Invertir en las personas
En los ¨²ltimos meses se han presentado propuestas en torno a c¨®mo pueden actuar la Uni¨®n Europea y sus gobiernos para estimular la econom¨ªa europea. El plan de la Comisi¨®n ser¨¢ discutido primeramente por los l¨ªderes en el Consejo Europeo esta semana. Nuestra propuesta consiste en movilizar la inversi¨®n en redes transeuropeas y en investigaci¨®n y desarrollo. En el debate sobre "trenes y cerebros" no debe perderse de vista el aspecto m¨¢s importante: esta iniciativa ha de significar invertir en las personas.
En el informe El empleo en Europa 2003 se indica que el mercado europeo de trabajo ha dado muestras de una capacidad de recuperaci¨®n mucho mayor en esta fase de desaceleraci¨®n de la econom¨ªa que en la crisis de comienzos de los noventa. En el informe se demuestra que una de las razones de esta mayor fortaleza ha sido el nivel m¨¢s alto de cualificaci¨®n de la mano de obra, que ha podido adaptarse mejor a las nuevas condiciones del mercado de trabajo. Esta situaci¨®n, no obstante, no durar¨¢ siempre: en el informe se advierte de que, si no hay un crecimiento econ¨®mico considerablemente mayor en los pr¨®ximos a?os, la tasa de paro en Europa probablemente aumentar¨¢.
Seg¨²n el informe, la proporci¨®n de mano de obra considerada poco cualificada se redujo del 46% al 39% entre 1995 y 2001. Las cifras muestran que un a?o de escolaridad adicional puede suponer para un trabajador un aumento salarial de hasta un 9% y un incremento de la productividad agregada de un 6%. En el informe se demuestra tambi¨¦n que las empresas tecnol¨®gicas -cuyo personal presenta niveles de cualificaci¨®n m¨¢s elevados- tienen una mayor productividad que los sectores en los que los niveles de cualificaci¨®n son m¨¢s bajos. Adem¨¢s, lo que es especialmente importante, estos beneficios pueden extenderse a otros sectores si se aplican las pol¨ªticas de empresa adecuadas. Las personas poco cualificadas tienen el doble de posibilidades de estar desempleadas que las personas con m¨¢s cualificaciones. Los trabajadores con un bajo nivel de formaci¨®n est¨¢n empleados menos tiempo. Ciento cincuenta millones de ciudadanos europeos no han completado siquiera la ense?anza secundaria b¨¢sica.
Todas estas estad¨ªsticas ponen de manifiesto un hecho claro: las cualificaciones son importantes. Para que la Iniciativa Europea de Crecimiento consiga sus objetivos, tanto los Estados miembros como las instituciones de la UE deben comprometerse firmemente a invertir en capital humano, y no s¨®lo en capital f¨ªsico.
Los Estados han de garantizar una financiaci¨®n adecuada de las pol¨ªticas del mercado de trabajo, incluidos la formaci¨®n y el reciclaje. Deben ofrecer incentivos para que las empresas inviertan en sus trabajadores, especialmente en los mayores de 55 a?os y poco cualificados. Tienen que redoblar sus esfuerzos para cumplir los compromisos de Lisboa, entre ellos lograr "un aumento anual considerable de la inversi¨®n per c¨¢pita en recursos humanos", y para elevar al 12,5%, como m¨ªnimo, para el a?o 2010, la tasa de participaci¨®n de la poblaci¨®n laboral adulta en el aprendizaje permanente. Desde 1995, la inversi¨®n p¨²blica en educaci¨®n ha estado estancada en alrededor de un 5%: los gobiernos deben invertir m¨¢s e invertir mejor.
A escala europea, necesitamos que los jefes de Estado y de Gobierno transmitan un mensaje claro: el desarrollo de las capacidades es una prioridad en Europa. En los debates sobre la financiaci¨®n comunitaria, hemos de reconocer la importancia de invertir en la formaci¨®n y comprometernos a dedicar recursos importantes al capital humano y al aprendizaje permanente. Trabajaremos en estrecha colaboraci¨®n con el Banco Europeo de Inversiones para convencer a los l¨ªderes europeos de la necesidad de invertir m¨¢s en capital humano, proceso ya iniciado con una reciente conferencia conjunta sobre el capital humano celebrada en Bruselas. Con car¨¢cter m¨¢s inmediato, toda acci¨®n adoptada en el marco de la Iniciativa Europea de Crecimiento debe incluir una inversi¨®n considerable en recursos humanos, no s¨®lo en capital f¨ªsico.
Estoy comprometida con el objetivo ¨²ltimo de hacer de Europa la econom¨ªa m¨¢s competitiva y din¨¢mica del mundo. Todas las pol¨ªticas propuestas por la Comisi¨®n desde la Cumbre de Lisboa han tenido este objetivo fundamental. Estoy comprometida con el logro de una UE que cree m¨¢s y mejores empleos para sus ciudadanos. La mejor manera de conseguir estas metas es invirtiendo en el mayor recurso que poseemos: nuestra gente.
Ana Diamantopoulou es comisaria europea de Empleo y Asuntos Sociales
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