Una microc¨¢mara llega al escondrijo que no pudieron hallar los perros

Todo fue sobre ruedas a media ma?ana del s¨¢bado, cuando el South Sea, un buque congelador de 50 metros de eslora, viejo y visiblemente deteriorado, navegaba a unas 80 millas de Lisboa. Senegal, el pa¨ªs donde est¨¢ abanderado el pesquero, no hab¨ªa puesto impedimentos, de manera que tres aviones y otras tantas embarcaciones del Servicio de Vigilancia Aduanera, apoyados por un buque de la Armada, interceptaron en alta mar el pesquero. Una dotaci¨®n de los GEO irrumpi¨® a bordo, detuvo a la tripulaci¨®n y se hizo con el barco. De la droga que presumiblemente transportaba no apareci¨® ni rastro, pero hab¨ªa confianza en encontrarla en puerto.

El South Sea atrac¨® en Vilagarc¨ªa el domingo por la ma?ana. La b¨²squeda se encomend¨® a los especialistas policiales y sus perros adiestrados. Fueron pasando las horas, el trabajo segu¨ªa sin dar frutos y la incertidumbre se apoder¨® de los responsables de la operaci¨®n.

Algunos tem¨ªan que los tripulantes se hubiesen librado de la droga en alta mar antes de ser abordados. Y empez¨® a tomar cuerpo la posibilidad de una situaci¨®n tan embarazosa como la que se vivi¨® hace tres a?os con el Privilege, capturado por orden del juez Baltasar Garz¨®n y presentado como el medio de transporte para introducir en Espa?a un "espectacular" alijo de coca¨ªna. Una vez en puerto, fue revisado de arriba abajo durante d¨ªas y no se pudo encontrar ni una papelina.

Fisura en la proa

Adem¨¢s de los perros, los agentes que registraron el South Sea dispon¨ªan de artilugios tecnol¨®gicos de rastreo. Y la t¨¦cnica lleg¨® donde no hab¨ªan podido el instinto animal y el oficio y la perseverancia de los polic¨ªas. Aprovechando una fisura en la proa, se introdujo una microc¨¢mara. Y all¨ª, bajo las cadenas, estaba el compartimento oculto.

La operaci¨®n de vaciado, que se inici¨® ayer por la ma?ana, corrobor¨® que el alijo alcanzaba la enorme magnitud que desde el principio hab¨ªa sospechado la polic¨ªa. En el muelle de Vilagarc¨ªa se desembarcaron 283 fardos, de m¨¢s de 30 kilos cada uno.

El ¨¦xito corresponde a distintos cuerpos de seguridad del Estado, lo que ofreci¨® una magn¨ªfica oportunidad al delegado nacional del Plan contra la Droga, Gonzalo Robles, para contrarrestar las numerosas cr¨ªticas a la descoordinaci¨®n policial tras el desenlace del caso Wanninkhof.

Robles compareci¨® en rueda de prensa en A Coru?a junto al delegado del Gobierno en Galicia, Arsenio Fern¨¢ndez de Mesa, y los mandos de la polic¨ªa y de la Agencia Tributaria en la comunidad aut¨®noma, y en apenas 10 minutos se pronunci¨® 17 veces la palabra "coordinaci¨®n". Por si no hubiese quedado claro, Robles sentenci¨®: "Simplemente insistir en una idea, la labor de coordinaci¨®n y la importancia de la operaci¨®n".