La c¨²pula de CiU trata de evitar el desconcierto por la p¨¦rdida del poder

Las ejecutivas de Uni¨® y de Converg¨¨ncia analizar¨¢n hoy el fracaso de las negociaciones con Esquerra Republicana. De momento, la direcci¨®n de CiU se esforzar¨¢ por insuflar ¨¢nimo a unas bases que poco a poco, y desconcertadas, tratan de asimilar la p¨¦rdida de la Generalitat tras 23 a?os. La direcci¨®n de CiU apuesta por facilitar la "gobernabilidad" desde la oposici¨®n y descarta bloquear, a modo de desquite, la reforma estatutaria.

La direcci¨®n nacionalista repetir¨¢ hoy a los dirigentes de la federaci¨®n el mismo mensaje lanzado ayer tras conocerse el acuerdo de izquierdas en Catalu?a: que los republicanos hab¨ªan decidido de antemano pactar con los socialistas y dejar a CiU en la oposici¨®n y que su equidistancia era una pantomima. "Nos han enga?ado, porque los negociadores de Esquerra nos iban diciendo que todo iba bien, que las negociaciones avanzaban", dijo ayer el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, en la emisora Rac1.

Duran dijo que no entiende las "razones y los motivos" del pacto, que, en su opini¨®n, "es contrario a la orientaci¨®n pol¨ªtica de las urnas" y "manipula la voluntad y la opini¨®n de la sociedad civil". Id¨¦ntico diagn¨®stico ofreci¨® el portavoz del Gobierno en funciones y miembro de la ejecutiva de CiU, Felip Puig, quien a?adi¨® que Esquerra ha "cometido un error" que "repercutir¨¢ en la inestabilidad del pa¨ªs". "En la decisi¨®n parece que han primado las ambiciones de partido sobre las del pa¨ªs", agreg¨®.

Con estos argumentos, la c¨²pula de CiU se presentar¨¢ ante la ejecutiva para defender a capa y espada su estrategia negociadora con los republicanos y que, como reconoci¨® ayer Duran Lleida, poco pod¨ªa hacer frente a la decisi¨®n predeterminada de Esquerra. "Que no haya participado Artur Mas en las negociaciones no puede tomarse como una justificaci¨®n [del fracaso]. A Esquerra le ha faltado voluntad pol¨ªtica", agreg¨® el secretario general de CiU. El presidente del PP en Catalu?a, Josep Piqu¨¦, declar¨® que, aunque no apoyar¨¢ la investidura de Maragall, "cualquier Gobierno le parece leg¨ªtimo".

La direcci¨®n nacionalista se esforzar¨¢ por evitar que cunda el des¨¢nimo en sus bases, porque ahora m¨¢s que nunca es necesaria la "cohesi¨®n" interna. Por este motivo, no se prev¨¦n voces cr¨ªticas en la ejecutiva de hoy. El cierre de filas fue repetido por Duran: "Este pacto ser¨¢ un revulsivo para CiU, para nuestra militancia y para nuestro electorado". Al tiempo, invit¨® a la militancia a "trabajar" con vistas a las elecciones generales de marzo, en las que encabezar¨¢ la candidatura por Barcelona.

Aunque algunos dirigentes apostaban por dar guerra al futuro Gobierno de izquierdas, la direcci¨®n de CiU ha hecho un llamamiento a la calma y prev¨¦ realizar una tarea de oposici¨®n "constructiva". Frente a voces que apostaban por bloquear la reforma del Estatuto en el Parlamento catal¨¢n -los votos de CiU son imprescindibles-, Felip Puig anunci¨® que CiU "colaborar¨¢ en la gobernabilidad del pa¨ªs desde la tranquilidad y como primera fuerza de la oposici¨®n".