Que le curen las secuelas

Monserrat Antol¨ªn no pod¨ªa imaginar que el atentado sufrido por su marido, un polic¨ªa de 46 a?os, en los a?os ochenta cuando prestaba servicio en el Pa¨ªs Vasco le traer¨ªa tantos problemas. Desde hace una semana protesta con un cartel frente a la Subdelegaci¨®n del Gobierno en C¨®rdoba. Denuncia que el Gobierno central "se niega a sufragar" la asistencia psicol¨®gica que su marido recibe desde hace alg¨²n tiempo, a pesar de que ha sido reconocido por el Gobierno como v¨ªctima del terrorismo.

Antol¨ªn alude a la certificaci¨®n de tres especialistas que diagnosticaron a su marido estr¨¦s postraum¨¢tico despu¨¦s de aquel atentado terrorista, en el que "sufri¨® da?os f¨ªsicos y tuvo que ser ingresado", explic¨®.

El Tribunal M¨¦dico del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa sostiene otra cosa. El comisario jefe provincial de C¨®rdoba, Federico Cabello, asegur¨® ayer que se trata de una "enfermedad com¨²n y no profesional" como consecuencia del atentado. Cabello neg¨® que el agente fuera v¨ªctima de otro intento de atentado en 1990, como sostiene Monserrat Antol¨ªn.

"Desde hace dos a?os largos mi marido tiene que ir una o dos veces a la semana al psic¨®logo", a?ade Antol¨ªn, "y las consultas cuestan unos 70 euros". Monserrat, que trabaja como limpiadora, asegura que la situaci¨®n econ¨®mica de la familia no es ¨®ptima, ya que su marido ha pasado a una segunda actividad en el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa. "Le dan una paga de unos 1.000 euros y con eso no nos da", explic¨®. La inclusi¨®n del polic¨ªa en dicha segunda actividad est¨¢ en manos de un contencioso-administrativo que los afectados de este cuerpo de seguridad mantienen contra el Estado.

La esposa del polic¨ªa exige que su marido sea jubilado, ya que al pasar a segunda actividad su remuneraci¨®n se ve mermada despu¨¦s de 20 a?os de servicio.

"Si ya no sirve para realizar su labor policial, si no est¨¢ en condiciones de llevar un arma, por qu¨¦ est¨¢ en segunda actividad, por qu¨¦ no lo jubilan", se lamentaba ayer.

Antol¨ªn recibi¨® el pasado 2 de enero la comunicaci¨®n del servicio de atenci¨®n a las v¨ªctimas del terrorismo que negaba a su marido los costes de la asistencia psicol¨®gica que recibe y desde entonces vive a¨²n m¨¢s angustiada.

Ayer consigui¨® hablar con el subdelegado del Gobierno en C¨®rdoba, Javier de Torre. "Me dijo que intentar¨ªa solucionar el tema", explic¨®. No obstante, Monserrat Antol¨ªn asegur¨® que continuar¨¢ acudiendo cada d¨ªa ante la sede del Gobierno para exigir los derechos que recoge la Ley de Solidaridad con las V¨ªctimas del Terrorismo.

El comisario provincial tambi¨¦n lament¨® ayer que la familia no se hubiera puesto en contacto con las instituciones para intentar solucionar el tema antes de hacer p¨²blica su protesta en plena calle. La esposa del polic¨ªa contest¨® que "lo menos que pod¨ªan haber hecho es llamarme; si estoy con una pancarta delante de la subdelegaci¨®n es porque ya he llamado a todas las puertas y no me han hecho caso", concluy¨®.