Un equipo logra resultados alentadores con c¨¦lulas madre para reparar el coraz¨®n
Este grupo de Valladolid concluye que cuatro de los diez pacientes tratados muestran una mejora
Un equipo de bi¨®logos, hemat¨®logos y cardi¨®logos vinculados a la Red de Terapia Celular, en Valladolid, ha terminado un ensayo piloto en el que ha tratado a 10 infartados con c¨¦lulas madre de su propia m¨¦dula ¨®sea. Cuatro de los pacientes han mostrado, seis meses despu¨¦s de la intervenci¨®n, una significativa recuperaci¨®n de la funci¨®n cardiaca, probablemente debida a que las c¨¦lulas madre han anidado en la zona da?ada y se han convertido en m¨²sculo cardiaco. El equipo espera iniciar en tres meses un ensayo cl¨ªnico con 100 pacientes. S¨®lo si ese ensayo funciona, la t¨¦cnica ser¨¢ validada.
El trabajo es una colaboraci¨®n entre los equipos de Ana S¨¢nchez, del Instituto de Biolog¨ªa y Gen¨¦tica Molecular (IBGM), Alberto San Rom¨¢n, del Instituto de Ciencias del Coraz¨®n del Hospital Cl¨ªnico Universitario, y los hemat¨®logos del Hospital R¨ªo Ortega, todos en Valladolid. Los resultados fueron presentados el viernes en Valladolid durante una reuni¨®n de la Red de Terapia Celular, una asociaci¨®n de laboratorios repartidos por todo el pa¨ªs que coordina desde esa ciudad Javier Garc¨ªa-Sancho.
"Entre cuatro y cinco pacientes muestran una mejora en la fracci¨®n de eyecci¨®n despu¨¦s de seis meses", afirma el cardi¨®logo San Rom¨¢n. "La fracci¨®n de eyecci¨®n se estima mediante ecograf¨ªa y resonancia magn¨¦tica, y mide cu¨¢nto de bien funciona la contracci¨®n cardiaca. La edad media de los pacientes era de 63 a?os, y les infundimos con un cat¨¦ter 62 millones de c¨¦lulas en la coronaria. La infusi¨®n tuvo lugar entre 9 y 23 d¨ªas despu¨¦s del infarto, dependiendo del paciente. En ocho pacientes, el miocardio infartado era ya necr¨®tico antes de la infusi¨®n. ?sos fueron los que estudiamos a fondo seis meses despu¨¦s, porque el tejido necr¨®tico nunca se regenera por s¨ª solo".
Muy poco invasiva
La t¨¦cnica es muy poco invasiva. Las c¨¦lulas madre se infunden en la coronaria a trav¨¦s de un cat¨¦ter (tubito) introducido desde una peque?a perforaci¨®n en la ingle. La primera conclusi¨®n del ensayo piloto es que la t¨¦cnica no tiene efectos adversos. En ning¨²n paciente hubo eventos cardiacos importantes, ni tampoco arritmias, una posibilidad que preocupaba a los m¨¦dicos. En segundo lugar, la mejora en algunos pacientes -San Rom¨¢n present¨® im¨¢genes muy elocuentes de ecograf¨ªa y tomograf¨ªa de positrones- es lo bastante alentadora como para acometer un ensayo mayor, que demuestre estad¨ªsticamente si la t¨¦cnica merece la pena o no.
Los cardi¨®logos han trabajado en paralelo con la bi¨®loga celular Ana S¨¢nchez, del IBGM, que no s¨®lo ha dise?ado los protocolos para seleccionar las c¨¦lulas madre de los pacientes, sino que ha utilizado una peque?a muestra (menos del 5%) de cada uno de ellos para estudiarla a fondo en cultivos o en animales de laboratorio. Estos datos a?aden mucha fuerza al argumento del equipo.
S¨¢nchez ha podido comprobar en ratones infartados que las c¨¦lulas madre de los pacientes anidan en la zona da?ada del coraz¨®n, y que en pocos d¨ªas pierden su forma redondeada y se vuelven alargadas como las del coraz¨®n. A las dos semanas, las c¨¦lulas se han convertido en cardiomiocitos (c¨¦lulas del m¨²sculo cardiaco) por cualquier criterio que se considere. Por ejemplo, tienen activados los genes de la actina sarcom¨¦rica humana y de la conexina 43, dos marcadores est¨¢ndar de los cardiomiocitos diferenciados.
