El puente de San Fernando, un embudo en la N-II
La autopista de peaje inaugurada hace dos meses apenas alivia el embotellamiento en la N-II
La radial 2 fue presentada por el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, el d¨ªa de su inauguraci¨®n, el pasado 6 de octubre, como "una de las obras m¨¢s importantes de los ¨²ltimos a?os". La primera autopista de peaje en la Comunidad de Madrid naci¨® para aliviar el tr¨¢fico congestionado de la N-II. Dos meses despu¨¦s de su apertura al p¨²blico, EL PA?S pudo comprobar que la radial 2 no consigue evitar el gran atasco que se forma diariamente en la carretera de Barcelona para todos aquellos que quieren entrar en la ciudad por la avenida de Am¨¦rica. El embudo se forma cada ma?ana en el puente de San Fernando de Henares, a la altura del kil¨®metro 15. Unos 134.000 veh¨ªculos -un 11% son de tipo pesado- pasan en uno u otro sentido por este punto.
La radial 2, que discurre paralela a la N-II, tiene dos tramos: de Guadalajara a la M-50 y de la M-50 a la M-40. Aquellos conductores que quieren acceder al centro de la ciudad por la avenida de Am¨¦rica tienen que dejar la autopista de pago y, a trav¨¦s de la M-50, desviarse a la N-II, donde se encuentran con el colapso de San Fernando.
El origen del atasco est¨¢ en una curva muy pronunciada hacia la derecha, a la que hay que sumar el intenso tr¨¢fico que se incorpora unos metros m¨¢s adelante desde San Fernando de Henares y Coslada.
Si se parte desde Alcal¨¢ de Henares a las 8.00, el viaje resulta pl¨¢cido, a una media de 110 kil¨®metros por hora, hasta el punto kilom¨¦trico 21. All¨ª la velocidad se ralentiza hasta los 15 kil¨®metros por hora durante seis kil¨®metros. Es el gran par¨®n matutino que sufren, como otros miles de madrile?os, Pedro Garc¨ªa e Irene Herrera. "El peor tomate", lo llama Garc¨ªa. Sin embargo, ¨¦l es afortunado: trabaja en el norte de la ciudad, por lo que puede, si as¨ª lo desea, seguir por la radial 2 hasta su oficina."Pero el peaje de la R-2 es demasiado caro como para pagarlo todos los d¨ªas", apostilla Garc¨ªa.
Despu¨¦s de superar otro punto problem¨¢tico -la incorporaci¨®n de la M-40- a Pedro Garc¨ªa e In¨¦s Herrera todav¨ªa les queda el mal trago de entrar en la capital. All¨ª se encontrar¨¢n, poco despu¨¦s de pasar ante el edificio de Torres Blancas, con el que se conoce como el sem¨¢foro de Europa: se puede llegar por autopista desde el norte del continente hasta este punto sin detenerse. Es la ¨²ltima traba antes de entrar en la ciudad. Cuando la velocidad de crucero hab¨ªa remontado hasta los 96 kil¨®metros por hora, en ese lugar se vuelve a desplomar. Seg¨²n la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, se tardan 42 minutos en llegar a los accesos de la M-30 si se sale a las 8.00 desde Alcal¨¢ de Henares.
En apenas 13 minutos m¨¢s, las l¨ªneas de autob¨²s 223, 224 y 227 cubren ese mismo trayecto y a la misma hora. Los principales usuarios de este medio en la hora punta son estudiantes que acuden a la universidad de Alcal¨¢ de Henares. A lo largo del d¨ªa, casi 20.000 personas utilizan el autob¨²s para hacer este recorrido.
Diez veces m¨¢s pasajeros transporta el abarrotado tren de Cercan¨ªas. 200.077 personas pasan a diario por los vagones de las l¨ªneas C-1, C-2 y C-7 entre las estaciones de Alcal¨¢ y de Chamart¨ªn, intentando hacerse un hueco en la hora punta, que convoca a 61.000 pasajeros. Este trayecto ferroviario, que dura 48 minutos, presenta la peculiaridad de que son tantos los que lo usan para llegar a la capital como quienes lo hacen para salir de ella rumbo a los pol¨ªgonos industriales que proliferan en el Corredor del Henares. Para promover el uso del transporte ferroviario, existen aparcamientos disuasorios gratuitos en pr¨¢cticamente todas las estaciones, si bien no tienen una gran capacidad. A la cabeza de todos ellos, el de Coslada, con 600 plazas.
El gran ¨¦xito del transporte p¨²blico para desplazarse por el corredor del Henares resulta insuficiente para evitar el consabido atasco diario de la N-II, la tercera v¨ªa m¨¢s transitada para entrar en Madrid, por detr¨¢s de la N-VI (A Coru?a) y la N-V (Extremadura).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.