Una estrella en la Tierra

"Una estrella en la Tierra", "el camino m¨¢s brillante hacia la energ¨ªa" son algunos de los po¨¦ticos t¨¦rminos utilizados en los ¨²ltimos a?os para intentar popularizar el proyecto ITER, que ser¨¢, cuando se plasme, un gigantesco reactor del tipo tokamak en el que se reproducir¨¢ en la Tierra la fusi¨®n de n¨²cleos at¨®micos de hidr¨®geno, la fuente de energ¨ªa en el Sol y las dem¨¢s estrellas.

Ser¨¢, sin embargo s¨®lo experimental: demostrar¨¢, en el mejor de los casos, que se puede seguir avanzando hacia la fusi¨®n como fuente inagotable de energ¨ªa, pero no ser¨¢ una m¨¢quina rentable. Despu¨¦s del ITER, que es un dif¨ªcil desaf¨ªo tecnol¨®gico de por s¨ª ya que se trata de conseguir confinar un gas ionizado a muy alta temperatura, habr¨¢ que construir otra m¨¢quina todav¨ªa mayor, DEMO.

En realidad ITER (siglas de International Thermonuclear Experimental Reactor) es sobre todo una "colaboraci¨®n internacional ¨²nica", como recuerdan los folletos producidos en su ya larga historia, que nace en 1988 con cuatro socios: la Uni¨®n Europea, Estados Unidos, Jap¨®n y la Uni¨®n Sovi¨¦tica.

Crisis y muchos retrasos han jalonado el camino (iter es camino en lat¨ªn), desde el primer dise?o de concepto en 1990. Estados Unidos decidi¨® salir del proyecto en 1998 por motivos fundamentalmente econ¨®micos, aunque este mismo a?o volvi¨® a entrar en ¨¦l. Hace unos d¨ªas el Departamento de Energ¨ªa de EE UU hizo p¨²blica una lista de las grandes instalaciones cient¨ªficas en las que va a invertir a corto plazo y el ITER ocupa el primer lugar.

La Uni¨®n Sovi¨¦tica se desmoron¨® y la aportaci¨®n econ¨®mica de Rusia al ITER actualmente

es testimonial. Entraron, sin embargo, nuevos socios, como Canad¨¢, China y Corea del Sur, los dos ¨²ltimos muy recientemente, y ahora es EE UU quien m¨¢s prisa muestra para que se decida d¨®nde se construye la m¨¢quina.

Las candidaturas presentadas para albergar el ITER son las dos europeas -Cadarache en Francia y Vandell¨®s en Espa?a-, la japonesa y la canadiense. ?sta ¨²ltima parece la m¨¢s d¨¦bil de todas, por falta de apoyo del Gobierno federal, a pesar de que tiene ventajas t¨¦cnicas. Por su parte, Europa quiere presentar una sola candidatura, postura no compartida, en solitario, por Espa?a, que lleva varios meses proponiendo que se mantengan las dos candidaturas hasta la fase final internacional, dado que ambas son id¨®neas, seg¨²n el informe de expertos encargado este a?o por la UE.

La construcci¨®n del reactor, una vez tomada la decisi¨®n, tardar¨ªa 10 a?os y costar¨ªa unos 4.600 millones de euros. Despu¨¦s, durante los 20 a?os de vida prevista del reactor, el coste estimado ser¨ªa de 240 millones de euros anuales. Tambi¨¦n est¨¢ previsto el coste de desmantelamiento.