El 'oasis' de las cajas catalanas
La naturaleza privada blinda las entidades de ahorro ante la politizaci¨®n de sus ¨®rganos de gobierno
La composici¨®n del nuevo arco parlamentario catal¨¢n surgido despu¨¦s de las elecciones del 16-N no va a repercutir en la composici¨®n de los ¨®rganos de gobierno de las cajas catalanas. Sin embargo, los ¨²ltimos comicios y, sobre todo, los pactos poselectorales para lograr un Gobierno estable, s¨ª han contado con las atentas miradas del sector, inquieto por conocer las intenciones del nuevo Ejecutivo, despu¨¦s del marcaje pol¨ªtico en que se ha convertido el empacho legal del ¨²ltimo a?o, aseguran fuentes del sector.
La batalla pol¨ªtica librada en el seno de Caja Madrid para controlar la segunda caja de Espa?a o el agrio enfrentamiento de Cajasur con la Junta de Andaluc¨ªa se han visto como algo extempor¨¢neo en Catalu?a, donde de las 10 cajas de ahorro presentes en la comunidad, s¨®lo tres son de fundaci¨®n p¨²blica, impulsadas por diputaciones: Caixa Catalunya (Barcelona) y las de Tarragona y Girona. Sin embargo, las tres no tardaron en adaptar sus respectivas asambleas a la limitaci¨®n del 50% del peso pol¨ªtico y p¨²blico -con un a?o de vigencia- , tal y como se estableci¨® en la Ley Financiera para esquivar que la Comisi¨®n Europea considerara a las cajas entidades p¨²blicas y otorgara a los cr¨¦ditos el car¨¢cter de subvenciones.
El modelo catal¨¢n de cajas se ha caracterizado por la independencia de sus ¨®rganos de gobierno
La Generalitat orientar¨¢ la obra social a cubrir las necesidades de su entorno geogr¨¢fico
En Catalu?a las cajas est¨¢n concebidas como entidades surgidas de la sociedad civil, antes que fundadas bajo el paraguas de instituciones p¨²blicas con el objetivo de atender necesidades de colectivos desprotegidos. El modelo catal¨¢n de cajas se ha caracterizado por la independencia de sus ¨®rganos de gobierno, s¨®lo vulnerada por el impacto de la Ley Financiera, donde CiU y PP pactaron la salida de Josep Vilarasau como presidente de La Caixa, la mayor caja de Espa?a, con un tope de 20 a?os en el cargo para los consejeros. Esta medida afect¨® tambi¨¦n a las presidencias de otras entidades: Josep Parera en Caixa Pened¨¨s, Pere Rif¨¤ en la de Manlleu y Antoni Serra Ramoneda en Caixa Catalunya, aunque otro malabarismo legal salv¨® su silla.
Esquerra Republicana de Catalu?a (ERC) est¨¢ dispuesto a aprovechar su buen resultado en los comicios municipales, en las que duplic¨® el n¨²mero de concejales, para desembarcar en los m¨¢ximos ¨®rganos de gobierno de las cajas, comenzando por Caixa Catalunya y Caixa Layetana, que preparan la renovaci¨®n de sus consejos de administraci¨®n durante el pr¨®ximo a?o. Seg¨²n el responsable del ¨¢rea econ¨®mica del partido independentista, Josep Huguet, ERC pasar¨ªa a estar representado en cinco entidades, en lugar de la ¨²nica, Caixa Manlleu (la m¨¢s peque?a de Espa?a), en la que hasta la fecha mantiene una consejera.
Tras las ¨²ltimas municipales, ERC cuenta con 1.300 concejales, frente a los 1.700 del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), una diferencia que, a juicio de la direcci¨®n de la formaci¨®n republicana, "no justifica" que su partido casi no tenga presencia en los consejos de las cajas, "mientras que el PSC controla la mayor¨ªa de ellos". ERC ha pasado de tener 42 alcald¨ªas en Catalu?a a controlar un total de 123, con lo que v¨ªa ayuntamientos, consejos comarcales y diputaciones, que est¨¢n representados en las cajas de ahorro en calidad de corporaciones locales, espera poder acceder a los consejos de administraci¨®n.
Las corporaciones municipales son la principal v¨ªa de entrada de los pol¨ªticos en los ¨®rganos de gobierno de las cajas catalanas cuyo origen es de naturaleza privada (entidades fundadoras o de inter¨¦s social). Al resto de sillas de las asambleas se accede a trav¨¦s de las entidades fundadoras, de los impositores y de los empleados.
ERC, la llave de la estabilidad de la nueva Generalitat de Catalu?a, promovi¨® durante la campa?a una nueva ley de cajas para aplicar medidas de mayor "transparencia, democracia y control interno" en las cajas, a las que piden m¨¢s implicaci¨®n en la econom¨ªa productiva y una mayor apuesta por la vivienda social. Fuentes del sector aseguran que cuando CiU se acerc¨® a ERC para intentar un pacto de gobierno, detect¨® en ERC un programa "muy intervencionista". Uno de los principales retos de ERC es garantizar "un porcentaje m¨ªnimo" de los recursos captados en Catalu?a a inversi¨®n en esa comunidad, independientemente de la nacionalidad de cada caja.
Nada de ello queda en el pacto del Gobierno tripartito (PSC, ERC e ICV-EUiA), que, sin embargo, contiene un punto calificado como paradoja por fuentes del sector. Se esperan retoques en la ley de cajas, s¨ª, pero con la intenci¨®n de "preservar el actual modelo catal¨¢n" y estabilizarlo, seg¨²n el nuevo consejero de Econom¨ªa y Finanzas del Ejecutivo catal¨¢n, Antoni Castells.
En concreto, el Pacto para un Gobierno catalanista y progresista habla de "mantener el actual modelo de las cajas de ahorro como entidades de naturaleza fundacional", de "realizar las reformas legales necesarias para preservar y consolidar este modelo y para evitar las interferencias legislativas, invasivas de las competencias auton¨®micas, recientemente producidas por el Gobierno central" y de "asegurar la inedepencia y representatividad efectiva" de sus ¨®rganos de gobierno.
El acuerdo tripartito, sin embargo, s¨ª establece un "m¨ªnimo obligatorio de dotaciones a la obra social, congruente con la viabilidad financiera de las entidades y se reforzar¨¢n los ¨®rganos de gobierno responsables de velar por este aspecto", que se deja abierto.
Asimismo, "desde la Generalitat se orientar¨¢ la acci¨®n de la obra social de todas las cajas que operan en Catalu?a para que se destine efectivamente a cubrir las necesidades sociales y culturales de su entorno. En este sentido, se establecer¨¢n los mecanismos adecuados con el fin de asegurar la supervisi¨®n y el establecimiento de las grandes orientaciones por parte de los poderes p¨²blicos, incluido el Parlament", seg¨²n el programa.
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