La palabra contra la destrucci¨®n
70 escritores y poetas expresan su rechazo a la guerra en el texto 'En pie de paz'
Hay muchas formas de decir no a la guerra. 70 escritores y poetas de todo el pa¨ªs lo han hecho con la herramienta que le es m¨¢s cercana, la palabra escrita. En pie de Paz. Escritores contra la guerra, auspiciado por la editorial cordobesa Plurabelle, no s¨®lo alude a la guerra. Recoge diferentes tem¨¢ticas convertidas en f¨®rmulas de plasmar un instrumento com¨²n y que se expresa en el ep¨ªlogo del libro: "Al presente me atengo. La poes¨ªa es un arma. Disparemos", as¨ª lo escribi¨® el poeta gallego Celso Emilio Ferreiro.
La idea surgi¨® del poeta cordob¨¦s Joaqu¨ªn P¨¦rez Azaustre tras acudir a una de las marchas contra la guerra de Irak celebrada en Madrid. Aunque se engrana en un momento coyuntural, la edici¨®n ha ido m¨¢s all¨¢ y ha depurado los doscientos textos que recibi¨® para no quedarse en una cr¨®nica literaria de rechazo a una sola guerra. A trav¨¦s del amor y otras tem¨¢ticas, el libro se convierte en un manifiesto contra todas las guerras. El joven poeta cordob¨¦s Juan Bernier explica que la mayor¨ªa de protestas del ¨¢mbito de la cultura han sido "coyunturales y oportunistas y muchas de ellas hoy no tienen sentido".
El editor del libro y narrador cordob¨¦s, Javier Fern¨¢ndez, incide en que se ha huido del oportunismo, "por eso hemos retrasado la publicaci¨®n", explica. Recuerda el "desinter¨¦s y la respuesta fabulosa" de quienes han remitido los 200 textos de autores consagrados, como Justo Navarro, y de j¨®venes promesas, como los cordobeses Juan Antonio Bernier o Elena Medel.
Encuadernado "en fr¨ªo, representa un sentimiento m¨¢s ¨ªntimo y duradero", explica el editor. Fern¨¢ndez alude en su relato a La guerra de los mundos, de Howard Koch, una representaci¨®n de una invasi¨®n extraterrestre en Estados Unidos. Javier Fern¨¢ndez considera que el relato puede explicar a una "sociedad americana desquiciada".
El escritor argentino afincado en C¨®rdoba, Ren¨¦ Palacios More, considera que el escritor est¨¢ dentro de un v¨¦rtice formado adem¨¢s por monjes y terroristas que est¨¢n contra la burgues¨ªa, "en cuyas tensiones se originan las guerras". Palacios More cree que en el artista, aunque sin m¨¢s armas que la pluma, "hay mucho de terrorista" en contra de esa burgues¨ªa, "que es la que en ¨²ltima instancia tiende a hundir o a hacer desaparecer al artista", explica.
Juan Antonio Bernier ensalza en su poema a la riada humana que protest¨® contra la guerra en todo el mundo: "Son la luz del mundo sin saberlo", apostillan sus versos. Bernier considera no obstante que la literatura no debe tomar ning¨²n camino en su tem¨¢tica como protesta y limitarse a ser un "fruto de la conciencia y un ejercicio de inteligencia".
Jos¨¦ Luis Amaro, tambi¨¦n poeta cordob¨¦s, rescata el simbolismo ancestral de la bandera blanca que en la lejan¨ªa es representado por el papel que pide la firma de un peat¨®n contra la guerra. Para Amaro, la literatura tiene una tradici¨®n muy antigua contra la guerra y las injusticias, como en la resistencia francesa o en la censura previa con el r¨¦gimen de Franco. "Los tiempos han cambiado, el panfleto ha quedado obsoleto por el papel de los medios de comunicaci¨®n y la principal oposici¨®n del escritor es mediante la conciencia est¨¦tica", explica.
Elena Medel recuerda en su poema el horror jud¨ªo en Auschwitz (Polonia), con lo que escapa de lo coyuntural de la guerra de Irak. Esta precoz autora cordobesa entiende que si fuera pintora habr¨ªa pintado un cuadro y que la cuesti¨®n "es posicionarse y no quedarse al margen".
El joven poeta cordob¨¦s, Antonio Agredano, que ensalza el amor y la relaci¨®n humana en su poema, cree que "toda poes¨ªa tiene que estar cargada de pol¨ªtica, de ideales".
Tambi¨¦n hay quien ha cargado las tintas contra quienes hacen la guerra desde "la dulce tibieza de los despachos oficiales", escribe el poeta de origen brasile?o afincado en C¨®rdoba Eduardo Garc¨ªa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.