S¨¢nchez ha utilizado tambi¨¦n c¨¦lulas madre humanas de cord¨®n umbilical -una excelente fuente de c¨¦lulas madre adultas- para demostrar que, en ciertas condiciones de cultivo, se agrupan en colonias y activan los genes caracter¨ªsticos de las c¨¦lulas del m¨²sculo cardiaco. Lo que ocurre despu¨¦s es asombroso: las colonias de c¨¦lulas empiezan a latir coordinadamente en la placa de cultivo. "La frecuencia de los latidos es inferior a la del coraz¨®n real", dice S¨¢nchez, "pero las c¨¦lulas muestran ritmos sincronizados por las mismas razones que el coraz¨®n real: est¨¢n unidas por 'gap junctions' [un tipo de canal complejo entre c¨¦lulas vecinas] e intercambian calcio a trav¨¦s de ellas". Fabricar un coraz¨®n en una placa de cultivo es todav¨ªa un sue?o irrealizable, pero las im¨¢genes de esos latidos, que S¨¢nchez present¨® el viernes "en primicia", se parecen mucho a una luz al final del t¨²nel.
El cuerpo humano no es m¨¢s que un agregado de 10 billones de c¨¦lulas, cada una no muy distinta de una ameba. Y toda enfermedad consiste en la aver¨ªa o muerte de unas cuantas de esas c¨¦lulas. El futuro de la medicina es encontrar formas de reponer las c¨¦lulas averiadas, y de eso trat¨® la reuni¨®n de la Red de Terapia Celular celebrada en Valladolid al final de la semana pasada. La red cuenta entre sus miembros con los cient¨ªficos y m¨¦dicos Jos¨¦ L¨®pez-Barneo, Jordi Alberch, Salvador Mart¨ªnez, Isabel Fari?as, Dami¨¢n Garc¨ªa-Olmo, Juan Hurl¨¦, Lina Badimon y Bernat Soria.
Si una conclusi¨®n se extrajo de la reuni¨®n es que el progreso de este campo biom¨¦dico requiere un decidido impulso a la investigaci¨®n con c¨¦lulas madre, tanto embrionarias como adultas.
Salud y c¨¦lulas madre
Las c¨¦lulas madre ya no son una mera promesa de futuro. Las investigaciones presentadas en Valladolid por Ana S¨¢nchez y Alberto San Rom¨¢n (coraz¨®n), Jos¨¦ L¨®pez-Barneo (Parkinson), Constantino Sotelo (cerebelo) y Bernat Soria (diabetes), por citar algunas, demuestran que las c¨¦lulas madre est¨¢n instaladas en una v¨ªa segura para convertirse en medicina a medio plazo.
En palabras del presidente de la comisi¨®n de trasplantes del Consejo de Europa, Rafael Matesanz, "todo indica que los tres grandes problemas actuales de los trasplantes -la escasez de ¨®rganos, el rechazo inmunol¨®gico y la calidad y seguridad de la pieza trasplantada- se resolver¨¢n con las c¨¦lulas madre".
El fundador de la Organizaci¨®n Nacional de Trasplantes llam¨® la atenci¨®n sobre una enmienda a la directiva sobre productos medicinales, aprobada por la UE en junio pasado, que puede tener graves implicaciones para la terapia celular, est¨¦ o no basada en c¨¦lulas madre. La enmienda exige a las c¨¦lulas unos requisitos de calidad similares a los nuevos medicamentos. Seg¨²n Matesanz, "le¨ªda literalmente, imposibilitar¨ªa los trasplantes de m¨¦dula que se hacen ahora en los hospitales de toda Europa".
Matesanz repas¨® la situaci¨®n legal de las c¨¦lulas madre embrionarias en Europa, y record¨® que la mayor¨ªa de la UE est¨¢ a favor de esos trabajos. "Las estad¨ªsticas tambi¨¦n muestran que los ciudadanos espa?oles son de los m¨¢s abiertos de Europa a estas investigaciones. Esto viene a demostrar que la opini¨®n p¨²blica espa?ola est¨¢ m¨¢s adelantada que sus gobernantes". La conclusi¨®n de Matesanz tiene el sonido de un brindis: "Salud y c¨¦lulas madre".
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