciones? Ni siquiera han hecho un estudio de lo que conllevar¨¢ estas medidas que han pactado", apunta.

El PP se ha quedado solo defendiendo la medida. El viernes pasado, el portavoz popular, Rafael Hernando, minimizaba los efectos del pacto: "Hablamos de un acuerdo con un incremento de 15.000 toneladas, que supone una subida del 5% de lo que exporta Marruecos. Quien diga que eso provoca la ruina del campo almeriense o es un fabulador o un alarmista".

La Junta de Andaluc¨ªa, en cambio, "comparte la preocupaci¨®n y la inquietud" del sector ante una negociaci¨®n tomada "a espaldas de Espa?a y con total ignorancia del Gobierno de nuestro pa¨ªs", seg¨²n el consejero Paulino Plata. "Hay argumentos que Espa?a no ha defendido bien. ?C¨®mo la UE no limita las producciones de tomate que emiten CO2 en pa¨ªses como Francia, Holanda y B¨¦lgica cuando aqu¨ª en Almer¨ªa tiene menos efectos contaminantes? Otro matiz: ?Por qu¨¦ Europa no hace un plan de adaptaci¨®n al sector de frutas y hortalizas en el sur de Espa?a si a partir de 2006 esto se va a intensificar?", esgrimi¨® el consejero de Agricultura, quien pidi¨® que Marruecos exporte la hortaliza en los meses que no se produce en Almer¨ªa.