Un gris Sevilla se impone al Albacete
El Sevilla sali¨® ayer a jugar achampanado. No como si fuera una botella de sidra con ¨ªnfulas (aunque esa definici¨®n tambi¨¦n tienta), sino como con el cava navide?o sin digerir totalmente. En definitiva, con una buena torrija posvacacional, que se tradujo en una primera parte de f¨²tbol de garraf¨®n. La raz¨®n de su victoria estuvo en la candidez del Albacete y la temprana expulsi¨®n de su zaguero Buades.
El Sevilla tiene un problem¨®n de estilo. En la defensa estaba el tembloroso novato ?scar, en lugar del sancionado Pablo Alfaro. En la banda izquierda, Reyes, idolatrado desde que usaba tacat¨¢, lleva con enfado adolescente su ubicaci¨®n t¨¢ctica junto a la cal. A¨²n as¨ª, su calidad fue suficiente para sacarse un pase de gol y otros tres que debieron serlo, a no ser por la empanada que ten¨ªa Anto?ito ayer y por un tropez¨®n de Alves.
SEVILLA 2 - ALBACETE 0
Sevilla: Esteban; Daniel Alves, Javi Navarro, ?scar, David; Podest¨¢ (Anto?ito, min. 46), Mart¨ª; Redondo, Baptista, Reyes (Antonio L¨®pez, min. 90); Dar¨ªo Silva (Germ¨¢n Hornos, min. 87).
Albacete: Almunia; Oscar Montiel, Pablo, Buades, Paco Pe?a; Alvaro (Unai, min. 46), Viaud; Redondo, Pacheco (Mikel, min. 73), David S¨¢nchez (Pablo Garc¨ªa, min. 82); y Aranda.
Goles: 1-0. M. 40. Julio Baptista. 2-0. M. 94. Anto?ito.
?rbitro: T¨¦llez S¨¢nchez. Expuls¨® con tarjeta roja directa a Buades (min. 36) y a Aranda, por doble amonestaci¨®n. Mostr¨® amarilla a Viaud, David S¨¢nchez, Unai, Redondo, Baptista, David y Daniel Alves.
40.000 espectadores en el S¨¢nchez Pizju¨¢n.
Por la derecha la cosa es m¨¢s esquizofr¨¦nica. Se supone que Redondo le hace las coberturas a Alves para que ¨¦ste suba e intimide, aunque la anarqu¨ªa t¨¢ctica del brasile?o hace que en ocasiones se despilfarren los puestos de lateral y el de interior. Cuando funciona, es un arma poderosa pero, cuando no est¨¢ reglado, el p¨¢nico llega a la defensa y la medular sufre. Por el momento, esta disposici¨®n s¨®lo fue realmente interesante en la goleada al Madrid. Baptista empez¨® de mediapunta y meti¨® un gol, pero su lugar no es ¨¦se y Caparr¨®s le retras¨® en la segunda mitad. Lo de Dar¨ªo Silva ya casi ni levanta protestas del p¨²blico. Le faltan ritmo y ganas y lo ¨²nico que hace bien son los brincos de saltimbanqui que regala a cada entrada que le hacen.
Pero los problemas del Sevilla se enfrentaron a un equipo bondadoso, perdon¨®n. El Albacete tiene f¨²tbol, pero le falta un jugador de calidad. No hace falta que sea de galaxia, con uno de constelaci¨®n el equipo manchego despertar¨ªa mucho m¨¢s respeto.
Su disposici¨®n y disciplina en el campo son meritorias, pero la juventud de algunos de sus integrantes se traduce en falta de cuajo del conjunto. David S¨¢nchez se mueve bien y regal¨® al partido un regate de tac¨®n en la frontal del ¨¢rea sevillista. Sin embargo, da sensaci¨®n de indolencia, su calidad es fr¨ªa, poco competitiva. En ocasiones recuerda a la de algunos jugadores de la llamada Quinta del Mini Estadi. Se not¨® mucho la falta de Parri y Delporte. Las bandas no existieron para el ataque del Albacete.
Aranda es uno de esos jugadores de calle tan amados por la ¨¦pica futbol¨ªstica. Nacido en una barrio marginal malague?o, es un delantero ce?udo y protest¨®n que siempre intenta enga?ar a la autoridad. Ayer se gan¨® la roja por recordarle al ¨¢rbitro una agresi¨®n que sufri¨® este ¨²ltimo con un tel¨¦fono m¨®vil en un partido de Copa, en Castell¨®n. Poco m¨¢s.
A¨²n as¨ª, la expulsi¨®n de Buades fue determinante. Viaud se vio forzado a trabajar a destajo, hasta que Ferrando sacrific¨® en el descanso a ?lvaro para meter a otro defensa, Unai.
El Sevilla se acerca a las plazas de competici¨®n europea gracias a un partido deleznable en el juego y el esp¨ªritu. La duda que despierta el momento del equipo andaluz es si sufre de un malestar pasajero o si necesita bistur¨ª.
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