Simplemente Arenas

El vicepresidente segundo del Gobierno de Espa?a, Javier Arenas, baja cada fin de semana a Andaluc¨ªa y nos regala una raci¨®n de sus grandes conocimientos sobre lo divino y lo humano que, semana tras semana, lo que tienen en com¨²n es el denigrar a su tierra, a sus gentes y a los gobernantes que ¨¦stas democr¨¢ticamente han elegido.

Para la ¨²ltima excursi¨®n ha buscado, entre otros, el tema de la creaci¨®n de empleo y dice que el nivel que registra Andaluc¨ªa en los ¨²ltimos a?os (ampliamente superior a la media de Espa?a) es debido a las pol¨ªticas que desarrolla el Gobierno de la naci¨®n, atribuyendo de paso a la Junta de Andaluc¨ªa una obsesi¨®n por apuntarse el protagonismo de la creaci¨®n de empleo.

No explica Arenas cual es su m¨¦todo para llegar a la conclusi¨®n de que la creaci¨®n de empleo se produce como resultado de las exclusivas decisiones de su gobierno, pero eso no es ¨®bice para que se lance a la propaganda, tal vez pensando que la sociedad a la que se dirige haga sus an¨¢lisis tan simples como los hace ¨¦l mismo.

La Junta de Andaluc¨ªa sabe muy bien que el protagonismo de la creaci¨®n de empleo en cualquier sociedad est¨¢ muy repartido. Cuando salen datos como los aparecidos hace unos d¨ªas (en el a?o pasado, el paro registrado subi¨® en Espa?a y se redujo en esta comunidad), la Junta de Andaluc¨ªa (que informa de la evoluci¨®n del empleo en cualquier circunstancia) se felicita por ellos, pero no comete el error (como Arenas) de atribuirse un protagonismo exclusivo.

?Qu¨¦ duda cabe que algo tendr¨¢ que ver en la creaci¨®n de empleo el Gobierno de Andaluc¨ªa, que tiene competencias plenas en pol¨ªticas activas de empleo y de fomento econ¨®mico, dentro del marco general de ordenaci¨®n econ¨®mica del Estado! Pero tambi¨¦n sabemos que los protagonistas principales de la creaci¨®n de empleo en una econom¨ªa de mercado son las empresas y sus trabajadores, as¨ª como las patronales y sindicatos, que son qui¨¦nes generan un clima de relaciones que hace posible la inversi¨®n productiva. Luego, la coyuntura internacional ayuda tambi¨¦n bastante y, por supuesto, las actuaciones de los gobiernos, posiblemente en mayor medida las de los m¨¢s cercanos, si tienen competencias en materia econ¨®mica y laboral.

Es evidente que si un gobierno impulsa el di¨¢logo entre las organizaciones empresariales y sindicales (la Junta de Andaluc¨ªa ha suscrito con esas organizaciones cinco acuerdos de concertaci¨®n de car¨¢cter tripartito con la creaci¨®n de empleo como primer objetivo) tendr¨¢ mayor responsabilidad que otro que s¨®lo lanza mensajes de presi¨®n hacia una de las partes.

De la misma manera, si en un territorio la evoluci¨®n es mejor que en el conjunto de Espa?a (en Andaluc¨ªa as¨ª lo ha reconocido hasta el ministro de Hacienda, compa?ero de Arenas) alguna parte de la explicaci¨®n debe estar en el comportamiento de la administraci¨®n que gobierna ese territorio. Y es cierto que la evoluci¨®n de Andaluc¨ªa, se mida como se mida, es mejor que Espa?a.

La contabilidad nacional afirma que en los ¨²ltimos cuatro a?os con datos para ambos territorios (1999-2002), el crecimiento del empleo ha sido siempre superior en Andaluc¨ªa que en Espa?a y de los siete ¨²ltimos (periodo 1996-2002) ese mismo comportamiento se ha dado en seis. La Encuesta de Poblaci¨®n Activa se?ala, por su parte, que en los ocho a?os que van desde 1996 hasta el 2003, en siete de ellos ha sido superior el crecimiento de la ocupaci¨®n de Andaluc¨ªa que el de Espa?a.

Los cotizantes a la Seguridad Social (un tercer indicador del nivel de ocupaci¨®n) tienen una evoluci¨®n similar: en los tres ¨²ltimos a?os, el crecimiento ha sido mayor en Andaluc¨ªa que en Espa?a y de los ¨²ltimos ocho a?os, en seis ha ocurrido igual. Todos ellos son indicadores que elaboran organismos estatales, el INE o el propio ministerio de Trabajo, por lo que no debe quedar duda sobre el particular.

Como tampoco puede quedar duda de cual es el punto de vista del Gobierno de Andaluc¨ªa sobre esta cuesti¨®n; es la sociedad andaluza, el conjunto de los agentes econ¨®micos y sociales, la que debe felicitarse por esta evoluci¨®n que, no obstante, no puede satisfacernos por completo, ya que Andaluc¨ªa a¨²n tiene un ¨ªndice de ocupaci¨®n por debajo del que alcanzan las sociedades modernas y un nivel de paro intolerable para el nivel de desarrollo y de bienestar al que aspira nuestra sociedad.

Es a presentar iniciativas y proyectos serios y realizables para conseguir ese objetivo a lo que deber¨ªa aplicarse el partido que lidera el se?or Arenas en Andaluc¨ªa, si aspira alg¨²n d¨ªa a gobernar esta tierra, y no a montar pol¨¦micas o propagar consignas simplistas con el objetivo de descalificar al Gobierno andaluz. A lo peor es que no sabe hacer otra cosa y, simplemente, estamos ante Arenas...

Jos¨¦ Antonio Viera Chac¨®n es consejero de Empleo y Desarrollo Tecnol¨®gico