La comida

La candidata a la Presidencia de la Junta de Andaluc¨ªa por el PP, Te¨®fila Mart¨ªnez, se ha pasado la semana intentando recibir explicaciones de la reuni¨®n que mantuvieron en Sevilla el consejero de Presidencia de la Junta y un se?or, por decir algo, del Gobierno catal¨¢n. Es normal que quiera saber lo que han comido, sobre todo despu¨¦s de la que ha llovido como consecuencia del encuentro del segundo con asesinos en busca y no capturados, porque si los encuentras no te sirven para lo que han servido.

Pero, claro, despu¨¦s de todo, una comida es una comida, y reunirse puede uno reunirse hasta con Gadafi y traerse un caballo regalado porque no hay que mirarle el diente, sin que la cosa no vaya m¨¢s lejos. Eso s¨ª, que puestos a pedir informaci¨®n, tampoco estar¨ªa mal que se enterara, antes de hablar de dimisiones propias, de que el PP mantiene cinco acuerdos con ERC, y que se sepa no se han roto. Tampoco estar¨ªa mal que explicara las razones por las que el fiscal ha imputado de varios delitos contra la administraci¨®n al presidente de la Diputaci¨®n de Castell¨®n, que es y sigue siendo del PP, o, bien, como nadie le dice a don Manuel -l¨¦ase Fraga- que no son menudencias que su compa?ero de filas y alcalde por el PP de un pueblo de Galicia haya sido condenado por tocarle las tetas a una menor. Y si quiere puede seguir inform¨¢ndose de por qu¨¦ no se ha demolido el antiguo cuartel de artiller¨ªa de C¨¢diz, cuyo derrumbe ha costado la vida a un joven.

En fin, a veces pienso y no quiero pensar, que cuando existe tanto inter¨¦s en hacernos mirar para un lado no est¨¢ mal mirar para los dos, y este segundo no es nada bueno por lo que se est¨¢ conociendo. No es extra?o pues, que con estos mimbres que est¨¢n naciendo en el PP no le parezca oportuno debatir. Es mejor hablar de comidas y as¨ª que quede en la imaginaci¨®n de cada cual lo que quiera pensar que hablaron el consejero de Presidencia y el tal se?or, por decir algo, del Gobierno catal¨¢n. Lo dem¨¢s, lo que existe, no conviene hablarlo. Menos en directo o en p¨²blico. No se entiende nada. Como no se entiende que pueda conocerse una reuni¨®n con delincuentes y que se prefiera contarla a detenerlos. Mira que si el reunirse no fuera delito y el no detenerlos s¨ª. Cardenal sabr¨¢, aunque obispos tiene la Iglesia.