"?Por qu¨¦ tengo que retirarme?"

El sexto t¨ªtulo mundial no ser¨¢ suficiente para que Michael Schumacher se plantee la retirada. El abrazo que cerr¨® la carrera de Jap¨®n entre el brasile?o Rubens Barrichello, el ganador de la prueba; el franc¨¦s Jean Todt, el director del equipo Ferrari, y el piloto alem¨¢n, que acababa de convertirse en el m¨¢s laureado de la historia, fue como el anuncio de que all¨ª no acababa nada.

No era un final. Aunque muchos pilotos y un buen n¨²mero de aficionados se plantean por qu¨¦ no abandona con la corona de laureles colgada del cuello, Schumacher tiene otros planes. "?Por qu¨¦ debo retirarme?", se pregunt¨® ayer despu¨¦s de concluir en la octava posici¨®n en Suzuka y sumar el ¨²ltimo punto de esta temporada. A pesar de sus 34 a?os, de tener una familia por la que siente aut¨¦ntica devoci¨®n y de haber alcanzado las cotas m¨¢s elevadas del automovilismo, sigue apasion¨¢ndose por este deporte.

"Fangio est¨¢ a un nivel m¨¢s alto que yo. No puede compar¨¢rsele con la competici¨®n actual"

"Seguir¨¦ compitiendo mientras sienta placer en hacerlo", agreg¨® el germano; "muchas veces tengo la sensaci¨®n de que cuanto m¨¢s corro m¨¢s me gusta este deporte". "Esta temporada", prosigui¨® Schumacher, "he estado siempre pensando en el sexto t¨ªtulo. Eso me ha motivado a pesar de que ha sido realmente dif¨ªcil conseguirlo".

Para ¨¦l, sin embargo, no ser¨¢ dif¨ªcil encontrar nuevos retos. El primero puede ser conseguir la s¨¦ptima corona mundial. "Cuando en 1996 entr¨¦ a formar parte del equipo Ferrari, mi primer objetivo fue ganar un t¨ªtulo mundial con la escuder¨ªa italiana", indic¨®; "a partir de aquel momento, el competir se convirti¨® en un placer. Y creo que as¨ª seguir¨¢n las cosas durante los pr¨®ximos a?os".

Schumacher tiene contrato con Ferrari hasta 1996. Y todo el equipo suspira para que no lo rompa. Quieren que lo cumpla porque ¨¦l fue quien construy¨® este equipo de ingenieros y mec¨¢nicos y el que aglutina todas las voluntades. "Esta victoria habla por si misma", se limit¨® a decir Luca di Montezemolo, el presidente de Ferrari, que se uni¨® al grupo de tifosi que sigui¨® la carrera desde Maranello; "nueve t¨ªtulos de campeones del mundo consecutivos, cinco de constructores y cuatro de pilotos es un ¨¦xito que nadie hab¨ªa conseguido nunca. Es la obra de hombres excepcionales. Schumacher es el m¨¢s grande piloto de la F-1. Ha ganado m¨¢s t¨ªtulos que nadie y lo ha hecho en una ¨¦poca en la que los m¨¢rgenes son particularmente reducidos y se cifran en pocos cent¨ªmetros".

Schumacher le rebati¨® y se neg¨® a aceptar comparaciones con el argentino Juan Manuel Fangio, El Chueco, cinco veces campe¨®n mundial en los a?os cincuenta. "No soy consciente de ser una leyenda viva", asegur¨® a¨²n emocionado el alem¨¢n; "no lo soy, seguro que no. Y no intento compararme con Fangio: no puede compar¨¢rsele con el mundo actual de la competici¨®n. Fangio est¨¢ a un nivel m¨¢s alto que yo. Lo que hizo permanece como un hecho aislado y lo que nosotros hemos conseguido hoy es algo tambi¨¦n ¨²nico. Siento un gran respeto por lo que logr¨® Fangio".

Los elogios le llovieron de todas partes. En Kerpen, su ciudad natal, el alcalde, Ralf Valkysers, se?al¨®: "Hoy es un d¨ªa de fiesta. Michael nos da mucho". Desde Berl¨ªn, el canciller Gerhard Schr?der y el presidente federal, Johannes Rau, le enviaron telegramas de felicitaci¨®n. Schumacher, sin embargo, pensaba en su equipo. "La clave ha estado en la motivaci¨®n y en la categor¨ªa de las personas que trabajan para Ferrari", concluy¨®.