Los Reyes viajan a Siria para pedir a Asad que prosiga las reformas y se vincule a Europa
Estados Unidos e Israel acusan al r¨¦gimen sirio de colaborar con el terrorismo
Los reyes Juan Carlos y Sof¨ªa iniciaron anoche en Damasco una ins¨®lita visita de Estado, ya que no hay precedentes de que el pa¨ªs que los acoge, Siria, sea a la vez fronterizo con el punto internacional m¨¢s caliente, Irak, y haya sido atacado hace dos semanas por un pa¨ªs lim¨ªtrofe, Israel, bajo la acusaci¨®n de colaborar con el terrorismo. EE UU apoya esos cargos. El Gobierno sostiene que "se ha considerado conveniente mantener el viaje" para que el presidente sirio, Bachar el Asad, prosiga las reformas y su aproximaci¨®n a Europa.
Los Reyes fueron recibidos al pie del avi¨®n sobre las 19.00 (hora peninsular espa?ola) por el ministro sirio de Asuntos Exteriores, Faruk al Shara, y anoche tuvieron una cena privada en el palacio Tishrin con el presidente Asad y su esposa. El recibimiento oficial se producir¨¢ esta ma?ana.
Desde el punto de vista espa?ol, esta visita, que es la primera que los Reyes hacen a Siria, responde a un inter¨¦s mucho m¨¢s pol¨ªtico que econ¨®mico y remite a los intentos del presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, de desempe?ar un papel en el conflicto de Oriente Pr¨®ximo, del que Siria es parte esencial. El Ejecutivo espa?ol ha tratado de actuar como moderador y mediador ante los dos Estados de la regi¨®n m¨¢s cuestionados por Washington: Siria e Ir¨¢n.
Bachar el Asad, de 38 a?os, que hered¨® el poder de su padre tras haberse formado como oftalm¨®logo en Inglaterra, correspondi¨® a ese inter¨¦s hasta el punto de que en mayo de 2001 visit¨® como presidente Espa?a, antes que Francia, pa¨ªs ¨¦ste con el que Siria mantiene m¨¢s relaciones hist¨®ricas y econ¨®micas. A partir de ah¨ª, las relaciones hispano-sirias han avanzado, aunque de forma err¨¢tica, como el propio proceso de reformas iniciado por Asad.
La declaraci¨®n de amistad y cooperaci¨®n que Aznar anunci¨® para junio de hace dos a?os nunca vio la luz. El pasado abril, cuando en plena invasi¨®n de Irak arreciaban las amenazas militares de George W. Bush contra el r¨¦gimen sirio por su supuesto apoyo a fugitivos iraqu¨ªes, Aznar terci¨® p¨²blicamente para reafirmar la amistad espa?ola con Siria y descartar cualquier intenci¨®n agresiva. Por aquellos d¨ªas habl¨® por tel¨¦fono con Asad y descart¨® expresamente que la conversaci¨®n respondiera a alguna petici¨®n de mediaci¨®n norteamericana.
La tensi¨®n en torno al r¨¦gimen sirio no ha remitido en la posguerra, sino que ha aumentado con la escalada israel¨ª frente al terrorismo palestino.
El embajador de EE UU ante la ONU, John Negroponte, declar¨® a ra¨ªz de esos mismos hechos que "Siria est¨¢ del lado equivocado en la guerra contra el terrorismo". Los ¨²ltimos informes del Departamento de Estado sobre Siria, en calidad de uno de los siete pa¨ªses acusados por Washington de promover el terrorismo, constata que Asad "conden¨® p¨²blicamente los atentados del 11 de septiembre" de 2001 y que "el Gobierno sirio ha cooperado con EE UU y otros gobiernos extranjeros en las investigaciones sobre Al Qaeda".
Tambi¨¦n reconoce que "el Gobierno de Siria no ha estado implicado directamente en ning¨²n acto de terrorismo desde 1986". Los reproches de Washington se basan en que Damasco sigue hospedando a representantes de los principales grupos de la resistencia palestina, y en concreto a los dos m¨¢s ligados a lo atentados suicidas: Hamas y Yihad Isl¨¢mica. El r¨¦gimen sirio replica que las oficinas de esos grupos en su territorio son simplemente de prensa e informaci¨®n, no operativas. El Gobierno espa?ol afirma que ha pedido el cierre de esas oficinas en las reiteradas visitas que ha hecho a Siria la ministra Ana Palacio.
"Es claro que con Siria no coincidimos en todos los planteamientos de la agenda internacional, pero es claro tambi¨¦n que si con alg¨²n pa¨ªs de Oriente Pr¨®ximo dialoga Espa?a es con Siria, y ese di¨¢logo ha producido resultados como el apoyo sirio a las dos resoluciones sobre Irak aprobadas por unanimidad en el Consejo de Seguridad de la ONU", comenta una fuente diplom¨¢tica.
"Lo que Espa?a promueve es el apoyo a una mayor implicaci¨®n siria en el contexto euro-mediterr¨¢neo y el apoyo a un proceso de reformas iniciado por el presidente Asad", a?ade la misma fuente. Siria es el ¨²nico pa¨ªs del Proceso de Barcelona, a trav¨¦s del cual los Quince pretenden potenciar el di¨¢logo entre todos los pa¨ªses del Mediterr¨¢neo, que no ha firmado un acuerdo de asociaci¨®n con la Uni¨®n Europea.
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