Francia reduce la tasa que grava la inversi¨®n de las empresas para aumentar el empleo

El presidente Jacques Chirac, en un discurso ante empresarios y sindicalistas, present¨® ayer las l¨ªneas maestras de una futura "gran ley de movilizaci¨®n para la creaci¨®n de empleo". La principal medida de la propuesta es la supresi¨®n, durante 18 meses, de la tasa profesional que cobran los ayuntamientos y grava las nuevas inversiones de las empresas. En la actualidad, la citada tasa aporta m¨¢s de 45.000 millones de euros a las cajas de las corporaciones locales y se calcula que, con la iniciativa de Chirac, los ayuntamientos dejar¨¢n de ingresar unos 1.500 millones al a?o.

"Se trata de una medida no financiada", advirti¨® el socialista Didier Migaud, especializado en cuestiones presupuestarias, poco despu¨¦s del discurso del presidente franc¨¦s. "Adem¨¢s, no entrar¨¢ en vigor hasta dentro de varios meses y eso amenaza con congelar las inversiones durante ese lapso", a?adi¨®. La patronal, en cambio, aplaudi¨® a rabiar la decisi¨®n: "Es una noticia importante y esperada que favorecer¨¢ el desarrollo econ¨®mico e industrial de Francia", dijo Ernest-Antoine Seilli¨¨re, l¨ªder de los empresarios.

Esta tasa profesional que se paga a los ayuntamientos tiene en cuenta tanto los bienes muebles como inmuebles de las empresas, as¨ª como el n¨²mero de empleados.

A tres meses de las elecciones regionales y con un paro que no ha dejado de progresar desde que el Ejecutivo conservador vuelve a gobernar el pa¨ªs (junio del 2002), Jacques Chirac lanz¨® ayer su primera gran iniciativa para ocupar el terreno del debate social. A la supresi¨®n de la tasa profesional se a?adieron otros anuncios, como la creaci¨®n de 80.000 viviendas sociales cada a?o -hasta ahora se hablaba de 50.000, pero la promesa no se ha cumplido en 2003-, y el prop¨®sito de acabar con el d¨¦ficit de la Seguridad Social antes de 2007.

Adem¨¢s, Chirac quiere dedicar ahora entre el 2% y el 3% del producto interior bruto (PIB) a la investigaci¨®n. En 2002 y 2003, sin embargo, se recortaron las partidas dedicadas a tal concepto. El plan econ¨®mico tambi¨¦n incluye la concepci¨®n de un "plan de acci¨®n voluntaria contra la desindustrializaci¨®n", la continuidad en la reducci¨®n de la presi¨®n fiscal aplicada a trav¨¦s del IRPF, el facilitar la "transmisi¨®n hereditaria de las peque?as y medianas empresas" y crear un estatuto de "joven empresa personal", que debiera facilitar el surgimiento de 200.000 nuevos empresarios.

En l¨ªneas generales, las todav¨ªa imprecisas medidas de Chirac tienden a flexibilizar a¨²n m¨¢s el mercado laboral y abren la puerta, tal y como denunci¨® el l¨ªder del muy moderado sindicato cristiano CFTC, Jacky Dintinger, a que la tan cacareada reducci¨®n de la presi¨®n fiscal s¨®lo sirva "para el dinero destinado a pagar las pensiones de jubilaci¨®n y para el que servir¨¢ para financiar una mutua de Seguridad Social complementaria", es decir, la puesta en marcha "de un inquietante sistema de protecci¨®n social a dos velocidades".

Se?ales de recuperaci¨®n

Chirac no se equivoca, sin embargo, al querer incentivar la inversi¨®n empresarial, que es en este momento el pariente pobre de una econom¨ªa francesa que da unos primeros signos de recuperaci¨®n. En efecto, el tercer trimestre de 2003 vio c¨®mo el PIB crec¨ªa un 0,4% en vez del 0,3% estimado. Con ello, los economistas m¨¢s optimistas anticipan que el a?o puede cerrarse con un crecimiento del orden del 0,7%, porcentaje que pierde tres d¨¦cimas en las proyecciones de los analistas de varios bancos.

Si el consumo de los hogares y de las exportaciones ha aumentado, as¨ª como el ahorro, la inversi¨®n industrial sigue bajo m¨ªnimos. Las previsiones para el a?o 2004 sit¨²an el crecimiento galo entre el 1,6% y el 2%.

"S¨®lo puedo asegurar que el crecimiento franc¨¦s ser¨¢ ligeramente superior al del conjunto de la zona euro", concluy¨® Alain Lambert, ministro franc¨¦s de Presupuesto.