La ilusi¨®n de los que empiezan
Un matrimonio trabaja 20 horas en un peque?o restaurante reci¨¦n abierto
Elvira Moreno y su marido ?scar Ahmet pasar¨¢n la comida de A?o Nuevo en su reci¨¦n estrenado restaurante turco, sito en la calle de Ginzo de Limia (distrito de Fuencarral), sirviendo almuerzos a los que decidan pasar por su local. "Hemos abierto hace un mes y desde entonces no hemos cerrado ning¨²n d¨ªa", explica esta pareja formada por una espa?ola y un turco, que no llevan ni un a?o casados. Juntos han decidido emprender esta aventura empresarial. "No somos del barrio, pero el local nos pareci¨® bueno y aqu¨ª estamos", explican.
Horas y m¨¢s horas. Desde que abrieron el peque?o negocio -en el que han invertido 60.000 euros-, Elvira y ?scar levantan la persiana del restaurante todos los d¨ªas a las 7.30 y no cierran hasta las dos de la madrugada. De momento no van a contratar a m¨¢s personal. Los dos sirven comida t¨ªpica turca, que mezclan con los aperitivos espa?oles que lucen detr¨¢s de la barra: patatas fritas, aceitunas, cacahuetes. "Entre los dos hacemos casi veinte horas. Yo vengo a abrir a las siete y media de la ma?ana y luego viene ¨¦l. Hemos perdido entre seis y ocho kilos de peso cada uno por pasar tantas horas de pie", comenta Elvira mientras revisa que el kebab de carne de pollo y cordero d¨¦ vueltas correctamente en el torno.
En las caras de este matrimonio se mezcla la ilusi¨®n y el cansancio de los principiantes.
Los precios, de momento, los han puesto asequibles para la clase media que mayoritariamente forma el barrio del Pilar: un kebab, con el que uno puede suplir el almuerzo, cuesta tres euros.
En las fiestas navide?as, ?scar y Elvira se esmeran en que todo est¨¦ a gusto del cliente. Han decorado el local con algunos adornos navide?os. Saben que tienen que competir con los numerosos restaurantes y bares que hay en el barrio del Pilar, adem¨¢s de con los del centro comercial La Vaguada. Ellos son nuevos en el barrio y tienen que ganarse a la clientela. "La gente que viene a nuestro restaurante es gente de paso m¨¢s que vecinos de la zona", explica Elvira, que lleva trabajando como cocinera m¨¢s de 25 a?os. "Los restaurantes de La Vaguada no suponen mucha competencia para nosotros porque la gente que va a comer al centro comercial es porque ha ido a hacer compras. Nuestros clientes son de otro tipo", a?ade esta mujer
El d¨ªa de Nochevieja, Elvira y ?scar cerrar¨¢n a las 17.00 el restaurante para irse a cenar a casa. Disfrutar¨¢n poco de la fiesta. El d¨ªa de A?o Nuevo ya estar¨¢n preparados a partir de las 13.30 para servir comidas.
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