Balidos
Nadie pregunta a las ovejas su parecer sobre la manifestaci¨®n chotuna que hoy recorre el centro de Madrid. Todo parece indicar que esas desventuradas bestias van obligadas al sarao y que no les hace gracia alguna salir por ah¨ª en procesi¨®n haciendo el borrego, balando a la Cibeles y dando conciertos de cencerro en la Puerta de Alcal¨¢. Los zo¨®logos consideran a estos bichos como extremadamente t¨ªmidos (las cabras son otra cosa), propensos al rubor y con un alto sentido del rid¨ªculo. Por otra parte, es ingrato martirizar con la contaminaci¨®n capitalina y las part¨ªculas en suspensi¨®n a unos seres que nos dan lana, leche, queso, cordero asado, astracanes. Las asociaciones de defensa de los animales debieran tomar cartas en el asunto para evitar este bochorno in¨²til a los carneros.
La presente org¨ªa de ovejas descarriadas tiene, sin embargo, su lado positivo porque nos recuerda algo de caj¨®n, aunque inquietante: Madrid es una v¨ªa pecuaria por la que tienen derecho a transitar churras, merinas y todo tipo de cuadr¨²pedos gregarios; no todo van a ser buitres, v¨ªboras, ratas, tiburones, ladillas, gusanos y mosquitas muertas. Esto es una selva. Hoy tambi¨¦n, mientras en la Puerta del Sol hay balidos, en Aranjuez hay baladas a cargo de 1.500 canarios (p¨¢jaros, no de los otros) que participan en una exposici¨®n de aves cantoras. El se?or Ruiz-Gallard¨®n, que de alg¨²n modo es la oveja negra necesaria del PP, se marcar¨ªa un paso de gigante en su carrera si consiguiese organizar en la capital un multitudinario concierto de ruise?ores en honor del Pr¨ªncipe de Asturias y su prometida.
Madrid tiene que hacer a la regia pareja un obsequio sonado. Y hay que pensar en ello ya porque est¨¢n empezando a llegar a la Zarzuela regalos nupciales de diverso calibre, algunos de ellos casi surrealistas: la Asociaci¨®n en Defensa del Borrico (Adebo), con sede en Rute (C¨®rdoba), tiene preparados a Ruise?or y Calandria, pareja de pollinos cuya madrina, por razones que se nos escapan, es do?a Marina Casta?o, viuda de Cela. Balido en si menor.
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