Respuesta de Alejandro Sanz

En respuesta a la carta publicada en su peri¨®dico el pasado d¨ªa 7 de diciembre en Cartas al director, y firmada por don Salvador Ulayar, le dirijo la siguiente:

Se?or Ulayar, imagino que debe de ser terrible vivir lo que usted vivi¨® y, ciertamente, el asesino de su padre merece pasar el resto de su vida en prisi¨®n. Comparto su dolor y, cr¨¦ame, a m¨ª personalmente los nacionalismos radicales me parecen despreciables. Siento lo de su padre, pero, precisamente por la memoria de su padre y de tantos otros, perm¨ªtame contestarle, se?or Ulayar.

El mensaje del se?or Medem es uno distinto cada vez que se ve la pel¨ªcula, pero lo que siempre est¨¢ presente es la terrible soledad de alguien que ha querido hablar de los seres humanos m¨¢s all¨¢ de pol¨ªtica... y m¨¢s all¨¢ del Pa¨ªs Vasco, simplemente de seres humanos.

Necesitamos moderaci¨®n para no convertirnos en animales; moderaci¨®n para no cometer el error de confundir una dedicatoria a una pel¨ªcula con un homenaje a ETA. Precisamente esto es algo que aprend¨ª de la pel¨ªcula. No hay peor locura que la que no lo parece.

?Sabe lo que dec¨ªa un chico al que le hab¨ªan amputado la pierna con una bomba? Que si viera al que le hizo eso le dir¨ªa que para qu¨¦; le dir¨ªa que leyera y que viajara y que ser vasco es genial, pero ninguna tierra merece que se mate por ella, que as¨ª, probablemente, lo que se hace es insultarla.

Siempre he expresado mi denuncia por esos maltratos ciertos como el del que usted fue objeto y por los de la madre a la que se le muere un hijo de hambre entre los brazos y no puede darle ni un trozo de pan.

Y los de los ni?os que son reclutados con nueve a?os por los guerrilleros colombianos, y por los oprimidos y por los da?os colaterales, y por los que mueren de sida; todos mueren a manos del desprop¨®sito, de la locura, de la venganza, del resentimiento, de la ignorancia...

Se?or Ulayar, yo denuncio el nacionalismo radical, xen¨®fobo, machista, racista y absurdo, y denuncio que los pol¨ªticos no est¨¢n haciendo bien su trabajo, y denuncio la injusticia. Tambi¨¦n la que se comete con personas como Julio Medem, a las que se criminaliza por expresarse libremente.

Hay muchos vascos que sufren porque no quieren hablar de pol¨ªtica, s¨®lo de cosas normales, de familia, de amigos... y no se les puede condenar por ello. No es tibieza, se?or Ulayar, es prudencia.

Espero que le sirva de consuelo saber que yo s¨¦ que en toda esta tragedia su padre fue el aut¨¦ntico gudari y no el cobarde que lo asesin¨®. Un amigo.