Estados Unidos subasta Irak
Los extranjeros podr¨¢n invertir sin l¨ªmite en todos los sectores salvo en el del petr¨®leo
Al rompecabezas de la reconstrucci¨®n de Irak iraqu¨ª la comunidad internacional deber¨¢ a?adir otro reto: el programa de total liberalizaci¨®n econ¨®mica del pa¨ªs ¨¢rabe decretado por el proc¨®nsul de EE UU en Bagdad, Paul Bremer, el pasado 19 de septiembre. Dicho plan, que autoriza la propiedad extranjera hasta el 100% en todos los sectores econ¨®micos iraqu¨ªes excepto los recursos naturales [l¨¦ase petr¨®leo], convertir¨¢ a Irak en el pa¨ªs m¨¢s liberalizado del mundo, pero puede matar al enfermo llevando a la quiebra a los peque?os negocios privados iraqu¨ªes, incrementando el paro, que ya sufre m¨¢s del 50% de la poblaci¨®n, y generando mafias.
Las reformas de Bremer, destinadas a forzar la inmediata transici¨®n iraqu¨ª desde el estatalismo corrupto heredado de Sadam Husein a un liberalismo econ¨®mico sin parang¨®n, fue hecho p¨²blico el pasado 21 de septiembre por el ministro de Finanzas iraqu¨ª, Kamil Mubdir al Gailani, durante la conferencia anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) celebrado en Dubai.
En s¨ªntesis, el plan, que fue aprobado sin que exista a¨²n en Irak un gobierno leg¨ªtimo, autoriza a las compa?¨ªas extranjeras a poseer o invertir "en las nuevas o existentes empresas iraqu¨ªes en cualquier parte de Irak y en todos los sectores sin limitaci¨®n alguna", excepto en recursos naturales, donde esa propiedad extranjera no podr¨¢ ser del 100%. Los decretos de Bremer (www.cpa-iraq.org) tambi¨¦n se?alan que un inversor extranjero, t¨¦rmino que incluye a los iraqu¨ªes que residan permanentemente fuera del pa¨ªs, no podr¨¢ ser tratado en t¨¦rminos "menos favorables" que un inversor local y permiten a las compa?¨ªas extranjeras la repatriaci¨®n "inmeditata y completa" de beneficios.
Tampoco est¨¢n obligadas a depositar sus fondos en ninguna instituci¨®n iraqu¨ª por un periodo de tiempo, algo que s¨ª es necesario en otros pa¨ªses de la regi¨®n.
Las medidas dictadas por el administrador estadounidense de la Autoridad Provisional de la Coalici¨®n (CPA) tambi¨¦n autorizan a los bancos extranjeros a poseer hasta el 50% de los bancos iraqu¨ªes y limita a un total de seis bancos extranjeros, durante los pr¨®ximo cinco a?os, el n¨²mero de entidades for¨¢neas que puedan controlar totalmente bancos locales. Despu¨¦s del 31 de diciembre de 2008 no habr¨¢ l¨ªmite a la propiedad bancaria por parte de los extranjeros.
El plan tambi¨¦n reduce el m¨¢ximo tipo impositivo de los congresos personales o empresariales a s¨®lo el 15% y establece un arancel fijo del 5% sobre todos los bienes importados desde el pr¨®ximo 1 de enero, quedando exentos las medicinas, alimentos, libros, etc¨¦tera, as¨ª como las fuerzas, agencias y contratistas de los pa¨ªses que forman parte de la coalici¨®n. En cambio, s¨ª se impide de momento a los extranjeros adquirir bienes inmuebles en Irak.
Terapia de choque
Esta terapia de choque ha sembrado m¨¢s que una duda sobre su eficacia entre los expertos econ¨®micos, que temen una repetici¨®n de los estragos que caus¨® en la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica la transici¨®n al capitalismo salvaje.
Timothy B. Mills, socio del bufete de abogados Patton Boggs LLP, de Washington, y con 25 a?os de servicio en el Ej¨¦rcito de EE UU, explica a EL PA?S: "Puede que no sea muy diferente a lo que ocurri¨® en Rusia. El sector privado iraqu¨ª lo forman unas doce familias, que sacaron su dinero del pa¨ªs antes de la guerra, y que ahora se asociar¨¢n con las empresas extranjeras. Son gente que se adapta muy bien y dominar¨¢n el mercado. Habr¨¢ una concentraci¨®n de capital y s¨ª existe el riesgo de que surjan mafias y de que las peque?as compa?¨ªas iraqu¨ªes vayan a la quiebra".
Mills, que volvi¨® de Irak hace dos semanas, hace una ¨²ltima advertencia: "Las reglas dictadas por Bremer pueden ser cambiadas a corto plazo por un gobierno soberano iraqu¨ª, y la inseguridad en el pa¨ªs es a¨²n muy alta. El beneficio no es tan grande como para asumir por ahora los riesgos. No creo que las empresas extranjeras vayan a correr por participar en la reconstrucci¨®n".
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