Guerra de declaraciones entre Argentina y Washington

La guerra de declaraciones entre dirigentes argentinos y estadounidenses, en v¨ªsperas de la Cumbre de las Am¨¦ricas que se celebrar¨¢ la semana pr¨®xima en Monterrey (M¨¦xico) -el martes est¨¢ prevista una reuni¨®n entre Bush y Kirchner-, ha puesto de relieve el aumento de la fisura entre EE UU y sus vecinos continentales del sur.

Lo que comenz¨® con una declaraci¨®n del subsecretario de Asuntos Hemisf¨¦ricos de Estados Unidos, Roger Noriega, que critic¨® la pol¨ªtica del presidente argentino, N¨¦stor Kirchner, hacia Cuba y expres¨® la preocupaci¨®n de Washington por un supuesto giro a la izquierda de Argentina, continu¨® con un rosario de r¨¦plicas y contrarr¨¦plicas en las que han intervenido otros pa¨ªses de la regi¨®n.

Tras las primeras respuestas del ministro de Exteriores, Rafael Bielsa, y de otros integrantes del Gobierno, el presidente Kirchner terci¨® en la pol¨¦mica para reivindicar la dignidad de Argentina. "Terminemos de ser la alfombra", dijo en tono vehemente en un mitin ante varios miles de seguidores. El ex presidente argentino y actual titular de la comisi¨®n permanente del Mercosur, Eduardo Duhalde, respald¨® a su sucesor: "Se acabaron las ¨¦pocas en las que la pol¨ªtica exterior argentina la dictaba Estados Unidos".

En los primeros seis meses de mandato de Kirchner, las relaciones entre Buenos Aires y Washington han tenido varios episodios de signo contradictorio. Por una parte, los ejercicios militares conjuntos de los dos pa¨ªses que iban a realizarse entre el 27 de octubre al 3 de noviembre, en la cuarta brigada a¨¦rea de Mendoza, se suspendieron ante la negativa del Congreso argentino a otorgar total inmunidad a los soldados norteamericanos como pretend¨ªa la Administraci¨®n de George W. Bush. Efectivos de la Fuerza A¨¦rea de Chile, Bolivia, Paraguay, Brasil y Uruguay ten¨ªan previsto participar en las maniobras.

Previamente, el viaje que el ministro Bielsa realiz¨® a Cuba el 11 de octubre, en el que no recibi¨® a ning¨²n representante de la oposici¨®n, hab¨ªa sentado mal en Washington, que todav¨ªa no ha digerido el apoyo expl¨ªcito que el presidente argentino brind¨® al l¨ªder opositor boliviano Evo Morales, tras la ca¨ªda del presidente Gonzalo S¨¢nchez de Losada. El mandatario depuesto era uno de los aliados privilegiados de Estados Unidos en Am¨¦rica Latina. La Administraci¨®n Bush considera a Morales, dirigente de los productores de hoja de coca, como un peligro para la estabilidad de Bolivia y de la regi¨®n andina.

Aumento de tarifas

Estos desencuentros aparentes no han impedido que el Gobierno de Kirchner haya coqueteado con la Embajada de EE UU y algunas empresas de esta nacionalidad a la hora de discutir y negociar asuntos espinosos, como el aumento de tarifas, con compa?¨ªas extranjeras con intereses en Argentina. Hasta el encontronazo de esta semana, un manto de cordialidad presid¨ªa las relaciones Buenos Aires-Washington, cuyos presidentes se reunieron por primera vez en la capital estadounidense el pasado julio.

Brasil, el l¨ªder regional, ha hecho o¨ªr su voz en apoyo de Argentina, y ha recordado las excelentes relaciones bilaterales. Marco Aurelio Garc¨ªa, asesor del presidente Lula da Silva en pol¨ªtica internacional, calific¨® de "impertinentes" las declaraciones de Roger Noriega. Kirchner y Lula firmaron recientemente en la capital argentina el llamado Consenso de Buenos Aires, en el que ambos gobernantes esbozaron una alternativa al modelo de desarrollo para la regi¨®n defendido por Estados Unidos, conocido como Consenso de Washington. Como ejemplo de la nueva "alianza estrat¨¦gica" entre Brasilia y Buenos Aires, el Gobierno de Lula da Silva ha invitado a Argentina a compartir el asiento no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU que ocupa Brasil desde el 1 de enero.

Por su parte, el presidente venezolano, Hugo Ch¨¢vez, ha aprovechado el encontronazo verbal entre Argentina y Estados Unidos para afirmar que est¨¢ en proceso de formaci¨®n un nuevo eje Caracas-Brasilia-Buenos Aires, "con una nueva visi¨®n geopol¨ªtica, econ¨®mica y de integraci¨®n".