Dos huevos

En m¨¢s de una ocasi¨®n he mantenido una actitud cr¨ªtica sobre el transfuguismo. As¨ª lo manifest¨¦ con motivo de la desintegraci¨®n del llamado GIL, y su aprovechamiento por el PP-A. Las razones de entonces no son otras sino la defraudaci¨®n a los electores, el hecho de que partidos que son votados por unos determinados valores e ideas suman poder gracias a la intervenci¨®n y a la actuaci¨®n de personas que no tienen los mismos valores ni las mismas ideas pol¨ªticas. Es una estafa pol¨ªtica a los ciudadanos y un fraude al electorado.

No cabe duda de que, a veces, hay excepciones. Sin embargo, no es el caso del GIL. Un partido cuya presidencia era ostentada por Jes¨²s de Madrid y con un tiempo de gobierno en Marbella en el que el pase de este personaje por los juzgados, como tambi¨¦n de algunos de sus compa?eros de partido, ha sido sin desmayo, habiendo reca¨ªdo sentencias condenatorias en m¨¢s de una ocasi¨®n, no era el mejor ejemplo para mantenerse y servir en pol¨ªtica ni para confiar en estas personas.

De ah¨ª que la fusi¨®n por absorci¨®n de algunos de estos personajes por el PP, avalados por la se?ora Mart¨ªnez y el se?or Arenas, no se entendieran demasiado bien. Menos a¨²n cuando uno de estos tr¨¢nsfugas, alcalde de La L¨ªnea y presidente del PP del Campo de Gibraltar, ha sido imputado por prevaricaci¨®n, y el PP le sigue manteniendo.

Es verdad que el PP ha forzado su dimisi¨®n "temporal" como presidente del PP en el Campo de Gibraltar, pero sigue siendo alcalde y est¨¢ imputado por prevaricaci¨®n, lo que no se comprende demasiado bien. No se le ha imputado por llevar mal los contratos del PP ni hacer m¨¢s o menos fotocopias como Romero de Tejada, sino por su actuaci¨®n como alcalde. Lo razonable en estos casos es que la dimisi¨®n la cursara como alcalde, pues como lleve los contratos del PP-A o haga las fotocopias es indiferente para el juzgado.

Claro que menos se comprende que la se?ora Mart¨ªnez nos quiera hacer ver que esta dimisi¨®n temporal es ejemplo de honestidad pol¨ªtica y tienen que seguir en los Ayuntamientos los imputados. En fin, a veces, cuando pasan estas cosas uno se pregunta donde est¨¢n los dos huevos si en la ¨®pera, en otro sitio o en el mismo.