El azar y la encrucijada
Gurpegui pasa en el Bernab¨¦u su primer control antidopaje desde que dio positivo en 2002
En septiembre de 2002, Carlos Gurpegui inici¨® la pasada Liga, en San Sebasti¨¢n, con toda la ilusi¨®n. Al t¨¦rmino del primer encuentro, que el Ahletic perdi¨® ante la Real Sociedad, el jugador navarro pas¨® por sorteo el control antidopaje. Dos meses y medio despu¨¦s, recibi¨® la peor noticia de su vida deportiva: su orina ten¨ªa un nivel 19 de norandroxterona cuando el l¨ªmite es 2. Ah¨ª comenz¨® su calvario, que, presuntamente, concluy¨® el viernes con el dictamen del Consejo Superior de Deportes (CSD), aunque no se conoce el veredicto, que recibir¨¢ hoy o ma?ana por correo certificado.
Lo m¨¢s curioso es que, desde aquel fat¨ªdico d¨ªa de Anoeta, Gurpegui jam¨¢s volvi¨® a pasar un control, cuando jug¨®, y curiosamente el s¨¢bado, en el Bernab¨¦u, con su caso fallado, el azar quiso que volviera a someterse al an¨¢lisis. ?Coincidencia?
El asunto tiene su miga. El fallo sobre Gurpegui ya estaba tomado el viernes. El Athletic incluso hab¨ªa previsto una conferencia de prensa, a las 19.30, para dar su opini¨®n. Pero horas antes lleg¨® la informaci¨®n de que el CSD remitir¨ªa por carta su dictamen al jugador, lo que alargaba el conocimiento del mismo hasta esta semana. Es decir, Gurpegui, con una sentencia dictaminada, la que sea, pod¨ªa jugar frente al Madrid aunque hubiera sido sancionado. Pero, al t¨¦rmino del encuentro, el sorteo decidi¨® que ser¨ªa ¨¦l, junto a Etxeberria, quien pasar¨ªa el control.
El tema es algo m¨¢s que anecd¨®tico. Hoy o ma?ana se conocer¨¢ si Gurpegui es sancionado con dos a?os de suspensi¨®n, como dictamin¨® el Comit¨¦ de Competici¨®n. Un tiempo al que habr¨ªa que restar el periodo que cumpli¨® de esa sanci¨®n antes de que el CSD la dejara en suspenso tras los recursos interpuestos por el Athletic. Pero el club rojiblanco siempre aleg¨® en defensa del jugador la producci¨®n end¨®gena del hematocrito de la nandrolona, lo que ahora volver¨ªa a ponerse en solfa con el nuevo an¨¢lisis realizado tras el partido con el Madrid.
Si Gurpegui no da positivo, la defensa del Athletic se caer¨¢ en picado a pesar de las muestras realizadas por propia voluntad en la pasada temporada. Es decir, el Athletic y el jugador esperan repetir los niveles ofrecidos anteriormente: que Gurpegui d¨¦ positivo es vital para su defensa. Sin embargo, un segundo positivo -y ¨¦ste lo ser¨ªa por cuanto la sentencia es anterior al an¨¢lisis- significar¨ªa la retirada de la licencia de por vida.
Gurpegui se encuentra en la encrucijada. Si da negativo, la defensa de su caso se resquebraja; si da positivo, la defensa se mantiene -ser¨ªa absurdo pensar que ha seguido dop¨¢ndose tras la detecci¨®n del primer an¨¢lisis-, pero se juega su carrera.
De cualquier forma, el Athletic ya tiene decidido recurrir a los tribunales ordinarios de justicia aunque Gurpegui sea sancionado con un solo d¨ªa de castigo.
Las tres cosas -la sentencia inicial, el nuevo an¨¢lisis y el recurso a la justicia ordinaria- amenazan con prolongar el caso Gurpegui mucho m¨¢s tiempo. Algo s¨ª como si fuera interminable: el conocimiento del an¨¢lisis se demor¨® dos meses, dimiti¨® el anterior Comit¨¦ de Competici¨®n y el CSD y el Athletic no se pusieron de acuerdo en las condiciones en que deb¨ªa producirse un examen exhaustivo de la fisiolog¨ªa del futbolista.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.